Si algo tremendamente español, ese es el sainete. Inicialmente concebido como pieza teatral que servía de divertimento entre los actos de una pieza dramática mayor, fue logrando identidad propia y, cinematográficamente, supo saltar para convertirse en la comedia que tan bien ha definido el séptimo arte desde su concepción. La comedia española, concretamente, es uno de los géneros que más y mejor suele conectar con el público, gracias a su ligereza y su objetivo principal, que es el puro entretenimiento. En esa línea, llega a los cines 'La novia de América', el regreso de Alfonso Albacete a la gran pantalla.
Ocho años han pasado desde que Alfonso Albacete estrenase 'Solo química', su última propuesta pensada para estreno en cines. Esta vez, el realizador se atreve con una producción con mirada internacional, al ser una coproducción entre España y México, que llega a salas comerciales nacionales tras su exitoso paso por el país norteamericano, donde triunfó en la plataforma Vix+. La premisa es sencilla, Ana, una protagonista que aún se está recuperando de un fuerte desengaño amoroso y que descubre que su padre, un sesentón que había enviudado apenas un par de años antes, ha decidido volver a casarse en México y lo hace con una hermosa muchacha que resulta ser más joven que ella.
Por supuesto, el público sabrá cómo irá desarrollándose esta historia de enredos. Todo cumple según lo previsto, Albacete, quien escribe el guion junto con Charo Albacete, aprovecha los clichés de las comedias de choques culturales, al más puro estilo Dany Boon en 'Mi familia del norte' o Emilio Martínez-Lázaro en 'Ocho apellidos vascos', llevándolo a un romance transoceánico. Aquí se ve cómo ese choque se aumenta con un estilo de humor radicalmente distinto, algo que se refleja magníficamente con Miren Ibarguren, quien parece poseída por el espíritu de Jennifer Aniston o Jennifer López, dos reinas de las rom-coms hollywoodienses.
Comedia romántica con espíritu gamberro
Es Ibarguren quien levanta esta comedia, gracias a un estilo de humor seco y directo que sabe complementarse con el carácter latino y zalamero de los protagonistas mexicanos, con Christian Vázquez a la cabeza, quien se convierte en el galán de Ana. Ambos derrochan química, aunque lo que hace que 'La novia de América' sea una comedia romántica distinta es su toque de humor gamberro, en el que destacan algunos de sus personajes secundarios.
Aquí juega un papel fundamental Pepa Charro, conocida también como La Terremoto de Alcorcón, quien tiene una serie de secuencias con las que se roba el show. De hecho, hacen pensar que hubiera estado genial que, aunque Miren Ibarguren esté estupenda, ella sea la protagonista absoluta de esta propuesta.
Con ese toque de humor gamberro y un reparto en el que brillan sus actrices, 'La novia de América' es lo que ofrece, una propuesta simpática, que busca encontrar un momento cómplice con el público a base de risas y la historia de una joven que vuelve a creer en el amor, con el añadido de buscar visibilizar la diversidad de las relaciones, tanto en términos de nacionalidades como en otros (con personajes LGBT, por ejemplo). Comedia romántica con alma canalla.
Nota: 5
Lo mejor: El momento de Pepa Charro convertida en La Llorona.
Lo peor: Es tremendamente predecible, su humor tampoco es especialmente innovador y, ¿qué eso de poner en duda la importancia de la separación de bienes?