¿Quién está contento con sus vecinos? Siempre hay alguno que no termina de convencernos, que hace más ruido de lo normal o que es demasiado complaciente o se ocupa demasiado de los problemas de los demás. Y es que vecinos los hay para todos los gustos y colores... y ni los buenos son tan buenos ni los malos son tan malos.
Un tema el de las relaciones que está más que trillado tanto en la gran como en la pequeña pantalla. De hecho, si no fuera por el hecho de que Jennifer Lopez es la protagonista, 'Obsesión' podría ser una de esos telefilmes que se programan en las sobremesas de los sábados y los domingos en Antena 3 y no pasan anteriormente por las salas de cine como ocurre con la cinta de Rob Cohen.
JLo, que de vez en cuando deja el micrófono para convertirse en actriz con sus admiradores y sus detractores, se mete en la piel de Claire Peterson, una profesora de literatura que está intentando iniciar una nueva vida junto a su hijo tras enterarse de que su marido le estaba siendo infiel.
Mientras piensa qué rumbo tomar a nivel sentimental, se instala en la casa de al lado un apuesto joven que, ¡oh sorpresa!, ama la literatura, tiene intención de estudiar en el mismo colegio de secundaria en el que da clase Jennifer Lopez y es el perfecto manitas para ayudar a una mujer sin marido en casa y el mejor acompañamiento de su único hijo.
Un pase de sobremesa
Noah (Ryan Guzman) no tardará en iniciar una peligrosa relación "erótico-sentimental" con su vecina que se volverá más que turbia el día que Claire decide cortar de raíz y dar una segunda oportunidad a su marido, algo que le enfurece sobremanera, comenzando una estrategia de acoso y derribo sin tapujos ni miramientos que puede acabar en tragedia.
Poco a poco y de forma totalmente predecible e incluso en algunos momentos cómica más que tensa, Claire se va dando cuenta del lado más obsesivo y oscuro del inocente Noah. Tiene que pasar más de la mitad de los 92 minutos de película para que veamos un poco de movimiento, pobre, pero movimiento.
Por tanto, estamos ante una película para los amantes de los telefilmes. De hecho, su final no se diferencia mucho de los de otras películas de este corte obsesivo compulsivo en el que una persona siente fijación por otra y está dispuesto a todo. ¿Conseguirá Jlo atraer al público a las taquillas de los cines españoles con más fortuna que en Estados Unidos?