La película original ya causó sensación en su momento y, ahora, la joven cineasta Sara Colangelo realiza el remake de esta historia sobre la frustración y el miedo a la mediocridad. En 'La profesora de parvulario' asistimos al drama de una profesora de infantil, Lisa, con una vida convencional que, un día, descubre que uno de sus alumnos, Billy, posee un talento innato para la poesía. A partir de ese momento, Lisa intentará proteger y fomentar el talento del niño hasta puntos un tanto perturbadores.
La segunda obra de la cineasta norteamericana no tiene un arranque demasiado fuerte debido a una premisa engañosa. Cuando leemos que es una película que va ser distribuida por Netflix y que va sobre una profesora que descubre el talento de un niño, pensamos que se trata del típico relato aspiracional con algún toque de crítica social. Para nuestra grata sorpresa, la historia posee, en realidad, el tono de un drama humano muy oscuro (casi propio de Haneke) que apenas se percibe al principio, debido a la ausencia de una estética de género clara, y que va revelándose conforme que se va conociendo a la protagonista gradualmente, una elección sensacional ya que la película se vuelve impredecible y logra engendrar un final inesperado.
Si hay algo realmente atractivo en esta historia es el personaje de Lisa. Lisa es una mujer que lleva veinte años trabajando como profesora de parvulario y con una vida bastante estable. Tiene un marido que la adora y dos hijos adolescentes que también. Le encanta su trabajo y varias veces por semana acude a un curso sobre poesía. Todo de lo más convencional.
Sin embargo, Lisa es incapaz de escribir un buen poema, lo que la frustra y le recuerda un tiempo pasado en el que ella solía ser más creativa, en el que tenía talento. Por ello, la aparición de ese niño que crea poemas de la nada le genera una respuesta exagerada, ya que, de alguna manera, ella intenta arreglar su mediocridad protegiendo el talento del pequeño.
El tema de la película es sumamente actual e interesante. La necesidad de destacar, el miedo a la mediocridad, el arrepentimiento, el rencor hacia la gente que te educó (y no cuidó tu talento), y lo peor, el terror a una existencia intranscendente. Todos estos temas tan complejos se tratan con una sutilidad encomiable que, por supuesto, no podría haber sido posible sin la impecable interpretación de Maggie Gyllenhaal. Pero, además, 'La profesora de parvulario' aprovecha para hacer una crítica que en el contexto americano tiene aún más sentido: la existencia de un sistema que mengua el talento de los niños en vez de incentivarlo.
Remake de una película israelí
'La profesora de parvulario' es un remake de una película israelí de 2014, dirigida por Nadav Lapid, que, aunque no contó con la distribución de la versión americana, sí que gozó de una gran aceptación por parte del público y la crítica.
Sara Colangelo ya había visto la película y cuando los productores de ésta le hicieron un pitching no dudó en aceptar el proyecto: "Creo que el trabajo de Nadav es maravilloso, es un gran director. Nadav se enfrentaba a muchos temas en la película. Él buscaba hablar del arte y de la masculinidad en la sociedad, y de cómo esta última interfiere en la vida de un artista...Nunca habría aceptado hacer el remake sino hubiese podido transformarlo realmente en algo mío. Ví algo de parábola en esta historia y sentí que podría situarla en el contexto americano para hablar también sobre el valor del arte aquí en este momento desde un punto de vista femenino."
Nota: 7
Lo mejor: La complejidad del personaje principal.
Lo peor: Un arranque flojo que no engancha.
