Cuando parecía que el cine sobre la Segunda Guerra Mundial había llegado a un punto en el que solamente narrativas atrevidas como las de László Nemes o Jonathan Glazer tenían cabida (tanto 'El hijo de Saúl' como 'La zona de interés' demuestran que es posible ir más allá de lo convencional a la hora de narrar el horror de la Shoá); la fuerte de ola de antisemitismo que está viviéndose en todo el mundo vuelve a poner en primera línea propuestas como 'La promesa de Irene'.
Basada en la obra de teatro 'El voto de Irena' de Dan Gordon. El propio dramaturgo adapta el relato para el cine. De hecho, sorprende cómo apenas se atisba el origen teatral del largometraje. Tanto la cinta como la obra están inspiradas en la vida de Irena Gut Opdyke, una enfermera polaca que fue ama de llaves del comandante de la Wehrmacht Eduard Rügemer durante la ocupación nazi de su país. Desde esa posición, aprovechó para sacar de contrabando a judíos del gueto al bosque circundante, donde les entregaba comida.
La cinta refleja cómo la propia Irena arriesgó su vida al ocultar a judíos en la mansión de Rügemer y cómo éste, al descubrirla, accede a ser su cómplice a cambio de favores sexuales. Louise Archambault, realizadora que ha sabido traer propuestas de corte social como 'Gabrielle' o 'Y llovieron pájaros', se atreve con esta propuesta de época en la que logra transmitir ese espíritu valiente de una heroína que decidió romper su silencio cuando vio que surgieron voces negacionistas sobre el genocidio de más de seis millones de judíos durante la Segunda Guerra Mundial.
Una heroína cuya historia es rescatada del olvido
La propuesta es clásica y convencional. No obstante, logra sobresalir gracias a su actriz protagonista. Sophie Nélisse ya contaba con la experiencia de encarnar a una heroína de la Segunda Guerra Mundial en 'La ladrona de libros'. En esta ocasión, da un paso más. Era complicado expresar cómo la religiosidad de Irena, de confesión católica, había siedo esa fuerza interior que le impulsó a salvar la vida de tantas personas, arriesgando la suya propia.
Es ese espíritu lo que eleva a esta propuesta y logra que sobresalga sobre otros largometrajes ambientados en la Segunda Guerra Mundial que narraron hazañas de héroes anónimos que la Historia no debe olvidar. En un momento en el que el odio a los judíos está cobrando fuerza, esta propuesta puede verse cómo una cinta didáctica que invite a mirar hacia atrás para no repetir los errores del pasado.
'La promesa de Irene' logra cumplir con su cometido y consigue transmitir el poderoso alegato de una heroína cuya fuerza no debe quedar olvidada. Con actuaciones que logran elevar la propuesta, Louise Archambault demuestra tener mano también el cine de época.