Pocas veces, una producción de animación stop-motion falla. Tal es el nivel de artesanía que tiene detrás, que hasta las producciones consideradas menores, como 'Los Boxtrolls' o 'Captain Morten and the Spider Queen', logran elevar el nivel gracias un diseño y un estilo tan cuidado, que esto se suelen tener en cuenta a la hora de valorarlas. Sin embargo, cuando se trata de producciones notables, la sensación de satisfacción es aún mayor, prueba de ello es la producción checa 'Ratones y zorros. Una amistad de otro mundo', ópera prima de Jan Bubenicek y Denisa Grimmová, presentada en Mi Primer Festival de Cine 2021.
Aunque estrenada dentro de este evento de ocio familiar que invita a las familias a deleitarse con la esencia de los festivales de cine en pequeña escala, permitiendo a los más pequeños de la casa conocer diferentes narrativas, estilos de animación y nacionalidades respecto a la industria de Hollywood, 'Ratones y zorros' llega también a salas comerciales, demostrando que es posible divulgar y entretener a la par.
El debut en el largo de Bubenicek y Grimmová es la consolidación de ambos en la animación, pues los tienen tienen experiencia tanto en la técnica stop-motion como en producciones de animación tradicional, el primero participó en la producción de la aclamada 'Alois Nebel'. Con 'Ratones y zorros', ambos muestran su habilidad para crear una fábula clásica para los más pequeños sin que eso signifique crear una premisa simple. Es más, los adultos podrán valorar un cuento con moraleja hecho cine, de aquellos que cada vez se ven menos.
Una deliciosa aventura de animación
Aunque provenientes del país de uno de los maestros del stop-motion, Jan Svankmajer, el tándem Bubenicek-Grimmová buscan tener un estilo más cercano al de las producciones de animación de Wes Anderson, aunque su historia esté más apegada al tipo de narración de directores como Benjamin Renner, Claude Barras o Thomas Szabo y Hélène Giraud, evocando a 'Ernest y Célestine' o 'Minúsculos: El valle de las hormigas perdidas', al tener dos protagonistas enfrentados que forman una amistad improbable.
Pero lo que hace de 'Ratones y zorros' una propuesta singular es su apuesta por narrar la muerte. La cinta comienza con el fallecimiento de sus protagonistas y lo que eso desencadena. Es como si Don Bluth hubiera narrado lo que sucede después de 'Todos los perros van al cielo'. Esa apuesta por narrar a los más pequeños, de manera metafórica, el duelo, combinando con una serie de aventuras, convierte al filme en una apuesta equilibrada entre lo maduro y lo infantil, pues nunca olvida que está narrando un relato para los más pequeños de la casa.
Y es ahí donde se ve la virtud de 'Ratones y zorros', que cautiva tanto por ser una entrañable historia de aventuras, cuyo trasfondo le dota de una complejidad equilibrada, como por una animación espléndida que conquista por lo elaborado de su diseño, que ofrece un estilo aparentemente sencillo. Una película para el disfrute familiar que vuelve a dejar en evidencia la importancia de darle una oportunidad a aquellas producciones ajenas a los grandes estudios de Hollywood.
Nota: 8
Lo mejor: Sus personajes protagonistas tienen un gran carisma. Su animación.
Lo peor: Infravalorarla por ser una producción infantil.