å

CRÍTICA

'Reina de corazones': Dulce fruta prohibida

Crítica de 'Reina de corazones', dirigida y coescrita por May el-Toukhy. Protagonizada por Trine Dyrholm, Gustav Lindh y Magnus Krepper. Premio del Público en el Festival de Sundance 2019.

Por Miguel Ángel Pizarro Más 28 de Febrero 2020 | 11:17
Colaborador de eCartelera. Apasionado del cine y la cultura en general. Cine europeo y de animación, mi especialidad.

Comparte:

¡Comenta!

La polémica y el cine han ido muchas veces de la mano, pues la provocación es también un ejercicio artístico. Desde Dinamarca llega una propuesta que viene a romper con esa imagen perfecta que se tiene (desde el extranjero) con respecto a las sociedades escandinavas como adalides del progreso y los derechos sociales, 'Reina de corazones', cuya referencia a la villana de 'Alicia en el país de las maravillas' de Lewis Carroll no es casualidad.

Reina de corazones

Para su segundo largometraje, la cineasta danesa, con raíces egipcias, May el-Toukhy hace un afilado retrato de la sociedad burguesa de su país, lo realiza de forma sibilina y punzante, diseccionando poco a poco el verdadero rostro que hay detrás de un gesto amable y aparentemente comprometido. el-Toukhy toca teclas polémicas, al tener una protagonista que comienza siendo una defensora de causas sociales justas para acabar siendo una gélida y calculadora victimaria.

Para ello, crea una tela de araña, en la que disfraza su brutal crítica en un drama sobre una familia de clase alta, en la que la protagonista, una mujer de mediana edad casada con un hombre de edad similar, con dos hijas, ve su vida cambiar cuando llega a vivir con la familia el hijo mayor de su marido, fruto de una relación anterior. Ese es el desencadenante, en el que se muestra que esa esposa que aparenta ser feliz, con un trabajo modélico, pues es abogada de menores de edad que han vivido abusos, tiene una vida vacía e intenta llenarla seduciendo a su hijastro.

Una propuesta incómoda y perversa

Sin embargo, esta Mrs. Robinson no es solo una mujer madura que busca darle chispa a su vida. Ahí es donde está el giro y la crítica social introducida por el-Toukhy, que firma el guion junto con Maren Louise Käehne, haciendo que esta polémica haya sido creada exclusivamente por mujeres. La seducción a su hijastro es, finalmente, un ejercicio de dominación y poder, provocando que aquella defensora de los necesitados acabe convirtiéndose en el verdugo, en aquello que condena. Sin duda, una apuesta controvertida, que puede mirarse incluso como una autocrítica.

Reina de corazones

En una época en la que se defiende la igualdad y se denuncia la situación de abusos que han vivido (y viven) mujeres de todo el mundo, con los movimientos Me Too y Time's Up como principales símbolos, el-Toukhy hace un perverso ejercicio sobre el tema. Perverso por mostrar que la igualdad también reside en lo más oscuro del ser humano, en mostrar a una mujer cruel, manipuladora, gélida cual glaciar, que hace de su marido y de su amante víctimas de sus más bajos deseos.

Y, efectivamente, esa mirada crítica está muy bien ejecutada, al ser la protagonista una mujer de clase alta, dejando en evidencia la mirada burguesa sobre el progreso y los avances sociales, sobre lo fácil que es hacer juicios morales cuando se es de posibles. De ahí, que 'Reina de corazones' sea tremendamente incómoda y sitúe a el-Toukhy como una directora que va en la línea de otras miradas femeninas polémicas como las de Claire Denis, Lynne Ramsay e, incluso, Liliana Cavani.

Trine Dyrlholm está espléndida

Aunque su guion es certero y punzante cual bisturí de cirujano, es la magistral interpretación de Trine Dyrholm la que logra provocar esas reacciones tan incómodas. La veterana y aclamada actriz danesa ofrece una de sus mejores interpretaciones, siendo capaz de mostrar ardiente deseo y calculadora frialdad en cuestión de segundos. Salvando las distancias, en esta propuesta parece mimetizarse con Isabelle Huppert, al enfrentarse a un personaje extremo de una manera asombrosamente natural.

Reina de corazones

A su lado están el joven Gustav Lindh y el maduro Magnus Krepper, ambos se convierten en dos comparsas diferentes de la protagonista. Ambos acaban siendo víctimas, pero con una perspectiva completamente diferente. Uno desde una mirada algo inocente y, sobre todo, apasionada; el otro desde un enfoque más pragmático y ambiguo.

'Reina de corazones' es una película polémica, que viene a remover a una burguesía asustada, con una protagonista fascinante, que provoca que el público caiga también en su telaraña. May el-Toukhy se perfila como una de las figuras más interesantes del cine nórdico, con una visión transgresora y sugerente.

Nota: 8

Lo mejor: La interpretación de Trine Dyrholm y su incómoda historia de bajas pasiones.

Lo peor: Al ser tan incómoda, provocará juicios de valor de cierto tipo de público.