El director alemán Christian Zübert trae con su sexta película la realidad más actual, en la que entremezcla la situación y preocupaciones con las que muchos, y sobre todo muchas, se pueden ver identificados, a la vez que nos presenta un drama thriller basado en la desaparición de una niña.
'Respira' tiene tres grandes atractivos que te hacen decantarte por ver esa película antes que otra. Por un lado, está la dualidad Grecia/Alemania, que se ve bien representada en el día a día de las protagonistas. Por otro lado, el hecho de que los personajes principales sean dos mujeres, ofreciéndonos una nueva dimensión de análisis como son los conflictos propios de este sexo, y por último, un pequeño juego narrativo en el que se nos cuenta la historia desde dos perspectivas.
Pero, antes de nada, pongámonos en situación. En un inicio, 'Respira' nos presenta a Elena (Chara Mata Giannatou), una joven griega que, aunque tiene estudios, no ve un futuro laboral en su país a corto y medio plazo. Tanto ella como su novio están desempleados y, harta de ver los días pasar, decide ir a buscarse la vida a un país donde haya más trabajo y riqueza: Alemania, ¿os suena esto?
Pero tal decisión de un cambio de vida no es una simple contextualización para contar el resto de la historia, sino que tiene una importancia propia: no explica por qué Elena marcha, por qué a Frankfurt, cómo reacciona su pareja, etc. Esta presentación de la vida de Elena en Grecia es bastante importante para poder percibir el mensaje que nos quiere transmitir la película, o al menos para sensibilizarnos sobre las diferencias económicas entre la Europa "guay" y la Europa "a la que nadie quiere parecerse", y que es el primer elemento que llama la atención de la película.
Busco trabajo
A partir de su marcha a Frankfurt, vemos nuevos problemas y asuntos reales de la juventud y de las mujeres, como otro elemento clave: Elena se entera en Frankfurt, sola, de que está embarazada. Esto le llevará a trabajar como cuidadora de la hija de Tessa, nuestra otra protagonista, interpretada por la ya veterana en el cine alemán Jördis Triebel. Ahí es donde empieza todo, la contraposición entre un tipo de vida y otra, pero también llega la tensión, y es que la hija de Tessa desaparece en un descuido de Elena, ¿cómo se resolverá este entramado?
Desde que la conocemos, Tessa es un personaje muy interesante, y también complejo. Ella, al igual que su marido, tiene un buen trabajo y una vida acomodada, pero, ¿perfecta? Si Elena se enfrenta a los problemas del desempleo, Tessa lo hace a las expectativas que la sociedad tiene de ella, y a la dificultad para compaginar su vida laboral y familiar.
Vemos, por tanto, dos realidades de dos tipos de mujeres, dos madres, cuyas circunstancias sociales y su género las hace ser víctimas a su manera. Por ello, 'Respira' resulta muy interesante, cada mujer se podrá ver más identificada por Elena o Tessa, y no hace falta cambiar de país para ello. A ratos comprenderás mejor a una, en otro momento a otra, ¿te decantas por una? ¿Son más diferentes o parecidas? ¿Hablamos de personas o hablamos de clases sociales? Esas preguntas sólo las puede responder cada espectador.
Alemania y Grecia, una comparación inevitable
Un punto a favor de la 'Respira' es que haya sido rodada tanto en alemán como en griego, manteniendo la identidad de cada país. El hecho de que ambas regiones estén representadas no sólo en la pantalla, sino también en la producción, le da mayor peso.
'Respira' es, en definitiva, una película de personajes y de clases sociales, es decir, lo que nos quiere enseñar es a Elena y a Tessa y sus realidades. Sin embargo, no lo hace de manera ajena a un tiempo, un espacio y unos hechos, sino que la desaparición de la niña le da el hilo conductor y el contexto perfecto para enseñarnos la personalidad de estas mujeres, también sus motivaciones, sus reacciones, por qué luchan y cómo lo hacen. Pasan cosas, pero no son con las que te quedas al final, y eso te gustará si disfrutas del cine que enseña cosas más allá de una introducción-nudo-desenlace. El resto de personajes pasan más desapercibidos, aunque sí es interesante el personaje del traductor que acompaña a Tessa por Atenas, es muy solidario y le recuerdas con cariño.
Además, como ya comentábamos, la historia es contada bajo la perspectiva de las dos, un juego muy interesante que ayuda al espectador a reflexionar sobre las acciones de los demás que no acabamos de entender, aunque en la vida real no podamos ver esa "perspectiva del otro".
Con esta trama de corte más psicológico, lo que sorprende es que la película aún deje sitio para darnos algunas escenas de gran tensión, y creo que es un logro muy importante por parte de Zübert. No hay nada como retorcerse un poco en la butaca para sentir que has aprovechado este rato.
Nota: 6/10
Lo mejor: El protagonismo de dos historias femeninas, mostrando no sólo la diferencia en clases sociales, sino también en género.
Lo peor: La sensación que te queda tras el final.
