Es considerado uno de los grupos más reconocidos a nivel mundial y todo un icono para la música. Algunas de sus canciones son un himno como 'Let it Be', 'All You Need Is Love' o 'Help!' y no necesitan carta de presentación. The Beatles fue una de las bandas británicas más famosas del mundo, protagonizando una fiebre que consiguió arrasar en las listas de éxitos durante varios años. Fue tanto el efecto fan de The Beatles que todavía hoy sigue habiendo miles de fans alrededor del mundo, fieles a la memoria del grupo. Ron Howard, ganador de dos premios Oscar por 'Una mente maravillosa' al mejor director y a la mejor película, es el encargado de firmar este documental, 'The Beatles: Eight Days a Week', que analiza desde dentro cómo surgió el éxito de The Beatles y cómo lo vivieron aquellos jovencitos que acabaron gobernando el mundo de la música durante varios años.
El realizador de 'El desafío: Frost contra Nixon' se ha centrado sobre todo en la parte más artística de los jóvenes desde una perspectiva personal, donde se explican cómo aquellos británicos de pelo tazón vivieron la locura creada por su grupo musical. Howard ha sabido dejar de lado las vidas personales independientes de cada miembro del grupo, únicamente centrándose en ellos como grupo. El documental nos lleva desde el inicio de The Beatles en los bajos fondos de Liverpool hasta su éxito tocando en estadios abarrotados de gente.
Los Beatles son conocidos en todo el mundo por sus éxitos musicales, e incluso por alguna que otra incursión en el cine. La realidad es que incluso dieron nombre a una moda que se ha extendido hasta hoy que se llama la "Beatlemanía". 'The Beatles: Eight Days a Week' intenta tener un tono bastante neutral en su contenido, buscando empatizar sobre todo con los seguidores del grupo. La mezcla de imágenes originales con declaraciones de los dos Beatles supervivientes y otras figuras del mundillo hace que lleguemos a comprender cómo llegaron a convertirse en el famoso grupo. Howard ha sabido cubrirse las espaldas no jugando con la vida personal o amorosa de los miembros, dándonos un homenaje a The Beatles en toda regla donde lo importante es acercar al espectador a la verdadera historia del grupo. Algunos de los momentos más emotivos son las propias declaraciones de los jóvenes en aquel tiempo y ver ante tus ojos como en tan sólo en una década cambiaron a pasos agigantados, artísticamente y psicológicamente hablando.
La parte musical no podía faltar en un documental sobre una banda. La organización de la música está colocada a la perfección con su correspondientes etapas. Algunos de los éxitos más famosos del grupo adornan las imágenes que se proyectan, pero también se ha dado cabida a otros éxitos menores que provocaron los vítores y aplausos del público en su día. La capacidad de mostrarnos cómo John Lennon y Paul McCartney se encargaban de escribir canciones hace que poco a poco se haga cómplice al espectador en el mundo de The Beatles aunque hayan pasado ya más de 50 años desde su formación. El realizador también ha hecho uso de material de audio para escenificar y contextualizar a estos cuatro grandes, lo que otorga mayor creatividad en el montaje, no únicamente mostrándonos una sucesión de imágenes y declaraciones, sino también programas de radio de entonces e incluso, grabaciones del estudio de grabación del grupo. La mezcla del sonido con lo visual ha sabido ir por el buen camino, dando la información de forma más imaginativa. ¿Y qué decir de los conciertos? Un regalo a los oídos y ojos, en especial para los fans.
Como no podía ser de otra manera, el documental también analiza cómo afectó a los propios Beatles su éxito y su exposición pública, haciendo que tengamos una visión más cercana del grupo y que incluso, entendamos algunas situaciones que no terminábamos de comprender ya fuera por falta de información u otro motivo. La influencia mediática del grupo musical se plasma a la perfección en el documental, hablándonos de cómo un grupo de pop-rock llegaron a influir no solamente como músicos sino también como personajes públicos y ejemplos a seguir de miles de fans. Al igual que pasara con 'Amy (La chica detrás del nombre)', el realizador intenta no ensalzar la imagen del grupo, pero desgraciadamente, en ocasiones lo hace, dado que no se llega a ver realmente la parte negativa de The Beatles.
Llamada en ocasiones como la película definitiva de The Beatles, la realidad es que no se puede otorgar todavía dicho título. Es cierto que Howard consigue darnos una imagen más personal de Paul McCartney, John Lennon, George Harrison y Ringo Starr, pero también es verdad que se nota que la familia de los miembros fallecidos han estado detrás del film, al ser a veces políticamente correctos. Sobre las polémicas que giraron en torno a The Beatles, durante el visionado se muestran como una equivocación de aquellos angelicales niños, pero la realidad seguramente diste mucho de lo que se ve en pantalla. Aun así, el retrato que nos encontramos merece la pena y nunca es tarde para conocer todavía más detalles de lo que se escondía entre bambalinas entre The Beatles.
¿Documental o conciertos?
Uno de los elementos más flojos es que tal vez se haga un poco lenta la película, dado que en ocasiones se alarga el visionado de los conciertos, lo que hace que a veces parezca que es una sucesión de actuaciones tras otras. Pese a ello, este documental no pierde el ritmo en ningún momento, aunque sí haya partes más ralentizadas que otras que despisten un poco al espectador aunque no llegando a quitar la atención de la pantalla. ¿Y como colofón final? En la versión para cines se regalan 30 minutos más para poder visualizar en ultra alta calidad el concierto más importante de The Beatles en Estados Unidos, una experiencia increíble no solamente por la restauración sino también por ser capaces de ver toda la energía que desprendían encima de un escenario.
Por último, hay que destacar que uno de los problemas del documental es que le ha faltado arriesgar más en la imagen de The Beatles. Al igual que pasa con otros proyectos parecidos, se intenta dar la imagen personal del artista o artistas en cuestión pero un tanto idealizada, lo que provoca que pese a sintonizar totalmente con el público y descubrir su propio mundo musical, no se hace presente, por ejemplo, los miedos entre los integrantes. Sí nos encontramos con curiosidades que no sabíamos (o ya habíamos olvidado) y como no, vemos la madurez que se presenta según se va avanzando hacia el ocaso del grupo. Un buen ritmo durante la mayor parte de la película, que termina con un acelerón innecesario pero que tampoco estropea el buen trabajo realizado anteriormente. Los Beatles siempre serán los Beatles y qué mejor que rendirles homenaje con el estreno de 'The Beatles: Eight Days a Week' el próximo 15 de septiembre únicamente durante ocho días en los cines seleccionados. ¿Te lo vas a perder?
Nota: 7
Lo mejor: La cercanía de The Beatles y la presentación de su mundo artístico-musical.
Lo peor: Algunas partes tienen un ritmo demasiado lento.