Nadie como los jóvenes para retratar los tiempos actuales con relatos clásicos revestidos de formas muy modernas. Esta dinámica combinación les dio varios Oscars recientemente a los Daniels con 'Todo a la vez en todas partes'. A los treintañeros hermanos franceses Ludovic y Zoran Boukherma no les hace falta un multiverso para escribir y dirigir tan ágilmente '¡Tiburón a la vista!', en cines españoles el 19 de mayo. Tan solo un pequeño pueblo de la costa de Francia les basta para transitar de manera sorprendentemente natural y profunda por casi todos los géneros posibles.
Desde la orilla, se disfruta de un doble enfrentamiento de una agente costera a punto de jubilarse contra la amenaza de un tiburón y la incredulidad o egocentrismo de su pueblo. Pero en el fondo, se trata de un inmenso mar de paranoia que lleva a la mejor comedia universal sobre nuestro tiempo, al más entretenido thriller satírico posible e incluso a la mejor película sobre el mundo post-COVID'19 y post verdad desde 'Puñales por la espalda: El misterio de Glass Onion'. ¡Y todo ello en menos de hora y media!
La comedia heroica
Por muy moderna que se vista la película, al final es un ejemplo más del magnífico toque de los cineastas franceses para las comedias dramáticas. Los espectadores van a reírse mucho con el inteligentísimo humor dialéctico y físico, pero también con el social. Desde el minuto 0, el guion se atreve con una constante lectura cómica de la actualidad que roza lo ridículo para poder ser divertidísima pero poder tomarse en serio sin forzar nada.
El entretenimiento también proviene del potentísimo viaje del héroe. O heroína en este caso, con la epiquísima Marina Foïs, recientemente nominada al Goya por 'As bestas'. Esta es también su historia de origen en plena crisis vital; en lugar de la de un adolescente que empieza, la de una jubilada que se niega a acabar. En esta apuesta sobresaliente por la acción, tampoco podía faltar el escuadrón cómico de amigos jóvenes (desternillantes Jean-Pascal Zadi y Christine Gautier) o la pareja consorte inspiradora, interpretada esta vez por un hombre. El papel de Kad Merad no solo es necesario y emotivo, sino que aporta una interesantísima revisión de los roles de género en el cine de acción.
El thriller social
En lugar de un hombre lobo como en su anterior film, los directores de 'Teddy' han usado ahora a un tiburón en la playa para traer el mensaje social con un oscuro terror bastante explícito. Y así es como se erige también como un thriller satírico sobresaliente: la metáfora del animal marino y la pandemia como una amenaza mortal en la sombra donde tus vecinos son víctimas y verdugos creando una paranoia social casi al nivel de 'Relatos salvajes'. Todo es aún más chocante al ver lo consciente y naturalizado que se hace el coronavirus en la película; pero su gran acierto radica en que, más que retratar la pandemia, se centra en mostrar sus efectos.
El tiburón funciona a las mil maravillas como catalizador del negacionismo, la cultura de la cancelación, la polarización, el morbo, la "libertad"... Pero también como thriller más allá de las metáforas. Los directores no ocultan su influencia de Steven Spielberg: la inteligente cámara subjetiva y la puntillosa banda sonora son suficientes para crear el terror. Y aún así, también hay sangre y breves planos de la bestia que no chirrían ni se quedan flojos. Con ello, se consuma el tercer acto del viaje del héroe: el emocionante enfrentamiento final.
La segunda mitad del metraje es toda para la caza y podría ser una película en sí misma, al igual que todos los géneros del film. Tan comercial como de autor, tan entretenida como inteligente. El resultado final de '¡Tiburón a la vista!' no es de mosaico de tonos, sino de película sólida. Así, logra la mejor acepción de la calificación para todos los públicos: no como una propuesta tibia de humor blanco, sino tanta amplitud y profundidad como la que hay en el mar para ese abanico de géneros. Si dudas entre ir a ver una de risa o una de tensión, puedes ir a ver ambas en una sola película a partir del viernes 19 de mayo.
