En 1987, Garry Marshall, responsable de reconocidas cintas como 'Pretty Woman' o 'Princesa por sorpresa', dirigió la película 'Un mar de líos', comedia protagonizada por Goldie Hawn y Kurt Russell que nos narraba cómo un carpintero decidía aprovecharse de la amnesia de su millonaria y diabólica jefa como venganza por haberle despedido. Esta propuesta, regresa de nuevo a las pantallas de cine de la mano del director Rob Greenberg, de la reconocida actriz de 'Scary Movie' Anna Faris y del mexicano Eugenio Derbez, encontrándonos ante un remake que sigue el mismo relato que la película original pero con una pequeña y crucial diferencia: La reversión de roles de sus protagonistas.
En esta ocasión, no tenemos a un hombre decidiendo aprovecharse de su malvada jefa millonaria para que esta le haga toda las tareas sucias que recaen sobre él, sino que este rol ahora pasa ahora a ser el de una mujer que, ante su difícil vida sobrellevando el cuidado de sus tres hijas, sus estudios para lograr una plaza de enfermera y sus dos trabajos; hace uso de la amnesia de su machista y detestable jefe para darle una lección de realidad como venganza por un despido injustificado. De esta forma, vemos al personaje de Anna Faris tomar las riendas sobre el de Eugenio Derbez, haciéndole creer que todas las peores tareas del hogar recaen sobre él y logrando que gran parte de la propuesta de la película gire en torno a la ruptura de los estereotipos de género, lo que sin duda le aporta una gran frescura al film.
Sin embargo, más allá de este aspecto, 'Un mar de enredos' resulta una comedia algo estancada. La cinta presenta algún que otro problema de ritmo, especialmente en su primera mitad, mientras que su humor no termina por ser todo lo eficaz o novedoso respecto a lo que una propuesta de estas características podría haber dado de sí. Muchos de sus gags no resultan del todo bien ejecutados y durante ciertos tramos se echa en falta su presencia. Además, su metraje de casi dos horas podría haberse condensado en una menor duración. Pero a pesar de ello, la cinta logra entretener durante la mayor parte de su tiempo, resultando, pese a sus inconvenientes, una comedia bastante simpática que se deja disfrutar sin problema si el espectador se acerca a verla sin ningún tipo de expectativa.
Enfocada a un público mexicano
Pese a tratarse de una producción estadounidense producida por la Metro-Goldwyn-Mayer, 'Un mar de enredos' es un producto que tiene como principal objetivo venderse entre el público mexicano. La película incluye en su reparto destacados rostros procedentes de México como el de Eugenio Derbez o el la actriz Eva Longoria, apostando, además, por utilizar un humor muy local que referencia a diversas cuestiones muy reconocibles para el público del país. También resulta llamativo que, pese a que la película esté rodada mayoritariamente en inglés, incluye gran cantidad de escenas rodadas íntegramente en español, lo que clarifica la intención del film de enfocarse principalmente hacia el público mexicano.
Este hecho podría constituir un inconveniente, pero lo cierto es que logra aportar otro toque de frescura a la propuesta del film. Concretamente, esta focalización hacia el público mexicano permite a 'Un mar de enredos' jugar con cuestiones como el parodiar de forma muy eficaz y divertida las telenovelas hispanoamericanas. De hecho, el enfoque que se le da a muchas de las tramas de la película intenta referenciar de forma continuada a estas reconocidas ficciones televisivas, otro hecho en el que se aprecia una eficaz reinterpretación y adaptación del material de la película original de 1987 y que sin lugar a dudas resulta enormemente divertido en determinadas partes del film.
Puede que 'Un mar de enredos' disponga de ciertos inconvenientes en su realización, pero en general, el resultado final es el de una comedia bastante simpática que ofrece los suficientes alicientes para lograr ser disfrutada. Sobre todo, resulta muy destacable la vuelta de tuerca ofrece respecto a la cinta dirigida por Garry Marshall en 1987, logrando posicionarse como una cinta con un planteamiento más que admirable con la que consigue jugar de forma eficaz y divertida lo largo de todo su metraje.
Nota: 6
Lo mejor: Su apuesta por revertir los roles de género respecto a la propuesta de la película original.
Lo peor: No resulta todo lo divertida que debería, en especial en su primera mitad.
