Las películas con monstruos y depredadores marinos suelen ser una de las grandes debilidades del público. Grandes bestias como el Megalodón o los tornados de tiburones en 'Sharknado' terminaron por cosechar el éxito mediante cintas que únicamente apostaban por el entretenimiento, sin ninguna otra pretensión, una fórmula que volvemos a encontrar en películas como 'Underwater'. Sin embargo, esta cinta producida por 20th Century Fox y protagonizada por Kristen Stewart no se limita a repetir dichas mecánicas, sino que apuesta por mezclar dichos elementos con el terror y la ciencia ficción en un entretenido y efectivo film que bien podría ser un digno sucesor de cintas como 'Abyss' o 'Alien'.
Su premisa no puede ser más sencilla. Un fuerte temblor destroza una estación submarina y los tripulantes deberán intentar llegar a la superficie sorteando todos los obstáculos y escombros. No obstante, lo que parecía un simple seísmo termina por ser una horda de peligrosas y extrañas criaturas marinas dispuestas a acabar con la vida de todos ellos. Esto da juego a una aventura que no se anda con contemplaciones, siendo una película que apuesta por una narración muy directa que hace que desde primer minuto empiecen a ocurrir cosas sin dejar un solo segundo de respiro al espectador. Además, más allá de ofrecer un ritmo trepidante, la narración tan directa permite una reducida duración de tan solo 95 minutos, un metraje que, en un panorama audiovisual donde parece casi una norma llegar a las dos horas de metraje, se termina por agradecer.
Más allá del ritmo de la narración, lo atrayente de esta propuesta también se encuentra en su capacidad de resultar altamente asfixiante y claustrofóbica. Casi toda la acción transcurre en espacios cerrados y pequeños, lo que sumado a una realización bastante efectiva, contribuye a que el espectador se contagie de la tensión que se siente en pantalla. Además, a medida que avanza la trama esta sensación continúa intensificándose, en especial tras la aparición de las criaturas marinas, lo que deriva a que lo que parecía un mero film de aventuras submarinas se convierta en una auténtica cinta de terror.
Ir de menos a más, con una historia que se centra en la acción y en la paulatina aparición de peligrosas criaturas marinas más que en el desarrollo argumental, contribuye a que a nivel narrativo muestre una estructura similar a la de un videojuego, lo que tiene sus pros y sus contras. Su punto a favor es que funciona mejor en su intención de generar terror, ya que, dada la sencillez de la que parte la propuesta y que se trata de una historia vista en infinidad de ocasiones, si se hubiera optado por un desarrollo más enfocado en la narración el efecto hubiera sido bastante contrario. Además, también conlleva a que la película desemboque en un tramo final de infarto, ya que, como en cualquier videojuego, las criaturas que llegan en el epílogo son propensas a dar mucho más espectáculo.
Por otro lado, la estructura de videojuego propicia un progreso argumental muy plano, especialmente en lo que atañe a los personajes. Todos ellos disponen de un desarrollo casi nulo, siendo meros títeres para cumplir funciones determinadas en escena sin una historia o motivación detrás. Únicamente los dos protagonistas, los interpretados por Kristen Stewart y Vincent Cassel, muestran una ligera intención de dar a conocer una historia personal tras de sí. No obstante, el desarrollo es mínimo y no acaba por aportar nada relevante a la película.
Un gran diseño de producción
Otro punto a favor de 'Underwater' es su trabajado apartado artístico. Pese a ser considerada un film de serie B, lo cierto es que a nivel de producción no han escatimado en recursos para hacerla lucir como un gran blockbuster. Todo el diseño del fondo marino, la estación, los trajes y las criaturas es muy digno de admirar, constituyendo otro gran aliciente en un film que ya solo con su buen manejo del terror y la tensión conseguía hacerse destacar.
Puede que no sea una cinta novedosa y que reincida en cosas vistas en infinidad de ocasiones en producciones similares, sin embargo, el ser consciente de ello y no perseguir ninguna otra pretensión que la de entretener y ofrecer un buen espectáculo le hace convertirse en un disfrutable film de terror y ciencia ficción.
Nota: 8
Lo mejor: Su trepidante ritmo y sus momentos claustrofóbicos cargados de tensión y terror
Lo peor: El argumento resulta algo trillado y sus personajes son demasiado arquetípicos y planos.
