Lo mejor de 'Wonder Woman' no es que la película funcione prácticamente en su totalidad, sino que lanza a esta superheroína de la mejor manera posible: con fuerza y una determinación que hacen del personaje al que tan maravillosamente da vida Gal Gadot, un héroe universal. Poco más se le puede pedir a una directora que conocía a la famosa amazona en profundidad mucho antes de embarcarse en esta aventura cuya responsabilidad no se hace sentir en ningún momento. La presión ha tenido que estar ahí, y a pesar de eso la cinta es fresca, decidida, esta cargada de humor y presenta a una Diana Prince poderosa e inocente, una combinación que apela a lo más hondo del espectador que siente esa fuerza inusitada pero también una compasión y una tristeza inevitables ante esta más que humana aventura.
Patty Jenkins ha hecho sin duda el trabajo de su vida y en la taquilla ya se está notando: 'Wonder Woman' se ha convertido en el mejor opening de la historia para una cinta dirigida por una mujer, y no porque haya triunfado entre el público femenino, que también, sino porque ha atraído a muchísimos espectadores independientemente de su género, algo que no sorprende en absoluto porque lo mejor de la cinta es su universalidad y que su feminismo nace de la actitud de una protagonista que ni se ha parado a pensar que ella pudiese ser inferior a ese hombre al que acaba de conocer, Steve Trevor. Imaginad el poder de dar completamente por sentada la igualdad. Imaginad a esas niñas viendo a su heroína luchar junto a cuatro hombres, formando un equipo, demostrando que sus capacidades son exactamente igual de validas y, en este caso, aun mas asombrosas.
Gadot está absolutamente espectacular en un trabajo muy muy complicado que debería empezar a reivindicarse desde ya. Quiero aplausos, premios y piropos para una prácticamente desconocida interprete que da un empaque a su personaje como para trascender en la historia del cine. Su fuerza, su encanto, esa mezcla tan increíble de bondad y determinación, convierten a Wonder Woman en un icono cinematográfico tan poderoso como lo fue para los cómics en los 40, y ojalá con el mismo impacto. Gadot ha tenido mucha ayuda. Primero esa llamada de Zack Snyder que la convirtió en la nueva heroína de DC en 'Batman v Superman: El amanecer de la Justicia', luego la segura guía de una Jenkins que siempre ha sabido lo que quería/ debía hacer por el personaje, y por ultimo una labor de promoción titánica de esas que acuñan exitazos tráiler a tráiler. Pero todo esto nada tiene que ver con lo que te transmite la mirada de esa mujer que quiere salvar a una humanidad que acaba de cargarse a la mitad de su familia. Eso es lo mas magnético, admirable, limpio y prácticamente imposible de ver en el cine actual: su compasión.
Wonder Woman siente por la humanidad. Sufre viendo el impacto de la guerra y en su mirada se percibe el pacifismo de una forma tan incuestionable que no hace falta decir nada más. Feminismo y pacifismo, términos tan complicados que dan para debates eternos, estudios, tesis, libros y más debates, pero que en este blockbuster palomitero se presentan de manera sorprendentemente eficaz, palpitando en la sangre de una mujer con la que es imposible no sentirse identificado. Da igual de donde vengas, cual sea tu género, raza, creencias, es imposible que esta aventura no te llegue, todo un reto que Jenkins y Gadot han conseguido mano a mano, formando el tándem femenino perfecto. Junto a ellas Chris Pine, otra pieza del puzzle cuya contribución debería reivindicarse con la misma fuerza.
Trevor no es un personaje secundario, es el hombre que no subestima a Diana en ningún momento, el que no se siente amenazado por su fuerza, el que la admira desde la primera vez que la ve, el que la ayuda sin poner en duda su poder, el que forma equipo con ella... Sí, en numerosas ocasiones trata de conducir a Diana por otro camino que no es el que ella elegiría, pero es que no tendría sentido si no lo hiciese. Recordemos que estamos hablando de una mujer que pretende ir a la primera línea en una guerra que terminase en 1918. Contextualicemos por favor, a ver si ahora por embarcarnos en la necesaria tarea de reivindicar la figura femenina vamos a contar cosas que no son. Algo así debió de decir una Jenkins que sin duda ha cuidado cada escena de la mano de Allan Heinberg, un guionista de cuyos diálogos se desprende un prudente saber hacer digno de mención.
Todo el equipo se ha esforzado al máximo para plantear una dinámica sana entre Steve y Diana, una relación entre iguales. Lo mejor: la manera en que Steve plantea ciertas cuestiones a Diana, una semidiosa que visita el mundo por primera vez y no tiene ni idea de lo que hacer con su vida, con sus poderes, con sus sentimientos... Vamos que en el fondo está mas perdida que un pulpo en un garaje. Asi, ante ciertas situaciones desencadenadas por ese desconocimiento, el personaje de Pine no muestra arrogancia en ningún momento, mas bien comparte con Diana su punto de vista, uno muy valioso para esta amazona que ha vivido aislada desde que nació.
Más allá de esto que sin duda encantará a los que lleven años echando de menos la presencia femenina entre los héroes cinematográficos de DC en unos términos mas justos, la película triunfa por su humor y el planteamiento de unas escenas que funcionan muy bien las unas con las otras a la hora de plantear el viaje de Wonder Woman desde su secreta isla natal, Themyscira, a la batalla. Impresiona el estilo de lucha de las amazonas en una secuencia de acción de las que roban el aliento que se ve en los inicios del film. En ese momento diseñado para entretener, también se perciben los principios de estas guerreras ancestrales, su valor, su trabajo en equipo... Sin duda otro de los logros de Jenkins, esa moraleja sutil que se esconde prácticamente tras cada paso, desprendiendo un cariño por el personaje que transforma a esta propuesta en algo mucho más valioso de lo que su torpeza final permitiría.
Y es que Wonder Woman desgraciadamente no se escapa del síndrome que padecen muchas superproducciones actuales: el villano hace aguas. Solo un poquito, pero sí. Es más, el asunto da el doble de rabia porque la idea es tan estupenda...
¡Cuidado SPOILER!
Bueno pues Diana tiene claro que el que está detrás de la I Guerra Mundial es Ares, el dios de la guerra, y esta decidida a acabar con él, por eso antes de irse de Themyscira, roba God Killer, el arma que puede matar a los dioses, para poner punto y final a tanta muerte en una guerra al borde de empeorar debido a la experimentación con bombas de gas tóxico. La idea es genial, lo mismo que el personaje de Elena Anaya, la Doctora Poison, que es magnético y aterrador. ¿El problema? Lo primero, que el personaje de Anaya pierde fuerza por la presencia del general Ludendorff (Danny Huston), porque al final se pasan la película "robándose" el protagonismo el uno al otro. Entiendo la necesidad de que Diana sospeche que Ludendorff es Ares para guardar el sorpresón para el final, pero este es todo el interés de un personaje que por lo demás solo pulula en torno a la infinitamente más interesante Doctora Poison, que además de dar cosica como ella sola, representa un digno oponente para Trevor y compañía, un heroico equipo que pelea a su manera mientras Diana anda ocupada persiguiendo al que cree responsable de la Gran Guerra.
David Thewlis no da mucho la talla y es una lástima porque la batalla final es tan espectacular que roba el aliento. La historia de Diana y Steve alcanza un punto tan épico que recuerda a otras inolvidables despedidas con aviones de por medio como las que pudimos ver en 'Casablanca' o 'El guardaespaldas', todo muy emotivo... Pero Ares es que no. No porque Thewlis no le encuentra el punto a eso de dar vida a alguien que parece muy bueno y luego resulta ser muy malo. Eso le resta brillo a un desenlace que por lo demás supone la guinda a un viaje mucho más que digno.
Fin de SPOILER
El humor de la Mujer Maravilla
Además de lo potente que es la Wonder Woman de Gadot, la cinta entusiasma porque sus puntos cómicos son admirables. Cuando pude visitar la sala de montaje de la película en Londres y ver con Jenkins un par de escenas, me impresionó el atrevimiento de esta directora que había tenido el arrojo de hacer comedia hablando de la sexualidad femenina... ¡En una película de superhéroes! No me lo podía creer. Salí de allí entusiasmada y poniendo velas a todos los santos para que esa estupenda conversación entre Diana y un perplejo Steve, llegase a las salas. Así lo ha hecho y funciona tan bien que la reacción en el pase especial que se celebró en Nueva York fue de lo más emocionante. Risas y aplausos.
Pero este no es el único momento en el que las diferencias entre los dos protagonistas de la cinta provocan la carcajada. El humor está presente en cada instante mientras se van descubriendo el uno al otro, cada vez que Diana impresiona a los humanos que la rodean o reacciona con ilusión ante todo lo que el mundo de los mortales le ofrece, algo que sin duda aporta corazón y un toque entrañable a esta aventura diseñada para conquistar. Y eso es lo que la hace tan especial, que la película está plagada de primeras veces que humanizan a esta superheroína que no pierde ni un ápice de poder por mostrar su compasión. 'Wonder Woman' supone sin duda un antes y un después para las superheroínas cinematográficas, un pistoletazo de salida de lujo para tantas otras mujeres maravilla que merecen su oportunidad en la gran pantalla y un necesario cambio en el predominantemente masculino universo cinematográfico de DC.
Nota: 8
Lo mejor: El humor y Gal Gadot, una intérprete que da a Wonder Woman el empaque épico que se merece.
Lo peor: El lío con los villanos. El desenlace pierde fuerza porque los oponentes no están a la altura del equipo ganador.
Los intentos de llevar a Wonder Woman al cine o la televisión
'Who is afraid of Diana Prince?'
26 vueltas tuvo que dar la tierra al sol antes de que un equipo profesional grabase una Wonder Woman de imagen real. Antes de eso, dos aventuras radiofónicas fueron las únicas excursiones de la princesa fuera del mundo de los cómics, en parte debido a la cruzada que contra ella inició Fredric Wertham por considerarla un personaje misándrico y de terrorífica influencia para los jóvenes lectores. Esa época de Wonder Woman es recordada por la tremenda bajada del tono superheroico y metafórico con el que la creó William Moulton Marston, hasta convertirla en una mujercita muy preocupada por sus amoríos que de vez en cuando daba algún puñetazo. En este sombrío contexto nace esta aberración. No es ni siquiera un piloto, son poco más de cuatro minutos en los que los autores intentan vender una serie en la que la protagonista claramente trastornada cree ser Wonder Woman, acompañada de su madre a la que no le importa la locura de la niña mientras se coma las verduras e intente encontrar marido. La secuencia de la protagonista jugando con su reflejo en el espejo puede provocar verdadera angustia a los fans, estáis avisados.
'SuperFriends'
Varias generaciones de americanos coincidirán al contarte que su primer contacto con el mundo de los superhéroes fue en esta serie de animación que se emitía los sábados por la mañana. La primera representación canónica de la Liga de la Justicia no se libró de esa ansia retocadora de las mentes pensantes de la cadena, que decidieron añadir una pareja de gemelos extraterrestres al equipo. Pero por suerte en esta iteración, Wonder Woman salió milagrosamente bien parada, y no es un detalle menor, recordemos que la representación que de Aquaman hizo esta serie sigue persiguiendo al personaje hasta el día de hoy, han sido 40 años de lucha contra una imagen un tanto ridiculizada. Los 70 fueron buena década para nuestra princesa.
El piloto de 'Wonder Woman' (1974)
Parece que en los años setenta, mientras la Diana de los cómics se había liberado de su yugo censor, y había vuelto a ser una heroína, alguien decidió que el mundo estaba preparado para ver a la princesa en la televisión. Pero claro, había que realizar una serie de ajustes para facilitar al público tan sumamente complejo y enrevesado personaje. Así que Diana se convirtió en una super-espía rubia, con un traje pantalón blanco, sin poderes ni relación alguna con toda la mitología del personaje excepto el nombre. Este piloto fue emitido dos veces en un mismo año antes de que la cadena se decidiera a convertirla en serie regular. Por suerte, y como veremos en el próximo punto, se impuso algo de cordura entre los directivos y se produjo la primera gran excepción.
'Wonder Woman', la serie de Lynda Carter
Como decíamos, algo de cordura se impuso y la serie que llegó a las pantallas sí que se parece a Wonder Woman. Aunque esta serie solo duró tres temporadas, sufrió tres reseteos que cambiaron su ambientación de los años 40 a los 70, y un cambio de ciudad y de personajes secundarios en el último momento. Una vez más, parece que hay que "retocar" a este personaje constantemente. Aún así, estamos ante la representación más fiel hecha de Diana hasta la fecha, cuyo impacto en la consciencia popular de Estados Unidos (y el mundo) va mucho más allá de los años que estuvo en emisión.
Como bien nos contaba Pedro J. Garcia en este otro artículo de eCartelera, la serie era profundamente feminista. Muchas mujeres y hombres escucharon por primera vez la palabra 'patriacado' de boca de las amazonas para referirse a nuestro mundo. También era una serie de su tiempo, kistch y ligera, cosa que nos puede hacer subestimarla, pero que en el fondo ayuda a que penetre más fácilmente en el imaginario colectivo. Lynda Carter ha sido lo que Christopher Reeve a Superman, hasta la llegada de Gal Gadot, claro.
'Justice League'
En las décadas que pasaron entre la cancelación de la serie y la próxima película de estreno las apariciones de Diana se han visto limitadas a la animación. El éxito de 'Batman: The Animated Series' provocó varias versiones de animación del supergrupo de DC, donde poco a poco Wonder Woman fue adquiriendo la personalidad y la importancia dentro del grupo que merecía.
'Wonder Woman: The Animated Movie'
Ante la imposibilidad de que las película de Joss Whedon o la 'Justice League' de George Miller llegaran a buen puerto, nos tuvimos que fijar un rincón del universo DC poco explorado: La sección de animación de Warner/DC, que lleva siendo infravalorada desde hace tiempo, pero a la vez es la que más éxitos le reporta a la compañía a la hora de adaptar a su superhéroes. A rebufo de la repercusión de las diferentes series de 'Justice League', y después de una aparición en una película de animación de Batman y Superman por fin tuvimos, en 2009, una nueva aventura protagonizada por Diana. La más que aceptable adaptación, una vez más, alteraba la historia original de la Amazona, aunque esta vez con mucho más respeto y sentido común. Cosa que no nos extraña si vemos que una de las guionistas involucradas es Gail Simone, una de las pocas autoras que trabajan regularmente con las dos grandes editoriales, escritora de entre otros títulos 'Deadpool', 'Superman' o la propia 'Wonder Woman'. La película además cuenta con las voces de Keri Russell, Nathan Fillion y Rosario Dawson, entre otros. Y es perfecta para aliviar la espera de la película de Patty Jenkins.
El (segundo) piloto fallido de 'Wonder Woman'
Hubo varios intentos de llevar las aventuras de Diana a la televisión, los productores de 'Lois & Clark' propusieron una versión del personaje que conjugaba sus labores de luchadora contra el crimen con el ser profesora de arqueología, otra versión en la que no se respetaban ni de lejos los orígenes del personaje, que no llegó a materializarse En 2010 hubo un intento que llegó un poco más lejos, pero una vez más, hablaba de alguien que comparte nombre y algunos rasgos con Diana, pero que no era Wonder Woman. En esta ocasión David. E. Kelley produjo un desastre protagonizado por Adrianne Palicki, que más tarde se quitó la espinita de las superheroínas encarnando a la Bobbi Morse de 'Agentes de SHIELD'. El piloto fue tan mal que no llegó a emitirse, pero que años después, se filtró para que todos comprobáramos las sospechas. En él, Wonder Woman es una de mujer de negocios que también es científica, celebridad de Hollywood y heroína. Ni rastro de sus orígenes mitológicos, ni de nada más que recordara al personaje. Otra oportunidad perdida.
'La Lego Película'
No, no nos hemos confundido, la realidad es que casi 75 años después de su creación, la primera aparición de Diana en la pantalla grande en los cines de todo el mundo fue en esta película de animación. ¿Y sabéis qué? Sale poco y es un muñeco pero adoramos cada pequeño segundo. Por suerte en pocas semanas vamos a ver lo que promete ser una más que digna rendición del personaje. Después de 75 años, vamos a ir al cine con toda la intención de no recrearnos en el complicado pasado del personaje, y de disfrutar de lo que nos deparara el futuro. ¡Por Hera!
