La distribución de cine de varias nacionalidades ha permitido que a España lleguen propuestas que rompen el esquema habitual de las producciones de Hollywood. El cine de animación no ha sido ajeno a ello, una muestra de esto es el estreno en cines de la cinta surcoreana 'Zapatos Rojos y los siete trolls' (2019), una reinterpretación moderna del clásico cuento 'Blancanieves y los siete enanitos' de los hermanos Grimm, cuya primera impresión engaña, puesto que se está ante una propuesta honesta, muy encantadora y con un mensaje muy interesante para el público al que está dirigido.
Inicialmente, 'Zapatos Rojos y los siete trolls' tiene una estructura que recuerda a las versiones modernas de cuentos hadas que comenzaron con el éxito de 'Shrek' (2001) y sus secuelas. Sin embargo, el filme de Hong Sung-ho no es un refrito low-cost de títulos como 'Érase una vez... un cuento al revés' (2007), sino una verdadera reinterpretación que ofrece una mirada actual a la historia de Blancanieves. Es más, esa forma que tiene de reivindicar el poder de su heroína está más cerca de la infravalorada 'Blancanieves y el castillo encantado' (1993).
La principal virtud del filme es que su protagonista es una princesa que se sale de los cánones de belleza establecidos en el género, es una joven doncella rolliza y de rostro lozano, valiente y cuyo máximo deseo es encontrar a su padre. Sus ambiciones difieren mucho del cuento original, pero se mantiene ese espíritu de bondad innata de la joven. Es más, puede decirse que se incentiva en esta propuesta. A diferencia de lo predecible, reivindicar que la belleza está en el interior, el guion de Hong muestra que esa hermosura está también en la diversidad de cuerpos. Ese mensaje es novedoso en la animación infantil y el filme sabe llevarlo con sumo cuidado, teniendo bien claro qué quiere decir.
Un mensaje que reivindica los cuerpos diferentes
Con esa potencia, con la que reivindica a las princesas con curvas, 'Zapatos Rojos y los siete trolls' logra ser una producción notable, cuyas buenas intenciones consiguen ofrecer un filme de animación muy digno, que los adultos pueden disfrutar y entender, gracias a la buena construcción de sus protagonistas, especialmente Blancanieves, cuyas inseguridades residen más en la imagen esbelta que ofrecen sus zapatos mágicos que en su propio cuerpo en sí. Por otro lado, cabe mencionar que el estilo de animación es eficiente, lo que demuestra que no hace falta grandes presupuestos para crear un largometraje bien realizado.
Quizás no tenga la profundidad de las obras más complejas de Pixar o Disney, pero 'Zapatos Rojos y los siete trolls' es un estupendo divertimento familiar para regresar a las salas de cine , con una mirada didáctica para los más pequeños de la casa. Una oportunidad ideal para conocer un tipo de industria de animación diferente, en la línea de producciones belgas, francesas y rusas que suelen llegar con cierta periodicidad a los cines españoles.
Nota: 7
Lo mejor: Su potente mensaje a favor de reivindicar la belleza de los cuerpos diversos.
Lo peor: Sus momentos musicales sobran.
