Tras el irregular quinteto del viernes, la segunda jornada de la muestra nos regaló dos joyas tan diferentes como emotivas. La primera de ellas fue 'La vida de Calabacín', la cinta animada que desfiló la semana pasada por la alfombra roja de los Oscar, proyectada en la sesión matinal. Mientras que la segunda llegó entrada la tarde, y tras ella el día se fue desinflando. Más adelante, un lamentable altercado tendría lugar en la sala secundaria del certamen.
'The Good Neighbor'
El found-footage está quemándose a gran velocidad a causa de proyectos que parecen copias consecutivas. Sin embargo, de forma aislada surgen propuestas que le dan un uso justificado. 'The Good Neighbor' no es una película brillante ni tan siquiera respeta el punto de vista que plantea, pero al saltarse algunas de las estúpidas reglas de este recurso al menos se aleja de la norma homogénea.
La trama se centra en dos jóvenes, Ethan y Sean, que deciden poner en marcha un experimento sociológico audiovisual que implica emplazar cámaras ocultas en la casa del anciano y huraño vecino. El objetivo es comprobar cómo pequeñas alteraciones en la rutina afectan de forma sustancial al comportamiento, aunque la meta real se atormentar al personaje interpretado por James Caan.
Aparte de mostrar la típica inmadurez de los protagonistas y cómo el terror puede revertir del observado al voyeur, lo que llama la atención de la cinta es el debate que plantea acerca de la intimidad, término cada vez más borroso y menos respetado. En general, 'The Good Neighbor' mantiene la atención en todo momento y no cae en el saco roto del found-footage más insustancial.
Lo mejor: El drama familiar que se esconde en el pasado de James Caan, justificando así la presencia del reputado actor en la película.
Lo peor: Los dos jóvenes protagonistas no son lo suficientemente interesantes como para pasar tanto tiempo junto a ellos.
Nota: 6
'I Am Not a Serial Killer'
A la séptima fue la vencida. Dejando de lado 'Logan', título que inauguró la muestra, 'I Am Not a Serial Killer' es la película más estimulante de lo que va de certamen. Protagonizada por un adolescente con tendencias sociópatas y fascinado por la obra de asesinos en serie, la cinta sigue su búsqueda de un misterioso homicida que está asolando a su pequeña ciudad.
La falta de habilidades sociales y el desapego de su protagonista con la mayoría de sus conocidos sirve una ración de comedia muy bien elaborada, que enriquece la intriga y el elemento fantástico que se desvelará avanzado el metraje. Max Records es ese joven que se autoimpone normas para mantenerse en el espectro de lo "normal", dentro de lo que cabe. Tras cinco años alejado del cine, Records demuestra que su maravillosa interpretación en 'Donde viven los monstruos' no tuvo nada de casual. Un talento a tener en cuenta.
Al estilo de 'Dexter' y 'A dos metros bajo tierra', su personaje se gana el aprecio del espectador y tiene un lazo cercano con la muerte, ya que pasa buena parte de su tiempo en la funeraria de su madre. Junto a él se encuentra Christopher Lloyd, el legendario Doc de 'Regreso al futuro', que a sus casi ochenta años sigue comiéndose la pantalla. El tercer talento a destacar es el del director, Billy O'Brien, que demuestra una inteligencia sobresaliente en su planificación con los espacios y al decidir rodar en cine en vez de grabar en digital, lo cual le otorga un aspecto muy distintivo y bello al film.
Lo mejor: El humor que envuelve a un personaje que podría haber caído en el drama más inverosímil.
Lo peor: Un final que puede parecer excesivo.
Nota: 7,5
'Pet'
Un giro de guion y fuera. Básicamente eso es 'Pet'. La película de Carles Torrens también se introduce en el saturado terreno de los psicópatas, pero con menor fortuna que la anterior.
En este caso es Dominic Monaghan ('Perdidos' y 'El señor de los anillos') el que se mete en la piel del solitario y desorientado socialmente protagonista. Su personaje trabaja en una perrera, planteando desde el comienzo el símil entre él y esos animales desamparados, y un encuentro en el autobús le saca de su tediosa rutina. Se trata de una chica, y (cómo no) surge el amor, o algo así.
Ante la imposibilidad de conquistarla por las vías legales, decide construir una jaula en su trabajo y encerrarla. Podría ser una película más de secuestros, y en cierta forma lo es, pero le da una inteligente vuelta a la personalidad del personaje de la chica, que en principio es exageradamente sumisa. Aparte de ese viraje psicológico, 'Pet' no ofrece mucho más.
Lo mejor: Cómo altera la percepción que se tiene del personaje femenino, que va cobrando fuerza con intensidad.
Lo peor: Esa alteración parece excusa suficiente para modificar los estados de ánimo de los personajes a placer del guionista.
Nota: 4
'31'
El prime time de la jornada tuvo como protagonista a Rob Zombie. En concreto, a su última incursión en la gran pantalla como director y guionista. El polifacético artista firma '31', un salvaje relato de supervivencia que comienza con una cita de Franz Kafka y una tremenda secuencia en blanco y negro.
Después de ese inicio, más propio de una producción de arte y ensayo (de terror, claro), la cinta presenta a las víctimas del macabro juego organizado por unos perturbados burgueses. Pero Rob Zombie se guarda lo más potente para los villanos, que, por supuesto, son payasos. Al estilo del manga shonen, los villanos de la película se van sucediendo a medida que van cayendo los anteriores, comenzando por un enano nazi y con acento argentino.
'31' logra entretener pero no sorprender. Su montaje, a veces pueril o confuso, acierta tanto como falla, algo que se podría aplicar también a la labor de Zombie tras las cámaras.
Lo mejor: Doom-Head.
Lo peor: Si tienes un trauma con los payasos, aléjate.
Nota: 4
Al margen de la opinión sobre la película, hay que denunciar que, según ha confirmado Syfy en Twitter, un repugnante suceso tuvo lugar en la sala 2. Supuestamente, según comentan varios usuarios de Twitter que se encontraban en la proyección, durante la exhibición de '31' un hombre intentó propasarse con la espectadora hasta que los gritos de la mujer detuvieron su faena. Un miembro del personal expulsó al individuo, que no volverá a pisar el terreno de la muestra. Es una vergüenza que una mujer no pueda disfrutar tranquilamente de una película sin ser importunada, y una pena que no se respete el buen rollo y buen ambiente que suele haber siempre en la Muestra. Pero por suerte la organización actuó rápido y se han quedado con la cara del culpable.
'Scare Campaign'
La segunda sesión golfa de la muestra debería haber sido presentada por Charlie Brooker. El creador de 'Black Mirror' se quedaría perplejo ante 'Scare Campaign', que trata de provocar una colisión entre la narrativa convencional y el directo consumo actual, empleando la maquinaria más previsible para lograrlo.
El título del film hace referencia al reality en el que participan los protagonistas. Un programa de cámara oculta en el que se gastan terroríficas bromas a ingenuos pardillos. La aparición en internet de un existido grupo que comete asesinatos en directo compromete la fórmula del estancado show televisivo. De esa manera se exhibe la etapa de cambio que está viviendo la televisión hoy en día, infestada por el sensacionalismo y el entretenimiento más burdo.
La breve duración de la película promueve un ritmo ligero, que no decae en ningún momento. Hasta las evidentes trampas del guion se digieren con facilidad. Una vez más el día se cierra con la película acertada, aunque 'Scare Campaign' no nos cambiará la vida, al menos nos deja ir antes a casa a descansar.
Lo mejor: Cuando ya sabes lo que va a pasar en un par de escenas, no se dilata innecesariamente la espera para confirmar las sospechas.
Lo peor: No le saca todo el jugo a una idea que, irónicamente, se habría visto favorecida en el comprimido formato televisivo.
Nota: 5