Antes de 1989, Stephen King ya era la estrella y el referente que es a día de hoy para el mundo del terror, tanto en la literatura como el cine. Desde hacía poco más de un par de décadas, la obra del escritor ya había podido empezar a verse en pantalla con una retahíla de adaptaciones que se elevaron a la categoría de obras maestras.
Nombres clave para el género como Brian de Palma, David Cronenberg, George A. Romero, John Carpenter o Tobe Hooper, habían sido quienes habían aportado su granito de arena al universo de Stephen King, dirigiendo algunas de las adaptaciones más recordadas de la obra del autor de Maine.
Pesadillas para todos
Considerando que se trataba de una de sus obras más personales, King vendió los derechos de 'Cementerio de animales' a Paramount, quien inició la búsqueda del equipo idóneo para llevar a cabo un título que acabó calando en el imaginario de toda una generación como uno de los films más terroríficos de la época.
Mary Lambert no solo fue la primera mujer en acercarse a la obra de King como directora, sino que logró encumbrar (todavía más) el imaginario del escritor otorgándole al género toda una serie de monstruos y momentos memorables (para la posteridad quedaron el pequeño Miko Hughes como el espeluznante Gage Creed o la tétrica Zelda que será fuente de pesadillas para Denise Crosby), los cuales recordamos treinta años después con el motivo del estreno de 'Cementerio de animales', la nueva versión de la novela dirigida por Kevin Kölsch y Dennis Widmyer.
La nueva 'Cementerio de animales' llega a los cines el 5 de abril. Por su parte, Sony Pictures Home Entertainment ha sacado a la venta una nueva edición doméstica de 'Cementerio viviente' para celebrar su 30 aniversario. Podéis encontrar la película remasterizada en Blu-Ray, 4K UHD, DVD (sin remasterizar) y en una edición especial limitada en caja metálica.
Curiosidades de 'Cementerio viviente'
Un proyecto de Romero
Después de haber trabajado junto a Stephen King en 'Creepshow', a finales de los ochenta George A. Romero iba a ser el encargado de dirigir la adaptación de la novela 'Cementerio de animales'.
El director estuvo implicado en el proyecto durante un tiempo, hasta que por motivos de agenda (en 1988 estrenaba 'Atracción diabólica' y también estaba embarcado junto a Dario Argento en 'Los ojos del Diablo') y otros compromisos que tenía establecidos desde antes, tuvo que abandonarlo. Sería entonces cuando la batuta de la dirección recayó sobre Mary Lambert.
La implicación de King
Después de haber hecho sueño pinitos como guionista en otras de las adaptaciones de su obra que se habían llevado a cabo, el propio Stephen King fue quien se encargó de adaptar al guion su propia novela.
El autor ya lo había hecho antes, pues su verdadero debut como guionista había sido en 1982 con 'Creepshow', al que siguieron 'Los ojos del gato', 'Miedo azul' y 'La rebelión de las máquinas' (que él mismo dirigió).
Debido a que el rodaje de 'Cementerio viviente' se produjo muy cerca de donde el autor estaba viviendo por aquel entonces, este se implicó de lleno en la filmación, estando presente en el set de forma constante.
La cláusula
Hubo un tiempo en el que Stephen King vendía encantado los derechos de sus novelas para que estas fuesen llevadas a cabo al cine, pero en el caso de 'Cementerio viviente', se supo que el autor quiso tener cierto control creativo desde el primer momento.
Tal vez porque aún estaba disgustado con lo que Stanley Kubrick había hecho con 'El resplandor', o porque 'Cementerio de mascotas' siga siendo una de las obras que considera más personales y con las que ha llegado más lejos en cuanto a la concepción del horror, pero King dejó bien claro que si la película se rodaba, tendría que hacerse en Maine, el lugar para el cual fue concebida la historia. Por lo tanto, el principal motivo por el que King estuvo tan presente en el rodaje fue porque, de alguna forma u otra, él mismo así lo había querido.
Quién pudo ser Louis Creed
Tras el apabullante éxito de 'Posesión infernal 2: Terroríficamente muertos', la productora de 'Cementerio viviente' quiso fichar a Bruce Campbell para que este fuese el protagonista, el sufrido padre de familia Louis Creed.
Al parecer, el actor estuvo conforme a aceptar el proyecto, pero debido a su apretada agenda (en 1989 estrenó cuatro películas) tuvo que desechar la idea. Fue entonces cuando los productores contrataron a Dale Midkiff, quien apenas acababa de comenzar en el mundo de interpretación.
El terrorífico Pascow
El personaje de Victor Pascow, un joven que muere atropellado para convertirse su espíritu en una especie de guía de ultratumba para el personaje de Louis, es uno de los más recordados de la película.
Interpretado por Brad Greenquist, este se tenía que someter a largas sesiones de maquillaje para conseguir el aspecto realista con el que le vimos en pantalla. Tal era el nivel de realismo conseguido, que el propio actor confesó en una entrevista que durante los descansos para comer, nadie quería sentarse a su lado.
Buscando a Zelda
Después de haber estado presente en el casting para dar con la actriz perfecta para ser Zelda, Mary Lambert lo tuvo claro y pensó que lo que necesitaba la película era a alguien a quien no se le tuviera que maquillar en exceso para parecer una auténtica víctima de las deformaciones provocadas por la meningitis.
Tras ver a una larga lista de mujeres, Lambert acabó proponiendo que el encargado de llevar a cabo el tétrico personaje fuese Andrew Hubatsek, quien con un poco de caracterización se convirtió en la perfecta (y terrorífica) Zelda que hoy todos recordamos y que sería la fuente de pesadillas para Rachel Creed (Denise Crosby).
Por decisión de la directora
Si algo queda claro en base a 'Cementerio viviente', es que Mary Lambert supo imponerse a las decisiones de la productora, demostrando que su criterio era mucho más importante (y válido) de lo que muchos consideraron.
No solo el hecho de contratar a un hombre para que fuese Zelda acabó dando resultados, sino que ella fue quien apostó al completo por Fred Gwynne para que diese vida a Jud Crandall, poniéndose en contra a gran parte de los productores, quienes consideraron que era una mala elección debido a que el público le seguiría recordando como el mítico Herman Munster de 'The Munsters', algo que podía hacer que no se lo tomasen en serio. Para sorpresa de todos, el actor logró componer a su personaje haciendo que nos olvidemos por completo de su icónico rol en la sitcom de los sesenta.
Simbología del terror
En la novela, Stephen King deja claro que el horror que subyace en el cementerio cuyos cuerpos regresan a la vida tras ser enterrados, es el Wendigo, un demonio de las culturas amerindias que ha sido parte del folclore norteamericano desde hace siglos.
Con la idea de que el misterio en torno al emplazamiento fuese aún mayor, se optó por no dar tantas explicaciones, dejando a un lado ese supuesto protagonismo del Wendigo (que King había dejado claro que tenía que salir en el guion).
Por aquello de jugar con la simbología, de forma muy sutil se intentó que el personaje de Zelda acabase sugiriéndose como un monstruoso ser que regresará años después con la forma del nuevo Gage Creed (Miko Hughes). Es por ello que se presentó a ambos personajes con ropajes similares.
El final original
Existe un montaje original que fue el que Mary Lambert entregó a Paramount, y el cual mandó ser acortado debido a que el metraje se excedía demasiado.
Entre otras cosas que la productora no quiso tener en cuenta, estuvo el final. El que Lambert había rodado fue considerado demasiado ambiguo, ya que en él se mostraba a Rachel Creed regresando a casa como una no muerta. La película terminaba con un primer plano de Dale Midkiff observando a su esposa y sabiendo que ella ya no es la misma.
Los productores optaron por que se volviera a rodar, incluyendo más visibilidad para el personaje de Rachel en esta secuencia (con su pertinente maquillaje) y hacer que el espectador fuera testigo de cómo esta asesinaba al protagonista.
Legado
Habiendo costado once millones y medio de dólares, 'Cementerio viviente' consiguió recaudar en taquilla 57,5, cifra que dio luz verde a que se rodase una secuela, 'Cementerio viviente 2'. Esta, también dirigida por Mary Lambert y protagonizada por Edward Furlong, supuso un batacazo comercial y la crítica le dio la espalda. De forma paralela, y gracias a su fama en los videoclubs, la película original empezó a adquirir cierto estatus de culto.
Sería en 2013 cuando se empezó a hablar de una nueva versión, para la cual sonaron nombres de director como los de Juan Carlos Fresnadillo y Andy Muschietti. Finalmente, en 2017 se anunció que Kevin Kölsch y Dennis Widmyer (responsables de 'Starry eyes') serían los encargados de dirigir 'Cementerio de animales', escrita por Jeff Buhler ('El vagón de la muerte', 'The Prodigy').