Nominada a ocho premios Oscar, 'Dreamgirls' narraba con elegancia, exuberancia y cierto talento el ascenso a la fama de un trío vocal femenino de R&B, las Dreamettes, formado por Deena Jones, fantástica Beyoncé, Effie White, excelente Jennifer Hudson, y Lorrell Robinson, estupenda Anika Noni Rose. Su carrera, empujada al estrellato tras participar en un concurso de talentos donde son descubiertas por el representante Curtis Taylor, Jr. (Jamie Foxx), que les ofrece trabajar junto a James Early (brillante y desatado Eddie Murphy), un cantante con gran popularidad en aquellos años, finales de los 60 y comienzos de los 70, terminará convertida en un cúmulo de problemas y conflictos internos. Menudo giro inesperado.
En cualquier caso, hablamos de una película que pese a caer en multitud de tópicos y lugares comunes del género, consigue dejar fluir con acierto todas sus influencias (evidentes), la imagen y estética de grupos como las Supremes o la visión comercial de una compañía discográfica como la Motown, entre otras, sin que molesten demasiado. Y por encima de todo, cuenta con tres voces impecables capaces de hacer auténticas maravillas, protagonizando números musicales de un poder y una fuerza envidiables.
Y es que, lo mejor de una propuesta como 'Dreamgirls' es su capacidad para transmitir todos los sentimientos de sus personajes a través de las canciones. Ahí está la auténtica clave de que este musical brille (muy) por encima de sus muchas imperfecciones. Y por eso, al final, uno no puede más que declarar su fanatismo hacia las Dreamettes. Pasen los años que pasen.
Curiosidades de 'Dreamgirls'
El armario de Beyoncé
A lo largo de los más de 130 minutos de duración de 'Dreamgirls', Beyoncé aparece con, nada más y nada menos, que 45 vestidos diferentes. Una labor de vestuario liderada por Sharen Davis que fue reconocida por la Academia con una nominación al Oscar. Eso sí, finalmente la estatuilla fue a parar a las monárquicas manos de la irritante 'María Antonieta' de Sofia Coppola.
Cruzando la pasarela
Antes de participar en 'Dreamgirls', Jennifer Hudson había participado en el famoso programa de televisión estadounidense 'American Idol', donde llegó incluso a ser una de las finalistas de su edición. De la pequeña pantalla a la grande. Y al Oscar.
La Estrella
En un primer momento, el director Bill Condon tenía claro que quería que fueran tres actrices desconocidas las que protagonizaran 'Dreamgirls'. Sin embargo, cuando vio las pruebas de cámara y ensayos realizados por Beyoncé para optar al papel de Deena, cambió de opinión. Totalmente comprensible.
Vestuario ilustre
Más allá del citado armario de Beyoncé, inabarcable, la responsable de vestuario de 'Dreamgirls', Sharen Davis también dedicó mucho tiempo para dar con la ropa más idónea para sus actores. En este caso, las referencias fueron tres gigantes: James Brown, Jackie Wilson y Prince. Por otro lado, para vestir a las actrices, las legendarias influencias llegaron de la mano de Aretha Franklin, Billie Holiday y Mae West.
Días finales
Bill Condon tenía clarísimo desde el principio que el número musical de 'And I Am Telling You I'm Not Going' era El Momento de 'Dreamgirls'. Por eso, decidió dirigir la escena durante los últimos cuatro días de rodaje, consiguiendo así que Jennifer Hudson, la actriz protagonista de este prodigio, tuviera tiempo suficiente para meterse en la piel de su personaje y entenderlo a la perfección. La espera mereció la pena.
Los cambios de Foxx
La primera vez que Jamie Foxx recibió la oferta para sumarse a 'Dreamgirls' la rechazó argumentando que no le pagaban el suficiente dinero. A partir de ahí, el estudio inició la búsqueda de otro actor que pudiera encajar en el papel, tanteando las posibilidades de contar con Will Smith y Denzel Washington. Sin embargo, cuando Foxx descubrió que Beyoncé y Eddie Murphy estaban en el proyecto, cambió de opinión y le dijo sí a Bill Condon y compañía.
Dando vueltas
Antes de que 'Dreamgirls' se convirtiera en una de las grandes películas de 2006, el proyecto ya había estado a punto de convertirse en realidad en varias ocasiones. La primera, a finales de los ochenta, nació con la idea de que Whitney Houston fuera Deena, un objetivo que acabó en nada cuando la legendaria artista exigió que quería cantar en la película incluso algunas de las canciones que les correspondían al resto de personajes, siendo especialmente insistente en el caso de 'And I Am Telling You I'm Not Going'.
Años más tarde, Joel Schumacher iba a ser el director de la película y Lauryn Hill (Deena) y Kelly Price (Effie) las protagonistas. Sin embargo, tras el fracaso de varios biopics musicales que se fueron sucediendo durante esos meses, el estudio decidió cancelar el proyecto. Y no fue hasta que 'Chicago', en 2002, arrasó con crítica, público y premios Oscar cuando finalmente se decidió dar luz verde a 'Dreamgirls'. Bill Condon, el primer director propuesto por los productores, dijo sí y la maquinaria comenzó a moverse. El resto, como se suele decir, es historia.
Direcciones de reloj
Una de las indicaciones más especiales y genuinas que le dio el director Bill Condon a Jennifer Hudson al comienzo del rodaje de 'Dreamgirls' fue, atención, que llegara todos los días tarde al set. Así, aseguraba el cineasta, la actriz podría comprender mejor el comportamiento de diva que tiene su personaje en determinados momentos de la película.
Sin categoría reina
'Dreamgirls' tiene el dudoso honor de ser la única película en la historia de los Oscar que lidera el número de nominaciones en su año, consiguió ocho candidaturas, pero que, sin embargo, se queda fuera de la categoría de Mejor Película. Ver (y escuchar) para creer.
El truco del tacón
La actriz Anika Noni Rose, la cual está estupenda en su interpretación, tuvo que usar tacones de seis pulgadas durante el rodaje del número musical que da título a la película para, de esta forma, poder aparecer bien en el plano junto a sus compañeras Beyoncé y Jennifer Hudson. Nadie dijo que fuera fácil ser una Dreamettes.