Alicia ha habido más de una. Con su fábula ambientada en la España dividida de la posguerra, Guillermo del Toro la atavió con un vestido verde para internarse, en vez de en una madriguera habitada por un acelerado conejo, en el escondite de un sapo envenenado que impedía a la madre naturaleza seguir su curso.
El rastro de Lewis Carroll va dejando miguitas durante todo 'El laberinto del Fauno', protagonizada por una niña llamada Ofelia, a la que da vida Ivana Baquero, que se enfrenta a las tinieblas por regresar al Reino Subterráneo así como al terror de quedar bajo el amparo del Capitán Vidal (Sergi López), un fascista con el propósito de limpiar su patria de "insurrectos".
De la fantasía a una cruda realidad
Del Toro entremezcla temas en esta película, como viene siendo habitual en su forma de hacer cine, en una dulce metáfora llena también de rabia, con un mensaje interior anclado en la fantasía pero con reflexiones más que extrapolables a la realidad que nos rodea. Ahora que el Hombre Pálido parece que ataca de nuevo, reunimos aquí 10 curiosidades del gran delirio que iluminó las categorías técnicas de los Oscar en 2017.
'El laberinto del fauno' en 10 curiosidades
Un presupuesto más sustancioso
Las productoras norteamericanas estuvieron mucho tiempo detrás del proyecto de Guillermo del Toro. De hecho, había tanto interés al otro lado del charco que al director le llegaron a ofrecer el doble del presupuesto con el que acabó realizando la película (19 millones de dólares) para que se rodase en inglés, pero Del Toro se negó para mantener el guión tal y como lo había concebido y que no se viese afectado por las exigencias del mercado.
El papel que no pudo hacer Javier Cámara
Javier Cámara pudo ser el Doctor Ferreiro en la película, papel que acabó interpretando el desaparecido Álex Angulo. Al actor de 'Narcos' le resultó imposible participar en 'El laberinto del Fauno' y compaginarlo con otro de sus trabajos. Algo de lo que, según confesó en un encuentro con El Mundo, se arrepintió por no haberlo intentado más.
En el top de las críticas
Es la mejor película de 2006, en lo que a críticas se refiere, según Metacritic. 'El laberinto del Fauno' está en primera posición en el ranking de Mejores Películas de ese año con una nota media de 9,8, por encima de filmes como 'Hijos de los hombres', 'Infiltrados' o 'Volver'.
Un aplauso interminable
A la buena recepción por parte de la crítica, hay que sumarle los 20 minutos que el público estuvo aplaudiendo la cinta en su proyección en el Festival de Cannes. Alfonso Cuarón, director de 'Gravity' y 'Harry Potter y el prisionero de Azkaban', acompaña a su amigo Del Toro y cuenta lo emocionante que fue para el cineasta esta ovación: entre lloros, chistes y no saber muy bien cómo reaccionar.
La sorpresa del director con Ivana Baquero
Antes de encontrar a la Ofelia ideal para el papel, el guión comtemplaba un personaje más pequeño, con una niña que tuviera 8 años. Sin embargo, el cineasta al ver la audición de Ivana Baquero, que entonces tenía 10 años, se quedó impresionado y adaptó el papel para poder ficharla como protagonista.
Sin espacio para la improvisación
Doug Jones tenía un doble papel en la película. No sólo interpretó al Fauno, sino que también se puso en la piel flácida del Hombre Pálido. Pero ésta no era su principal preocupación en la película sino que era el español, idioma que no hablaba, el gran reto al que se enfrentaba. Por eso tuvo que aprenderse también las líneas de Ivana Baquero de memoria para saber cuándo debía hablar.
¿Quién es el Hombre Pálido?
Guillermo del Toro empezó a imaginar al Hombre Pálido pensando en una persona con kilos de más que, al perder peso, tiene que enfrentarse a la piel que le cuelga. Cinco horas de maquillaje y la capacidad para hacer movimientos extraños de Doug Jones gracias a su faceta de contorsionista hicieron el resto.
No obstante, el Hombre Pálido es, cómo no, una metáfora y Del Toro dejó claro recientemente que sigue teniendo su relevancia. Para él, representa a la Iglesia y al fascismo devorando a los que menos tienen aún cuando disfrutan de un abundante banquete, todo ello extensible a la crueldad institucional de los que se aprovechan de los más indefensos. "No es casualidad", decía el director en Twitter, "que sea hombre y pálido".
La escena más complicada
La segunda prueba a la que se tiene que enfrentar Ofelia incluía una de las escenas más difíciles de rodar: el momento en el que el Hombre Pálido devora a dos de las tres hadas que acompañaban a la niña tras comerse la pequeña dos uvas y despertar al monstruo. La clave de lo que luego se vería en pantalla estaba en unos condones llenos de sangre que Jones, caracterizado como el Hombre Pálido, tenía que ir mordiendo y sosteniendo en la boca.
En la guarida de este ser se cuela una clara referencia de las pinturas negras de Goya, concretamente, de 'Saturno devorando a su hijo'. Por esta y otras escenas violentas de la película, 'El laberinto del Fauno' fue censurada en Malasia.
Con caballos... nunca más
El filme tiene numerosas escenas a caballo de los soldados del Capitán. Muy importantes son, sobre todo, aquellas en las que persiguen a los maquis en la montaña y a algún otro personaje. Guillermo del Toro no es precisamente un amante de estos animales y tener que rodar con ellos no mejoró la situación ya que Manolo Solo, que interpreta a Garcés en la cinta, tuvo un percance durante el rodaje por culpa de un caballo.
Así se hizo el fauno
Del Toro creó un sistema para que las piernas del Fauno estuvieran presentes en el rodaje, por lo que sólo hubo un acabado final digital por debajo de la rodilla. Además, los afortunados que pasearon entre los escenarios del filme, que estaban hechos de cartón piedra, contaban que daban tan bien el pego que hacía falta tocar las paredes con los nudillos para saber que no estaban hechos realmente de piedra.
