La hemos conocido durante muchos años como la hermana mayor de la familia más caótica y espabilada de todo Chicago. El papel de Fiona Gallagher ha convertido a Emmy Rossum en una de las caras más reconocidas a lo largo y ancho del planeta. Pero, aunque muchos lo piensen, su carrera interpretativa no comenzó con el remake americano de 'Shameless'.
Durante muchos años trabajó en diferentes productos cinematográficos en los que ahora nos llama la atención cuando los revisamos. Su papel protagonista en 'El fantasma de la ópera', su trabajo junto a Jake Gyllenhaal en 'El día de mañana', el de la joven pasajera del 'Poseidón', o el de la fatídica hija de Sean Penn asesinada en la fantástica 'Mystic River', son ejemplos de una carrera más que interesante para una actriz de tan corta edad.
Pero ya queda lejos cuando esta actriz nacida hace 33 años en Nueva York debutó en la televisión gracias a un pequeño papel en 'Ley y orden', y ya antes, había creado una larga carrera como cantante infantil de ópera. Nacida en el seno de una familia judía desestructurada, queremos honrar el cumpleaños de Rossum con un repaso a las mejores curiosidades de esta actriz que tanto tiene que ofrecer en los próximos años.
Carrera en stand-by
Tras abandonar el papel que le dio la fama tras ocho temporadas al frente de la serie de Showtime, Rossum parece decidida a tomarse un descanso y replantearse su estrategia. Hace unos meses estrenó la cinta de Liam Neeson, 'Venganza bajo cero', pero en el horizonte no se le conocen nuevos proyectos. En cambio, ha sido su faceta como directora la que ha exprimido últimamente. El capítulo seis de la nueva serie de Amazon Prime Video ('Modern Love'), estará dirigido por Rossum.
Curiosidades de Emmy Rossum
De buena familia
Como muchas chicas de clase alta en Nueva York, Rossum acudió a una escuela de élite y privada para mujeres. Allí coincidió con otras actrices bien conocidas en nuestra época como Gwyneth Paltrow o Kerry Washington. Aunque parece ser que Rossum nunca se sintió muy identificada con el tipo de educación que se impartía, ni con el resto de compañeras de clase:
"La verdad es que, probablemente no quería ser amiga de algunas de esas chicas, porque entendí que muchos de sus valores eran algo engañosos. Ahora, por supuesto, todas esas chicas me llaman diciéndome que deberíamos comer juntos, y yo me pongo en plan. ¿No recuerdas lo poco que te gustaba en el pasado?".
Enamorada de la música
Pese a ser conocida en todo el mundo por su labor en el mundo de la interpretación, la música ha jugado un papel fundamental en su vida (su ópera favorita es 'Carmen').
Ha aparecido en 20 óperas diferentes cantando en hasta 5 idiomas distintos, y nunca ha visto sobre el escenario la opera en la que se basa la película que protagonizó ('El fantasma de la ópera'). Según Rossum, prefería prepararse el papel de otra manera, como, por ejemplo, acudiendo a una médium que le habló largo y tendido sobre su fallecida abuela.
Comienzos en la música
Tras conseguir un salario equitativo al de su compañero de reparto en 'Shameless' (William H. Macy), podríamos decir que las cuentas de Rossum están más que saneadas.
Pero en el pasado tuvo que ver como ganaba solo 5 dólares por noche cantando en un coro de niños, mientras que había caballos en el escenario que se llevaban 150. Más tarde conseguiría dar un paso adelante y debutar en la Ópera Metropolitana de Nueva York con siete años, donde cantó 'Cumpleaños Feliz' a la audiencia.
Problemas alimenticios
A pronta edad descubrió que era celiaca, una enfermedad que no te permite tolerar ningún alimento que contenga gluten. Puede que fuera esta condición (y su pasión por la cocina), lo que le llevase a tomar clases de cocina en Le Cordon Bleu de Londres. Seguro que ahora tiene un amplio catálogo de recetas sin rastro de gluten o trigo en ellas.
Sueños cumplidos
Cuando un actor inicia su carrera, siempre tiene un puñado de artistas a los que siempre ha admirado. Rossum tiene la suerte de haber compartido pantalla con sus dos actores favoritos a muy corta edad. Con Miranda Richardson, coincidió en 'El fantasma de la ópera', y con Sean Penn hizo lo propio en 'Mystic River'. Rossum recuerda muy bien un consejo que Penn le dio durante el rodaje de este filme:
"Me dijo que no debería sentir la necesidad de estar en el foco de la industria y destacar todo el tiempo. Que una carrera se basa en la longevidad. Así que solo quiero hacer los mejores proyectos y trabajar con los mejores. Eso es por lo que me esfuerzo".
Su primer amor
En 2006 grabó un álbum para Geffen Records y en 2013, su álbum 'Sentimental Journey' se coló en la lista de éxitos del Billboard Jazz Albums.
"Estoy en una serie de televisión, y tengo mucha suerte por ello. Paga el alquiler, así no tengo que ganar mucho dinero en la música, y la música siempre ha sido mi primer amor. No estoy en el negocio de la música por el dinero o la fama. Eso es algo que aprendí siendo una niña en el Met".
Vida en pareja
Rossum se casó en 2008 con un productor y emprendedor musical, pero tras un año decidieron separarse. No fue hasta 2015 cuando empezó a salir con su actual marido, el escritor y director de 'Mr. Robot', Sam Esmail. La pareja se casó en 2017 y tienen planeado trabajar juntos en un proyecto que se estrenará en los próximos años.
Fracasos necesarios
La carrera de Rossum podría servir de gran ejemplo de actriz con talento que no se encasilla en la figura que espera la industria. Si a eso le sumamos la suerte, el combo es perfecto. Rossum audicionó para el papel de Sue Storm en el remake de 'Los cuatro fantásticos', pero fue rechazada cuando se eligió a Kate Mara. Sabiendo como acabó la producción, bien por Emmy.
No es tan bonito como lo pintan
Puede que los besos y las escenas de cama queden muy bien en la pantalla de cine, pero la realidad es bien distinta, pues los rodajes suelen ser de lo más incómodos. Rossum no guarda buen recuerdo de su beso con Patrick Wilson en 'El fantasma de la ópera':
"Esa escena, la grabamos durante tres días. La escena cuando mi personaje besa apasionadamente a su prometido por primera vez. Era muy compleja debido a la nieve, y al final de esos tres días le había besado tantas veces que mis labios se habían hinchado tanto que tenía que usar hielo entre toma y toma".
Actriz con suerte
Rossum siempre esquivó muy bien el ser definida como niña prodigio, juguete roto o estrella emergente. Pero parece que todo se debe a la suerte y que la actriz nunca siguió estrategia alguna.
"No tenía ninguna estrategia, se debía al instinto. Si mis tripas sienten que debo coger el personaje, siento que es una historia que debe ser contada. Claro que, de manera retrospectiva, pienso que fue una idea fantástica el no hacer cintas glamurosas ya que la gente me veía como una princesa, y sobre todo tras El fantasma de la ópera y Poseidón. Mirando atrás, si había una estrategia, fue una muy buena. Pero, por ejemplo, Shameless estuvo años en desarrollo por la HBO con Woody Harrelson en el papel protagonista, por lo que no podría haber conseguido el papel debido a mi edad. En Hollywood, se trata mucho de la suerte".