Jack Ryan siempre ha sido un personaje de ficción realmente conocido, aunque ahora tenga más visibilidad que nunca con la popular serie de Amazon que lleva su nombre. Pero es innegable que una de sus adaptaciones al cine más conocidas es, sin duda, 'La caza del Octubre Rojo'.
El film nos presenta a un General de la Unión Soviética que, en plena Guerra Fría, planea dirigirse con su submarino hasta los Estados Unidos. Lógicamente, el Gobierno de este país lo ve como una amenaza, y encarga al brillante analista de la CIA Jack Ryan que investigue lo que está sucediendo.
Fue la primera adaptación de las conocidas novelas de Tom Clancy al cine y, seguramente, se trate de la mejor de todas ellas. Sean Connery ponía todo su carisma al frente de la cinta, aunque el intérprete que se puso en la piel de Jack Ryan fue Alec Baldwin. Sin duda, todo un clásico moderno.
Curiosidades de 'La caza del Octubre Rojo'
Esquema de colores
Entre escena y escena, había ciertas ocasiones en las que el espectador podía perderse a la hora de saber en el interior de qué submarino estaba ocurriendo la acción. Es por ello que se creó un esquema de color con las luces para así facilitar ese trabajo, identificando de forma sencilla cada submarino. El Red October tenía luces azules, el "V.K. Konovalov" verdes y el Dallas rojas.
Congreso VS CIA
Tras la publicación de la novela de Tom Clancy que se adaptó para este film, algunos miembros del Congreso contactaron a la CIA para preguntar cómo era posible que los rusos hubiesen inventado el sistema de propulsión "caterpillar drive" antes que la Marina americana. Seguramente, se sorprenderían al enterarse de que ese célebre "caterpillar drive" era, simplemente, ficción.
Preparación a bordo
Todos sabemos que Sean Connery siempre ha sido un actor realmente comprometido con su trabajo, y nunca ha tenido reparos a la hora de preparar un nuevo personaje a conciencia. Para este rol, pasó un tiempo a bordo del U.S.S. Puffer, e incluso se le asignó el rango de Comandante, pudiendo así dar órdenes a sus subordinados.
Armagedón lingüístico
'La caza del Octubre Rojo' comienza en ruso, pero cambia rápidamente al inglés cuando, en una escena del principio, se lee el pasaje de un libro con una cita de Robert Oppenheimer. Curiosamente, presagiando los eventos del conflicto, ese cambio de idioma ocurre con la palabra "Armagedón"; que es igual en ambas lenguas, pero se pronuncia de forma diferente.
El submarino colgante
El submarino Red October nunca llegó a estar bajo el agua. Ese efecto se logró usando humo en el plató de la nave y unos cuantos retoques digitales. El submarino colgaba desde arriba enganchado a doce cables, lo que le daba la habilidad de poder ladearse y girar tanto como se quisiera, para facilitar el trabajo y darle mayor realismo.
Alístate en la Marina
El Gobierno estadounidense no deja pasar ni una, y es por ello que, cuando se estrenó la película que homenajeamos, no dudó en mandar a reclutadores de la Marina a colocar cabinas en algunos cines, por si a la gente le entraba el gusanillo de alistarse y probar suerte bajo el agua. El Pentágono esperaba que este film consiguiera para la Marina lo que la célebre 'Top Gun' consiguió para Aviación naval.
"Irreal"
Tras llegarle por fax el guion, Sean Connery vio claro que debía rechazar el papel, pues creía que el argumento no era realista para estar ambientado tras la Guerra Fría. Lo que sucedió fue que el encargado de haber enviado ese fax olvidó incluir en él que la película era histórica. Una vez que todo se aclaró, el intérprete aceptó el trabajo.
Persiguiendo a Harrison
Alec Baldwin tuvo la suerte de que Harrison Ford rechazara el papel de Jack Ryan, y así pudo apropiárselo él. Sin embargo, el actor no dudó en pedir un gran aumento de sueldo para repetir su rol en 'Juego de patriotas'. Pero los productores le dijeron claramente que, por ese precio, podían conseguir a Harrison Ford. Baldwin se mantuvo en sus trece, por lo que el estudio le ofreció ese dinero a Harrison Ford, y acabó aceptando el papel.
Una peluca de oro
Tras hablar con el departamento de maquillaje y vestuario, Sean Connery llegó un día al plató con una peluca que incorporaba una coleta. A pesar de que a John McTiernan no le hacía ninguna gracia, el actor usó su influencia para salirse con la suya. Sin embargo, el director de fotografía Jan De Bont le dijo, literalmente, mientras se partía de risa que parecía que llevara encima "una polla flácida colgando". Tras el cachondeo general, Connery no tardó en quitársela, pero la tontería de la peluca le costó al estudio unos 20.000 dólares, pues tuvieron que volver a grabar algunas escenas con la nueva peluca, que no era más que una baratija.
La cinta roja
Aquellos que hayan tenido la suerte de vivir el apogeo del VHS, sabrán de sobra la apariencia de una cinta de vídeo. Normalmente, eran negras, pero, al igual que los vinilos, pueden hacerse de varios colores. Eso fue lo que sucedió con la de este film cuando fue lanzado al mercado doméstico en 1991, y es que el VHS de 'La caza del Octubre Rojo' era de un color rojo intenso.
