Bienvenidos/as a la mejor película como director de Clint Eastwood. La joya de la corona, esa cima cinematográfica que resume con inigualable maestría todas las virtudes excepcionales de un cineasta único. Vendida de manera indefendible como una historia de superación deportiva al más puro estilo 'Rocky', inmediatamente después de producirse su estreno se desveló la verdadera naturaleza de 'Million Dollar Baby', es decir, el de un drama humano de primer nivel, una historia conmovedora y trágica capaz de despertar un más que interesante debate ético y moral en el espectador.
La mano experta de Eastwood para emocionar a través de la contención y los pequeños gestos brilla con especial intensidad en esta obra maestra apabullante en su sencillez, que desarma con contundencia al corazón más fuerte, que coloca el nudo en la garganta y se cierra con uno de esos planos finales que forman parte, con toda justicia, de la historia del cine. Cuatro Oscar, incluyendo el de Mejor Película y Mejor Director, pusieron punto y final a la trayectoria de una película inolvidable, necesaria e imprescindible.
Con un reparto en permanente estado de gracia, con el propio Eastwood a la cabeza, en el que se dan cita interpretaciones que quitan el aliento (Hilary Swank, Morgan Freeman), un guion de auténtico acero repleto de diálogos memorables y una dirección tan sobria, clásica y elegante como de costumbre, 'Million Dollar Baby' sigue tumbando al paso del tiempo con uno de esos puños cinematográficos incontestables.
Curiosidades de 'Million Dollar Baby'
Morgan o Clint
En un primer momento, Morgan Freeman fue la opción principal que barajó el estudio para protagonizar 'Million Dollar Baby'. Sin embargo, antes incluso de que Clint Eastwood se sumara al proyecto como director y decidiera interpretar al inolvidable Frankie Dunn, Freeman ya había optado por cambiar de personaje y quedarse con el maravilloso Eddie Scrap-Iron Dupris.
Problemas de bacterias
Durante el rodaje de 'Million Dollar Baby', Hilary Swank contrajo una infección bacteriana de una ampolla que le apareció en su pie mientras entrenaba para el papel. De hecho, se trató de una situación médica tan delicada que estuvo hospitalizada cerca de tres semanas. Sin embargo, al detectar la infección durante los últimos momentos de filmación, prefirió no contarle nada a los productores de la película ni al propio Clint Eastwood.
El favor de Haggis
Paul Haggis, quien se encontraba dirigiendo 'Crash (Colisión)' en aquellos momentos, tenía pensado dirigir 'Million Dollar Baby', ya que él era el guionista de la cinta. Sin embargo, cuando Clint Eastwood le comentó que tenía interés en ponerse tanto delante como detrás de la cámara, Haggis decidió dejarle el puesto como director. Gran decisión.
Buscando apoyos
Fueron varios los estudios que, durante muchos años, estuvieron rechazando producir 'Million Dollar Baby' debido, principalmente, al tramo final de su historia. Incluso Warner Brothers no se llegó a involucrar del todo, a pesar de llevar casi toda una vida colaborando con Clint Eastwood, por lo que el cineasta se quedó sin treinta millones de dólares con los que contaba en un primer momento. Sin embargo, Eastwood consiguió convencer a Tom Rosenberg, uno de los principales jefes de Lakeshore Entertainment, para que pagara esa cantidad, la cual suponía la mitad del presupuesto.
Miss Compromiso Especial
Sandra Bullock fue la primera actriz interesada en protagonizar 'Million Dollar Baby', recomendando además a Shekhar Kapur como director. Sin embargo, cuando le ofrecieron formalmente la propuesta para llevar a cabo el proyecto, la actriz tuvo que rechazarlo ya que estaba comprometida con el rodaje de 'Miss Agente Especial 2: armada y fabulosa'.
Sin especialistas
Desde el primer momento, Hillary Swank tuvo claro que no quería contar con ninguna doble de cuerpo para sus escenas de pelea en 'Million Dollar Baby'. Dicho y hecho, todos los momentos de lucha que vemos en la película están protagonizados por la propia actriz.
Rodaje express
Aunque el plan de rodaje inicial de 'Million Dollar Baby' constaba de un calendario de 39 días, Clint Eastwood consiguió terminarlo en solamente 37. Una característica muy representativa y reconocida de la manera de trabajar del cineasta.
El interés de Eastwood
Una de las personas que más sufrió con 'Million Dollar Baby' fue el productor Al Ruddy, quien se enamoró del guion de la película y pasó nada más y nada menos que cuatro años buscando posibles estudios interesados en llevarlo a la gran pantalla.
Durante una entrevista, Ruddy comentó que ni amigos de toda la vida ni compañeros profesionales con los que llevaba décadas colaborando querían dar luz verde al proyecto, argumentando que nadie querría ver una película protagonizada por dos viejos canosos y una boxeadora. Finalmente, Clint Eastwood tomó las riendas del proyecto tras quedar totalmente conquistado por la historia.
Preparación extrema
A la hora de preparar su papel en 'Million Dollar Baby', Hilary Swank se sometió a durísimos entrenamientos con los que ganó más de 20 kilos de puro músculo. Entrenamientos contundentes y constantes que terminaron dando sus frutos en la gran pantalla.
En personaje
Durante todos y cada uno de los días de rodaje de 'Million Dollar Baby', Hillary Swank estuvo respondiendo a las instrucciones y comentarios de Clint Eastwood con un "Sí, Jefe", expresión que caracterizaba a la relación de sus personajes en la película. Una manera emotiva de seguir ligados a ellos también detrás de las cámaras.