De las películas de Studio Ghibli, 'Nicky, la aprendiz de bruja' es una de las más queridas y recordadas por el público. Se trata de uno de los primeros éxitos de la factoría y una precursora de lo que serían después 'La princesa Mononoke' y 'El viaje de Chihiro'. Porque 'Nicky, la aprendiz de bruja' es una de las grandes joyas cinematográficas dirigidas por el maestro Hayao Miyazaki.
Basada en la novela homónima de Eiko Kadono, narra cómo Nicky, una brujita de 13 años, debe marcharse de su casa un año para completar su formación como hechicera, según lo dicho por la ley de las brujas. La joven aprendiz llegará a la costera y preciosa de Koriko junto con su gato negro Jiji, en la que trabará amistad con Osono, Tombo y Ursula. Sin embargo, Nicky se enfrentará a varios problemas personales en su cambio a la madurez y la independencia.
Una de las perlas más queridas de Studio Ghibli
Aunque carezca de la complejidad de títulos como 'Nausicaä del Valle del Viento', 'Porco Rosso' o 'El castillo ambulante'; 'Nicky, la aprendiz de bruja' es uno de los mejores exponentes del espíritu de Studio Ghibli al no sólo tener una protagonista con un espíritu lleno de energía e inquebrantable, sino también por mostrar el proceso de madurez e independencia en la infancia y adolescencia, así como también tener un mensaje ecologista y feminista.
Ensombrecida por otros éxitos de Studio Ghibli, eso no quita que se está ante una de las películas más queridas de la factoría y también ante una auténtica obra maestra. El prestigioso crítico de cine Roger Ebert llegó a declarar al largometraje como el mejor filme de animación de 1989, superando a 'La sirenita'. Por ese cariño y esa dedicación, es momento de destacar 17 curiosidades y anécdotas de 'Nicky, la aprendiz de bruja'.
Curiosidades de 'Nicky, la aprendiz de bruja'
El complicado momento de la producción
'Nicky, la aprendiz de bruja' se estrenó en 1989. En los años previos a su estreno, el Studio Ghibli no estaba pasando por una buena situación financiera. Aunque 'Nausicaä del Valle del Viento' ayudase a fundar Studio Ghibli y 'El castillo en el cielo' fue lo suficientemente rentable para continuar con la empresa, lo cierto es que los resultados en taquilla de 'La tumba de las luciérnagas' y 'Mi vecino Totoro' no fueron muy halagüeños, además de haber desgastado mucho a Ghibli debido a la dedicación y profesionalidad que se vio plasmada en ambos largometrajes.
Del éxito de 'Nicky, la aprendiz de bruja' dependía que el proyecto de Studio Ghibli se solidificase y se forjase como un estudio más estable que en sus inicios, cuatro años atrás solamente. Afortunadamente, el éxito en merchandising de 'Mi vecino Totoro' ayudó a rebajar un poco la presión sobre este proyecto liderado por Hayao Miyazaki.
Miyazaki no iba a dirigirla
Realmente, Hayao Miyazaki no iba a ser el director y el guionista de 'Nicky, la aprendiz de bruja'. Cuando en 1987 el grupo Fudosha logró hacerse con los derechos cinematográficos de la novela de Eiko Kadono, se barajó la posibilidad de que el proyecto fuese liderado por Miyazaki o por Isao Takahata, cofundador de Studio Ghibli y el aclamado director que se hizo cargo de las series 'Heidi', 'Marco' y 'Ana de las Tejas Verdes'.
Sin embargo, ambos directores estaban muy ocupados con el doble proyecto de 'Mi vecino Totoro' y 'La tumba de las luciérnagas', lo que impedía a ambos hacerse frente de la adaptación. Originalmente, Miyazaki iba a ejercer sólo de productor, ya que la película iba a ser una oportunidad para los jóvenes talentos del estudio. El elegido para dirigir el filme fue Sunao Katabuchi, que posteriormente realizó la aclamada 'En este rincón del mundo', mientras que Nobuyuki Isshiki escribió un primer guion.
Pero como sucedió posteriormente con 'El castillo ambulante', Miyazaki no estuvo satisfecho con el primer borrador, haciéndose cargo de la dirección y el guion de la película. El principal motivo, según se escribió en 'The Art of Kiki's Delivery Service', escrito por Hideo Ogata, fue por la divergencia de opinión entre Miyazaki y Katabuchi e Isshiki.
El tenso conflicto con la autora original que casi cancela la película
Como sabrán todos aquellos que sigan la obra de Hayao Miyazaki, el cineasta no suele ser muy fiel a las obras que adapta en la gran pantalla, llevándolo a su personalidad y a su propio enfoque, logrando películas excepcionales y únicas. Sin embargo, eso le llevó más que un conflicto con Eiko Kadono, la escritora de la novela, ya que veía cómo su obra empezaba a no reconocerla, lo que desembocó en un enfrentamiento directo con Miyazaki.
La obra original de Kadono narra las aventuras de una brujita de 13 años en su día a día de forma episódica y de una manera más liviana. Sin embargo, Miyazaki decidió abandonar el estilo episódico y centrarse en la independencia de la muchacha, al fin y al cabo se trata de una adolescente de 13 años que debe formarse un año como bruja en una ciudad alejada de su hogar, y en los problemas a los que debe hacer frente. Hideo Ogata, en 'The Art of Kiki's Delivery Service', que recogió Laura Montero Plata en su libro, 'El mundo invisible de Hayao Miyazaki', escribió: "En el cuento original, Nicky soluciona cada dilema que encuentra con determinación y, haciendo esto, crea un círculo de amigos. Para la película, tuvimos que alterar ligeramente esta premisa [...] Queríamos explorar el asunto de la independencia más detenidamente en la versión cinematográfica. [...] El aislamiento y la desilusión [...] son mucho más intensos [...] que en la historia original".
La escritora británica especializada en animación japonesa, Helen McCarthy, dijo en sus escritos sobre Miyazaki que la relación entre el aclamado cineasta y la autora de la novela original fue tensándose de tal forma, que el proyecto cinematográfico corría peligro. Kadono no sólo estaba enfadada con los grandes cambios que hizo Miyazaki en su obra, sino también tenía sus dudas sobre si dichas modificaciones, que llegaron a distanciarse demasiado de la fuente original, valdrían para hacer una buena adaptación. Toshio Suzuki, que ejerció como productor asociado en la película, junto con Hayao Miyazaki, fueron al domicilio de la escritora y la invitaron al estudio. Tras esa visita, Kadono decidió continuar con el proyecto.
El apoyo de Yamato Transport
'Nicky, la aprendiz de bruja' estuvo a punto de cancelarse por partida doble. A las desavenencias que surgieron con Kadono se unió el conflicto con Yamato Transport. Todo tuvo que ver con una palabra que era el logo de la compañía. El título original de la película es el mismo que el del libro, 'Majo no Takkyûbin'. La palabra "takkyûbin' (que significa literalmente "correo rápido a domicilio") es una palabra registrada por Yamato Transport y que la gente usaba como sinónimo de "takuhaibin" (que significa "correo a domicilio").
Aunque no era necesaria la aprobación de la empresa para utilizar la palabra, ésta se mostró desconfiada inicialmente con la adaptación cinematográfica de la película. Tras reunirse con Toshio Suzuki no sólo Yamato Transport aceptó el proyecto, sino que decidió patrocinarlo con entusiasmo, según se pudo saber en los extra de la edición estadounidense del DVD de la película.
Un tributo a la independencia femenina
Según los autores Marta García Villar en 'Mi vecino Miyazaki' y Manu Robles en 'Antología Studio Ghibli, vol. 1: De Nausicaä a Mononoke', el principal tema de la película es la independencia de su protagonista y su proceso de madurez, más cercano a la realidad que a elementos fantásticos. Es más, Miyazaki hace un especial hincapié en la independencia femenina. Como bien se sabe, en Japón se ejerce una fuerte presión respecto al trabajo y la economía, algo que se incrementa más en el caso de las mujeres.
Salvando las distancias, 'Nicky, la aprendiz de bruja' analiza y profundiza en ese proceso de madurez y crecimiento personal, acentuándolo desde la mirada de la adolescencia femenina. La joven protagonista vivirá experiencias positivas y negativas que ayudarán a forjar su carácter y a descubrir sus verdaderas habilidades que le ayudarán a ser una persona adulta responsable. Positivas como la ayuda de amigos como Osono, Tombo o Ursula y negativas como sus primeros errores en el trabajo de paquetería o de cómo es testigo de que una chica de su misma edad desprecie el regalo de su abuela, que tanto esfuerzo le llevó preparar.
A diferencia de otras protagonistas Ghibli como Chihiro o Nausicaä, Nicky crece de manera voluntaria. Cierto es que, según estipula la ley de las brujas en la película, la niña al cumplir los 13 años debe completar su formación en otra ciudad y buscarse la vida a solas, pero es un proceso que Nicky no sólo hace voluntariamente, sino antes de tiempo. Al igual que su crecimiento es por motivación propia, los conflictos a los que se enfrente lo serán de la misma forma, siendo sus miedos, frustraciones e inseguridades los "antagonistas" de la película. Un concepto muy interesante.
Mentoras y pupilas
El cine de Studio Ghibli, los personajes femeninos suelen tener mayor presencia e importancia que los masculinos. Es más, 'Nicky, la aprendiz de bruja' sigue la tendencia de otras películas de Miyazaki de la figura de la mentora y la pupila. La pintora Ursula, amiga de Nicky, le ayuda en su proceso de madurez comentándole su experiencia cuando ella tuvo una crisis artística en la que dejó de pintar. Algo similar ocurre con Osono, la primera imagen amable de la ciudad de Koriko con la protagonista. Ella le ofrece asilo aunque, evidentemente, tendrá que trabajar por ello ("no se da nada a cambio").
Un concepto que parte de las teorías aristotélicas de múltiples analistas, que parte de la base 'Retórica' de Aristóteles y que, como expone la experta Laura Montero Plata en 'El mundo invisible de Hayao Miyazaki', ha ido perdiendo vigencia pero en el cine de Miyazaki ha evolucionado (referenciándolo al camino iniciático de un personaje protagonista) con el perfil de Peregrino-Matriarca-Guía, que también puede verse como Niño-Anciano-Adulto o Faura-Animismo-Flora. Sin duda, hay que destacar que la figura sabia haya sido dada a la figura femenina y que, en el cine de Miyazaki, la figura del peregrino ha sido mayormente otorgada a protagonistas femeninas.
En el caso de 'Nicky, la aprendiza de bruja', la figura del peregrino corresponde a Nicky, al tener que marcharse de su pueblo para formarse como bruja, mientras que la figura de la matriarca o sabia corresponde a Osono y Ursula. La imagen del guía, en este caso, sí correspondería a un personaje masculino, el de Tombo, pero que, lejos de mostrarse como un ente superior, se muestra como un personaje igual, incidiendo en la amistad de ambos personajes y en cómo Tombo puede devolver la confianza a Nicky respecto a los propios adolescentes, de los que desconfía.
La transición a la adultez, un tema constante en Ghibli
Como ya se ha hablado anteriormente, 'Nicky, la aprendiz de bruja' narra principalmente el proceso de madurez de su protagonista. Se trata de un tema muy habitual en la filmografía no sólo de Miyazaki, sino también de Isao Takahata, el otro maestro del estudio, así como también se pudo ver en las películas que no dirigieron ninguno de los fundadores de Ghibli, como el caso de 'Puedo escuchar el mar', 'Susurros del corazón', 'Arrietty y el mundo de los diminutos', 'La colina de las amapolas' o 'El recuerdo de Marnie'.
Aunque se le quiera poner como contraposición al cine de Disney o Pixar, lo que sí hace la diferencia entre Studio Ghibli y los dos estudios estadounidenses, es su manera de ahondar en los conflictos, que en el cine de Ghibli suelen ser internos ('Del revés (Inside Out)' o 'Coco' serían las principales excepciones en Pixar), al igual que sus abundantes heroínas, ya que de los 22 largometrajes del estudio, 15 están protagonizados por mujeres y otros seis tienen personajes femeninos muy relevantes y clave para el desarrollo de la película.
Emparentada con Pippi Calzaslargas y Chihiro
Como muchos saben, Miyazaki y Takahata estuvieron a punto de liderar la producción de una serie de animación de 'Pippi Calzaslargas', la serie de libros de la escritora sueca Astrid Lindgren, en 1971. La autora dio un "no" rotundo a Miyazaki y Takahata, lo que enterró lo que podría haber sido una de las adaptaciones más recordadas de las aventuras de esta pícara protagonista.
Sin embargo, las ideas que tuvieron Miyazaki y Takahata sobre el diseño del personaje de Pippi y su carácter se reciclaron. El diseño se modificó y se pudo ver uno muy similar en la protagonista de 'Las aventuras de Panda y sus amigos', mientras que el carácter audaz y enérgico de Pippi se llevó a Nicky, que también es una niña que debe hacerse cargo de ella misma.
Justamente el tener que madurar a solas, sin la referencia paterna, hace que Nicky esté muy unida a la protagonista de 'El viaje de Chihiro'. De hecho, son innumerables las críticas y análisis de expertos comparando ambas películas, saliendo beneficiada la ganadora de Oso de Oro y el Oscar en la mayor parte de los casos. Quizás la principal diferencia, es que Chihiro debe enfrentarse a adversidades mayores y ajenas, muchas de ellas de forma más hostil, mientras que el conflicto de Nicky es mucho más personal.
La heroína infravalorada de Miyazaki
Aunque 'Nicky, la aprendiz de bruja' sea una de las películas más aplaudidas de Studio Ghibli, tal es el alto nivel de la factoría, que ha solido quedarse ensombrecida por otros logros del estudio que lograron mayor prestigio, en parte por tener una trama más compleja, como sucede con 'La princesa Mononoke', 'El viaje de Chihiro' o 'El castillo ambulante', lo que hace que Nicky sea una de las heroínas más infravaloradas del cine de Miyazaki.
Y es que cuando hay tanto brillo, una trama sencilla se castiga, prueba de ello es cómo la crítica, especialmente la del universo de blogs y aficionados expertos, no se apasiona con ella a la hora de analizarla. Cierto es que antes que Nicky estuvieron Nausicaä, Sheeta, Mei y Satsuki, pero sin la aprendiz de bruja, no hubiesen existido la princesa Mononoke, Chihiro o Sophie.
Pese a ello, Nicky sí goza de muy buena popularidad entre los fans de Ghibli, de manera similar a Shizuku de 'Susurros del corazón', Arrietty de 'Arrietty y el mundo de los diminutos' y, en menor medida, a Taeko de 'Recuerdos del ayer' y Umi de 'La colina de las amapolas'.
El primer gran éxito de Studio Ghibli
En términos económicos, se puede considerar a 'Nicky, la aprendiz de bruja' como el primer gran éxito de Studio Ghibli. Con el doble estreno de 'Mi vecino Totoro' y 'La tumba de las luciérnagas', la factoría necesitaba un éxito rotundo para poder garantizar la viabilidad en el futuro del estudio.
'Nicky, la aprendiz de bruja' logró recaudar 2.170.000.000 de yenes, lo que se traduce en 19.630.037 euros, fue también la película más taquillera de Japón en 1989. Logró recaudar casi cuatro veces más que 'Mi vecino Totoro' y 'La tumba de las luciérnagas' y dio inicio a la solidificación del proyecto de Miyazaki y Takahata, algo que pudo completarse satisfactoriamente gracias a que la siguiente cinta del estudio, 'Recuerdos del ayer', que fue también otro éxito de taquilla, obteniendo 16,97 millones de euros de recaudación.
No sólo en Japón fue un éxito de taquilla, antes de que Disney distribuyese en cines de todo el mundo 'La princesa Mononoke', 'Nicky, la aprendiz de bruja' fue la primera prueba de testeo para el público occidental. De hecho, la película fue distribuida en inglés por Streamline Pictures, por orden de Tokuma Shoten, para mostrarse en los vuelos internacionales de Japan Airlines.
En 1997 fue lanzada la versión de Disney, que contó con una jovencísima Kirsten Dunst doblando a la brujita Nicky. El actor Phil Hartman dobló al gato Jiji, convirtiéndose en su último trabajo actoral, ya que fue asesinado un año más tarde por su esposa. La versión de Disney, distribuida por Buena Vista, fue un auténtico éxito de ventas, logrando la octava posición de las películas más alquiladas de la cadena Blockbuster, además de vender más de un millón de copias en territorio estadounidense, según informó la web Nausicaa.net.
Los cambios (innecesarios) que hizo Disney
Como viene siendo muy habitual por las empresas norteamericanas que deciden distribuir animación japonesa destinada a la infancia, Disney modificó varias cosas de la película original para hacerla "más accesible al público occidental". Entre ellas, se modificaron diálogos del japonés en su traducción al inglés, ya que no se consideraron propios para una niña de 13 años, como cuando Osono le ofrece tomar una taza de cacao, en verdad le ofrece una taza de café, o como cuando Nicky hace referencia a "chicos guapos" cuando habla realmente de "ir a la discoteca". Al igual, se optó por añadir música en momentos de silencio, ya que se "temía" que los niños se aburriesen, como también se cambió la canción de los créditos iniciales y finales por canciones pop en inglés.
También se agregaron diálogos, sobre todo en el personaje de Jiji, que en la versión original japonesa es mucho menos parlanchín. Se añadió también una frase cuando Ursula y Nicky hacen auto-stop, en la que la pintora dice que conoce al conductor, algo que no es así en la versión japonesa. El cambio más llamativo fue el que Jiji, en la versión de Disney, volvía a hablar con Nicky, ya que ésta había perdido sus poderes mágicos, entre ellos el de comunicarse con su gato. En la versión original, la aprendiz de bruja no vuelve a hablar con Jiji, siendo una metáfora del crecimiento y madurez de la protagonista, algo que el público occidental no pudo conocer originalmente.
Aunque todos estos cambios fueron menores, todos tuvieron que tener la aprobación de Studio Ghibli, ya que su política es muy restrictiva sobre posibles modificaciones, tras la polémica de la primera distribución de 'Nausicaä del Valle del Viento'.
Si bien, esos cambios no fueron bien vistos por el público. Prueba de ello fue que Disney, en 2010, relanzó en DVD las películas Ghibli y la nueva edición suprimió los diálogos adicionales y devolvió los silencios y la música original a la película, logrando que su doblaje fuese más fiel a la versión original, algo que también tuvo su posterior edición en Blu-Ray y la reedición distribuida por GKids. En el resto del mundo sucedió algo similar cuando Disney perdió los derechos de distribución, exceptuando Francia donde el doblaje partió directamente del japonés. En España, su reedición en 2010 por parte de Aurum, tuvo un doblaje nuevo, mucho más fiel al original, aunque no logró tener la misma aceptación que las voces del primer doblaje.
Fue boicoteada en Estados Unidos
Pese a la buena recepción que tuvo 'Nicky, la aprendiz de bruja' en varias partes del mundo, lo cierto es que no todo el mundo aplaudió que un éxito proveniente de Japón triunfase en territorios occidentales, concretamente Estados Unidos. El grupo cristiano ultraconservador Concerned Women for America boicoteó todas las proyecciones de la película, según relató Helen McCarthy en su libro 'Hayao Miyazaki: Master of Japanese Animation'.
El 5 de febrero de 1998, el grupo ultraconservador lanzó un comunicado titulado: "Disney resucita la brujería con animación japonesa", un titular con claros tintes xenófobos. En el comunicado denuncian que Disney "tiene una agenda muy oscura" y citaron la distribución de la película de Studio Ghibli como ejemplo. No sería la primera vez que Ghibli se enfrentase a grupos de extrema derecha en Estados Unidos, ya que 'Arrietty y el mundo de los diminutos' fue boicoteada durante su estreno en cines en febrero de 2012 por "fomentar el comunismo".
Disney quiso hacer un remake en imagen real
Debido al éxito que tuvo la película en su distribución doméstica, Disney quiso hacer una adaptación de la serie de novelas de Eiko Kadono en imagen real, rodada en inglés y con actores estadounidenses. En 2005 se supo que Jeff Stockwell, guionista de 'Un puente hacia Terabithia', 'El teniente otomano' y 'La peligrosa vida de los altar boys', iba a hacerse cargo del guion y que Susan Montford, Don Murphy y Mark Gordon ejercerían de productores.
Finalmente, el proyecto no se desarrolló. Se desconocen los motivos, pero supusieron un gran alivio para los fans de la película de Miyazaki, aunque fue algo que no duró todo lo que se esperaba.
Sí tuvo su adaptación en imagen real
Porque, efectivamente, finalmente 'Nicky, la aprendiz de bruja' sí tuvo su adaptación en imagen real, sólo que hecha en Japón y partiendo de únicamente de las novelas de Eiko Kadono, concretamente las dos primeras de las aventuras de la aprendiz de bruja. La película se tituló igual que la primera novela y fue dirigida por Takashi Shimizu, realizador conocido especialmente por la saga 'La maldición'.
El papel de Nicky fue interpretado por Fuka Koshiba, antigua patinadora artística que se enfrentaba a su primer papel protagonista y que tenía 17 años en el momento del estreno de la película, en marzo de 2014.
La recepción no fue tan buena como la versión animada, especialmente entre la crítica, que no la apoyó. Aunque fue rentable en cines, la sombra de la obra maestra de Hayao Miyazaki fue demasiado alargada, a eso hay que unirse que los efectos especiales se notaban demasiado para ser un largometraje producido en 2014, la trama parecía ya vista y que no era muy creíble que una chica de 17 años diese vida a una niña de 13.
Una película llena de Easter Eggs
Como viene siendo habitual en las películas de Studio Ghibli, 'Nicky, la aprendiz de bruja' está llena de Easter Eggs que hacen referencia a otras cintas de la factoría. El primero de ellos es cuando Nicky va a buscar sus ahorros en una cajita de metal que tiene en una estantería, ahí se puede ver una casita de juguete con Totoro y Mei de 'Mi vecino Totoro', al igual, cuando la aprendiz de bruja llega a la ciudad de Kokiri, casi se estrella con un autobús y éste tiene el logo "Ghibli" como publicidad.
Aunque el Easter Egg al que más cariño tiene la gente es el cameo que hace el propio Hayao Miyazaki. En una escena en la que el público está viendo en la televisión el suceso del zepelín, entre el público se puede ver la figura de Miyazaki, de manera semejante a la de Alfred Hitchcock en sus películas.
En España se le cambió el nombre
Si de algo se habrán dado cuenta los fans de Ghibli, es que en todo este especial se llama a la protagonista Nicky. Los seguidores de la factoría saben que el nombre original de la heroína de la película no es Nicky, sino Kiki, que es el nombre por el que se le conoce en todo el mundo, siendo España la única excepción.
Y ahí surge la pregunta, ¿por qué España es el único país del mundo que cambió de nombre a la protagonista? Quizás porque "Kiki" contiene connotaciones malsonantes en castellano. De hecho, "Kiki" recuerda a la frase "echar un quiqui". Esa connotación sexual podría ocasionar cierta confusión en los padres de los niños, que son los que saben su doble sentido. Para evitar burlas o situaciones que nada tienen que ver con la película, se optó por cambiar el nombre de la protagonista a Nicky.
Ese cambio de nombre tuvo el pleno de apoyo de Studio Ghibli, como sucedió originalmente con el cambio de nombre de la isla flotante de 'El castillo en el cielo', que en el primer doblaje se llamó Lapuntu en lugar de su nombre original, Laputa. Con el cambio de nombre de Kiki a Nicky, se convierte así en el único personaje del universo Ghibli que cambia de nombre en español.
Música compuesta a contrarreloj
Una anécdota bastante interesante que recoge Marta García Villar en 'Mi vecino Miyazaki' fue la que está alrededor de la composición de la banda sonora de 'Nicky, la aprendiz de bruja'. Compuesta por Joe Hisaishi, se trataba de la cuarta colaboración de Hisaishi con Miyazaki, ya que había compuesto la música de 'Nausicaä del Valle del Viento', 'El castillo en el cielo' y 'Mi vecino Totoro'. La banda sonora de 'Nicky, la aprendiz de bruja' tuvo que hacerse contrarreloj, debido a cambios de última hora.
Debido a compromisos profesionales, Hisaishi tuvo que estar fuera de Japón una temporada, lo que hizo que la composición de la música se llevase de forma paralela, al no haber comunicación directa. Esto acrecentó la impaciencia del equipo de Miyazaki y surgieron más tensiones.
Gracias a la buena labor de Isao Takahata, Hisaishi regresó a tiempo para poder reescribir y volver a componer varios temas antes de entrar a grabación, todo ello en sólo dos días, un verdadero trabajo a toda máquina. El resultado fue más que positivo, dejando una de las bandas sonoras más aplaudidas de Ghibli y Hisaishi.