A Popular', la primera creación de Ryan Murphy para la televisión, la mató la misma decisión que provocó, recientemente, una disminución de más de un millón de espectadores en la audiencia de 'The Good Doctor': el cambio de noche en la emisión. Pasar de un martes a un jueves, o de un miércoles a un domingo, repercute bastante más que el showrunner en la permanencia de las ficciones en televisión por algo tan tenido en cuenta como el ratio de público. Primera lección que se llevó un Murphy que, a estas alturas, no tiene nada que demostrar. Sus obras posteriores ('Pose', 'Feud', 'Glee' y, como joya de la corona, 'American Horror Story') han sobrevivido a ese factor gracias al fracaso que supuso la cancelación de 'Popular' en 2001, tras su segunda temporada.
Murphy reveló desde el principio cuál iba a ser el estilo de sus narrativas, dándole mucho peso a la relación entre los personajes, a la ironía y el contexto. El argumento central de 'Popular' se resumen en dos estudiantes (Brooke y Sam) diametralmente opuestas que van a ser hermanastras por la gracia del papá de una y la mamá de otra. Y bien, enfrentadas por sus prioridades y carácter, en la primera temporada los personajes interpretados por Leslie Bibb y Carly Pope se esfuerzan al máximo para convencer a sus padres de que deben dejarlo, y en la segunda hacen lo contrario, volverles a juntar. Sin embargo, no es por esto que 'Popular' es el caldo de cultivo de todo lo que ha venido después, sino por establecer ciertos patrones de conducta en sus personajes hasta el punto de conseguir eso que tan de moda se ha puesto en las producciones de este siglo: que al espectador le importen más los problemas de los protagonistas que la historia en sí.
Y vaya si Murphy logró meterse al público en el bolsillo. El único problema es que la cantidad de espectadores que amasó en los últimos meses antes de su cancelación era bajísima. Fieles, sí, pero muy pocos. No obstante, 'Popular' es la piedra fundacional de todo el universo que el creador de 'American Horror Story' ha confeccionado hasta la fecha, así que vamos a tratar de contarte todas sus curiosidades para que, aunque decidas no verla, sepas por qué Ryan Murphy es sinónimo de éxito televisivo.
Curiosidades de 'Popular'
'Glee' fue su continuación natural
'Glee' fue la tercera serie de Ryan Murphy (está precedida por 'Nip/Tuck') y, para el que no haya visto 'Popular', es su continuación natural. Aunque los personajes sean distintos, sus motivaciones son idénticas. De hecho, la cantidad de protagonistas reales de ambas series es de ocho. Las tramas y, sobre todo, la forma de enfocar la dinámica adolescente norteamericana le debe tanto a la ficción de The WB que también tomó de ella la ironía metarreferencial que la acabó convirtiendo en una de las series más importantes de los 90. En 'Popular', Murphy sentó las bases de su estilo narrativo y en 'Glee' las explotó al máximo.
Su cancelación sorprendió a (casi) todos
A pesar de sus discretas cifras de audiencia en la segunda temporada, ni espectadores, ni intérpretes, ni productores... Ni siquiera los propios Ryan Murphy y Gina Matthews se esperaban la repentina cancelación de 'Popular'. Fue una sorpresa para todos que los ejecutivos de la cadena Warner Bros. cerrasen la emisión de una tercera temporada para la que el equipo de guionistas había reservado no sólo historias nuevas, sino la explicación de otras muchas que se quedaron suspendidas en la segunda y última. Por ejemplo, la discusión que mantienen Brooke y Sam en el último capítulo por su amor hacia Harrison John se salda con Nicole, borracha, atropellando a la primera.
¿Qué pasaría después? Suerte que Murphy salió al paso del caudal de cuestiones que generó la decisión de la cadena y explicó cómo habían pensado que sería el comienzo de la tercera temporada: Resulta que John eligió a Brooke y por eso esta salió del restaurante apenada por Sam, siendo atropellada por Nicole y quedando en coma. Tras despertar, decide teñirse de morena y abandonar la popularidad. Nicole sería juzgada y puesta en libertad, mientras que Sam descubriría su homosexualidad y Lily acabaría abandonando a Josh por sus problemas con las apuestas. Giros de guión que nos perdimos por nuestra propia culpa.
Cambió el estilo de la narrativa adolescente
A principios de los 2000 las series sobre adolescentes no habían conseguido desquitarse de su carácter estereotipado y chapado como en los 90. Todos los personajes de series como 'Blossom', 'Sensación de vivir' o 'Dawson Crece' tenían unas motivaciones encuadradas en lo que se esperaba de ellos, en lo que el espectador podía percibir viendo sólo a los intérpretes que los encarnaban. Sin embargo, Murphy cambió ese estilo en 'Popular' dotando a sus personajes de doblez, de un espíritu que sí, cumplía con lo que se esperaba, pero además regalaba detalles de una profundidad bastante mayor. Jamás nadie pudo encasillar a 'Popular' porque cualquier adolescente que la viera se sentiría identificado. Lo que hoy está de moda (series como 'Élite', 'Skam' o la mencionada 'Glee') tiene trazas de lo que elaboraron Murphy y Gina Matthews en 'Popular'.
Leslie Bibb y Carly Pope lo hicieron más difícil
Leslie Bibb y Carly Pope, íntimas amigas en la época, no lo tuvieron fácil para rodar las escenas en las que sus personajes, Brooke y Sam, discutían y se enfrentaban. Lo más normal en el set de rodaje es que ambas actrices, en mitad de la tensión, comenzasen a reírse sin parar por lo absurdo que les resultaba el hecho de mantener una rivalidad tan cruel e insana cuando, en la vida real, eran grandes amigas. Este "problema" retrasaba los rodajes, aunque ponía un puntito de humor cuando el ambiente estaba más cargado que en cualquier otro momento.
Una serie para adolescentes y por ¿adolescentes?
A menudo se habla de las elecciones de casting para series y películas. Últimamente han sido especialmente virales las campañas en redes sociales contra algún intérprete que no encajaba con el estereotipo con el que había sido creado en un principio o que, simplemente, no encajaba con los gustos del imaginario colectivo troll. Pero no debemos olvidar esas extrañas encarnaciones de adultos casi en los 30 en adolescentes de instituto. 'Popular' no escapó a eso y así lo confirman los 25 años que tenían Leslie Bibb, Christopher Gorham (Harrison John) y Tammy Lynn Michaels (Nicole) por entonces, los 28 de Leslie Grossman o los 29 de Ron Lester (Sugar Daddy Bernardino).
La hermana de 'Los Vengadores' y 'Star Trek'
'Popular' dio una vuelta de tuerca a las ficciones sobre adolescentes gracias, en gran parte, al tremendo equipo de guionistas que reunió Ryan Murphy. De hecho, la serie mantiene una conexión con películas como 'Los Vengadores' o 'Star Trek' a través de sus escribientes. Tanto J.J. Abrams como Joss Whedon fueron colaboradores en los guiones de la serie.
Extrañas ausencias y desapariciones
Tantas vueltas le dio The WB a 'Popular' que ahora se entiende la disminución de audiencia: la destruyeron sin saber muy bien qué hacían. En la serie se quedaron colgadas una cantidad inmensa de historias que iban a ser explicadas en la tercera temporada. No obstante, ya para la segunda hicieron un escarnio importante con subtramas tan potentes como el fallido embarazo de Carmen (Sara Rue), la desaparición de personajes como Poppita Fresh (Anel Gómez Gorham) o el romance entre Harrison John y Mary Cherry que la cadena ordenó reescribir cuando sólo quedaba una semana para el estreno de la segunda temporada. La experiencia que tenemos ahora con los re-shoots se acerca bastante a lo que hicieron con 'Popular'.
Cliffhangers como para llenar el campo de los Mets
Eso fue lo que, según palabras de Ryan Murphy, les dijeron los ejecutivos de The WB a los guionistas. La intención primera, presuntamente, era la de renovar la serie por una tercera temporada y, por ese motivo, los mandamases de la cadena pidieron que se hicieran un puñado de cliffhangers con los que enganchar a la audiencia y recuperar gran parte del público perdido. Sin embargo, y como ya hemos explicado aquí, decidieron cancelarla abruptamente, sin dar opción a cerrar, al menos, la historia entre Brooke y Sam.
Los descansos de Leslie Grossman
Uno de los personajes más recordados, si no el que más, es el encarnado por Leslie Grossman: Mary Cherry. Excéntrica, alocada y millonaria, se trataba de un personaje que requería muchísima energía en pantalla para demostrar la desesperación que sentía por alcanzar la popularidad. Resulta especialmente desternillante el retrato comparativo que realizaba entre sureños (ella) y norteños (el resto de compañeros) para justificar su comportamiento. Grossman, tras una primera temporada con la que terminó exhausta, llegó a un acuerdo con la cadena para que la permitieran tomarse un descanso de dos días cada cuatro semanas con el simple objetivo de no volverse rematadamente loca.
¿Eran homófobos los ejecutivos de 'Popular'?
Así lo señaló Ryan Murphy en una entrevista con Entertainment Weekly: "Nunca me entendieron y siempre me pedían más. Tenían ciertas conductas homófobas, llegaron a pasarme notas en las que pedían que Mary Cherry fuese menos gay. Fue muy áspera e incómoda la relación con el estudio, no me gustó". A colación de sus declaraciones, portavoces y representantes de la cadena salieron al paso declarando que no entendían tales acusaciones, pero en que en cualquier caso seguían valorando y apreciando a Murphy. ¿A quién creemos?