El tiempo se ha empeñado en señalar a 'Scream 3' como el peldaño más bajo de la célebre saga creada por Wes Craven que revolucionó el cine de terror en la década de los 90. Sin embargo, es lo que tiene el culto, todavía quedamos una pequeña legión de defensores que, armados con un arsenal de argumentos tan válido como cualquier otro, seguimos disfrutando al máximo de una tercera entrega llena de diversión, susto, falta total de vergüenza y mala leche. Otro tema son las odiosas comparaciones, claro.
Y es que, evidentemente, 'Scream 3' no está a la misma altura que la extraordinaria 'Scream. Vigila quién llama', la espléndida 'Scream 2' o la (también) reivindicable e incomprendida 'Scream 4', pero eso no la convierte, ni mucho menos, en algo siquiera mínimamente parecido a un desastre. De hecho, estamos frente a un slasher modélico en el que todos y cada uno de los personajes obtienen un momento de oro digno de aplauso. Si lo que buscas es una película de Ghostface dándolo todo y poder interactuar con ella tratando de adivinar la siguiente muerte, ni una duda, aquí lo tienes.
Hablamos de uno de los grandes aciertos de esta legendaria saga; darle al espectador exactamente lo que pide y un par de sorpresas más. No hay trampa, el cartón brilla por su ausencia y los fuegos artificiales narrativos llegan bañados en sangre y giros imposibles. Un Cluedo de cuchillos y muertes imposibles que divierte sin descanso, entretiene sin discusión y se disfruta sin excusa. Un conjunto de logros que también están presentes en 'Scream 3'.
Curiosidades de 'Scream 3'
Peluca obligatoria
Al mismo tiempo que trabajaba en 'Scream 3', Neve Campbell se encontraba rodando la simpática 'Todos la querían...muerta' y la estupenda serie 'Cinco en familia', una situación que provocó que la actriz tuviera que usar constantemente una peluca para interpretar a la gran Sidney Prescott. Una preparación capilar que la obligaba a pasar más de dos horas en la sala de maquillaje cada mañana.
Trío de finales
Para mantener al reparto de 'Scream 3' en vilo hasta el último segundo, el maravilloso Wes Craven llegó a rodar tres finales diferentes para la película, ocultando cual sería el elegido en la misma sala de montaje.
Los días justos
El contrato de Neve Campbell para 'Scream 3' le permitió estar en el set solamente veinte días, razón principal por la que su personaje para bastante menos tiempo en pantalla que en las dos películas precedentes. Su ausencia en términos de presencia, eso sí, favoreció el protagonismo de personajes más secundarios.
Amor entre el terror
La saga 'Scream' podría funcionar perfectamente como representación cronológica de la historia de amor entre dos de los miembros más ilustres de su reparto: Courteney Cox y David Arquette. Y es que, allá va, se conocieron durante el rodaje de 'Scream. Vigila quién llama', empezaron a salir mientras trabajaban en 'Scream 2' y se casaron un mes antes de que comenzara la preparación de 'Scream 3'. De hecho, la pareja hizo una pausa en su luna de miel para rodar esta tercera entrega, razón por la que aparecen tan morenos en la película.
Guion Fisher
Una de las apariciones más sorprendentes y celebradas de 'Scream 3' es la de la grandiosa Carrie Fisher, quien, además de llenar la pantalla con su sola presencia, también ayudó a reescribir algunas de las líneas de guion de su personaje. Genio y figura.
Sin reina del grito
Wes Craven estaba deseando contar con Jamie Lee Curtis en 'Scream 3', lo que le llevó a ofrecerle a la legendaria actriz el papel de Bianca Burnette. Sin embargo, la protagonista de 'La noche de Halloween' rechazó la propuesta.
Éxito incontestable
A pesar de las malas críticas que recibió desde el primer momento, 'Scream 3' consiguió recaudar casi 35 millones de dólares durante su primer fin de semana en la cartelera, convirtiéndose así en el estreno más exitoso de la historia de Miramax.
Guardando los secretos
Los principales responsables de Miramax estaban tan preocupados de que no se desvelara antes de tiempo ninguno de los secretos de la trama de 'Scream 3' que no le permitieron a ningún periodista ver la película completamente terminada hasta dos días antes de su estreno. Todo por los giros.
Sangre menor
Uno de los elementos principales que diferencian 'Scream 3' de sus dos predecesoras es, atención, la cantidad de sangre artificial usada durante el rodaje. Y es que, en comparación con 'Scream: Vigila quién llama' y 'Scream 2', esta tercera entrega usó 'solamente' diez galones de líquido rojo, nada comparado con los cincuenta de la primera parte o los treinta de la segunda.
Contrato inmediato
Al pobre Patrick Dempsey le confirmaron que formaba parte del reparto de 'Scream 3', nada más y nada menos, que un día antes de empezar el rodaje de la película. De hecho, el actor tuvo solamente una noche para aprenderse tres escenas llenas de diálogos en las que aparecía su personaje.
