Cuando tu anterior película es 'El árbol de la vida', bueno, no debe ser fácil. Nada fácil. Dudo mucho que Terrence Malick, por más extravagante y huraño que pueda ser, por más que se aleje de las multitudes, entregas de premios y fiestas organizadas para codearse con estrellas de Hollywood, fuera ajeno al aluvión de comentarios, alabanzas, críticas, insultos, polémicas y aplausos que consiguió aquella obra maestra. Con todo lo que eso supone, el cineasta repitió concepto formal en su siguiente proyecto, 'To the Wonder', aunque en términos conceptuales decidiera centrarse exclusivamente en tres temas: amor, desamor y religión. Con mayúsculas.
Así, 'To the Wonder', vendida en su momento como poco menos que el horror cinematográfico más absoluto, esconde auténticos hallazgos de puro genio: una rosa roja en la nieve, superviviente, alicaída pero fuerte, una danza repleta de metáforas y belleza a lo largo de un supermercado, un mar sobre el que los amantes pueden caminar, desprovistos de miedo alguno, una mínima luz en la oscura soledad de un bosque, el desierto en el que se puede convertir un metro plagado de gente, lo bello y lo triste que puede ser una ciudad como París cuando la mirada está influida por unos u otros sentimientos.
Ben Affleck, Olga Kurylenko y Rachel McAdams, el personaje menos logrado del triángulo amoroso, pululan como fantasmas por un mundo repleto de luces y sombras, de grandes espacios y cárceles mundanas, de caricias y gritos. Javier Bardem, interpretando a un párroco con problemas de fe, termina cerrando el círculo, dando sentido a su personaje y al global de la película, en un desenlace soberbio, a la altura del mejor Malick, repleto de cenizas y melancolía. Ecos del pasado, dolor real y aeropuertos vacíos. Y su triste belleza.
Curiosidades de 'To the wonder'
Libertad total
A lo largo del rodaje de la cinta, no se usó ningún tipo de guion. Eso sí, Terrence Malick se acercaba al comienzo de cada jornada de trabajo a su reparto para entregar algunas páginas repletas de pensamientos y frases independientes, pidiéndoles que interpretaran todas las emociones sin decir ninguna palabra, solamente con la ayuda de su cuerpo.
Fuera del montaje
Fichar intérpretes de altísimo nivel, rodar con ellos y, finalmente, eliminar su participación en el montaje final es un clásico del cine de Malick. Y, por supuesto, 'To the Wonder' no fue una excepción. Rachel Weisz, Jessica Chastain, Michael Sheen, Amanda Peet, Barry Pepper y Michael Shannon, casi nada, tenían papeles secundarios en la película, pero acabaron fuera de la misma.
La promesa de Olga
Teniendo en cuenta la anterior curiosidad, claro, Olga Kurylenko no dudó en hacerle prometer a Malick que no la eliminaría del montaje final de 'To the Wonder'. El director aceptó y cumplió con su palabra.
Era moderna
'To the Wonder' fue la primera película de la trayectoria profesional de Terrence Malick en estar ambientada en la época moderna de manera íntegra.
Mentira peligrosa
Rachel McAdams tenía tantas ganas de trabajar con Terrence Malick y le gustaba tanto el proyecto de 'To the Wonder' que, para conseguir el papel, no confesó que tenía alergia al pelo de caballo. Por suerte, la actriz sobrevivió a un rodaje en el que le tocó compartir alguna que otra escena con estos animales.
Paréntesis breve
Teniendo en cuenta que 'To the Wonder' se estrenó solamente un año después que 'El árbol de la vida', hablamos del intervalo más corto entre película y película de la carrera de Terrence Malick. La única referencia más o menos cercana a este espacio de tiempo sucedió en la década de los setenta entre esas dos obras maestras llamadas 'Malas tierras' (1973) y 'Días del cielo' (1978).
Libros para todos
Durante el trabajo de posproducción de 'To the Wonder', Malick repartió diversos libros entre su equipo de montaje para que les sirviera de inspiración, incluyendo obras de Gustave Flaubert y Walter Percy, entre otros autores.
Última crítica
En el mundo de la crítica cinematográfica, 'To the Wonder' tiene un papel muy emotivo, ya que la reseña que escribió el gran Roger Ebert sobre ella fue la última que elaboró antes de fallecer. De hecho, la crítica se publicó de manera póstuma.
Capturando la previa
Según confesó el propio Hanan Townshend, compositor de la extraordinaria banda sonora de 'To the Wonder', Malick le decía durante las sesiones de grabación de la música para la película que pulsara el botón de grabar treinta segundos o un minuto antes de que la orquesta empezara a interpretar la partitura para capturar momentos de ensayo y preparación que utilizar posteriormente en la cinta.
Quitando tristeza
En un primer momento, según afirmó la propia actriz, el personaje de Olga Kurylenko era muchísimo más oscuro e inestable a nivel emocional. De hecho, la intérprete llegó a rodar varias escenas relacionadas con la depresión y con peleas brutales con el personaje de Ben Affleck.
