Y no duda en dejarlo muy clarito.
La actriz, querida y recordada por ser la encantadora sirenita de 'Un, dos, tres... Splash' y la mortífera replicante de 'Blade Runner', está cansada de los papeles que la meca del cine tiene que ofrecer a las mujeres que, como ella, ya pasan de los cincuenta.
Así la estrella se une a la larga lista de actrices, como la abanderada de la causa Meryl Streep, que no dudan en afirmar sin tapujos que los papeles comienzan a escasear en el momento en que ya no pueden interpretar a la chica sexy de la película.
Hannah asegura que, hasta cierto punto, se siente satisfecha con su carrera y que no está "desesperada por trabajar todo el rato" porque tiene otros intereses, pero que es insultante que le sigan ofreciendo más de lo mismo, o, citando textualmente a la actriz: "un montón de mierda".
La madre de alguien o la serie B
Desde que Daryl diese vida a Elle Driver, la magnífica asesina de un solo ojo que le hacía la vida imposible a Uma Thurman en 'Kill Bill: Vol. 1', sus oportunidades interpretativas se han reducido considerablemente.
Así, no queriendo convertirse en la eterna madre de la protagonista, la actriz ha recurrido a pequeños papeles en películas de terror y acción de serie B, hasta su reciente aparición en la serie 'Sense8'.
Cruzamos los dedos para que la ficción de Netflix creada por los hermanos Andy y Lana Wachowski cuente con ella para su segunda temporada.