Me gustan los spoilers, y aunque algunos os podáis sorprender por esta afirmación, lo cierto es que hay una infinidad de personas que al igual que yo, adoran conocer cada detalle de su serie, película o libro favorito sin que esto les arruine la experiencia. Sin embargo, esto resulta un poco difícil de explicar para aquellos que huyen despavoridos de cualquier tipo de filtración, por muy pequeña e insignificante que sea.
Lo cierto es que desde pequeña me he mostrado indiferente ante los spoilers de series y películas. No vi 'Star Wars' hasta que fui adolescente, pero siempre supe que Darth Vader era el padre de Luke Skywalker, y eso es un spoiler gordo, ¿no? Y lo mismo puedo decir de 'Friends', la icónica sitcom norteamericana que a tantas personas gusta y de la que yo poco había visto en su día. Sin embargo, siempre supe que Rachel y Ross acababan juntos. ¿Y eso me ha impedido ver esas películas o series? No. Las he visto y las he disfrutado en mayor o menor medida, independientemente de que conociera algo que iba a suceder.
Otro ejemplo sería 'Crepúsculo'. Antes de que la película protagonizada por Robert Pattinson y Kristen Stewart se estrenara en los cines allá por 2008 (¡cómo pasa el tiempo!), lo cierto es que en el colegio todo el mundo estaba hablando de los libros de Stephanie Meyer, y aunque me picó la curiosidad, no los llegué a leer hasta que se estrenó la primera cinta, ya que una compañera me había spoileado todo. Sí, todo. Sin embargo, y pese a que fui al cine conociendo los eventos que iban a ocurrir, me encantó y la disfruté tanto como si hubiese ido a ciegas. De hecho, nada más salir del cine empecé a leerme los libros y me convertí en una fan más del "fenómeno Crepúsculo".
Y aquí lanzo una pregunta para los lectores: Si habéis leído los libros de 'Harry Potter', 'Los Juegos del Hambre' o cualquier otra novela que después se haya llevado a la gran pantalla, ¿os ha arruinado la experiencia el haber conocido de antemano la historia (independientemente de que al ser una adaptación no va a ser cien por cien fiel al libro)? Muchos os habréis leído estas novelas antes de haber visto las películas y, generalmente, el conocer la historia e incluso su desenlace, no ha hecho que mermaran vuestros deseos de ver lo que tantas veces habéis imaginado o soñado (aunque, lo sé, hay veces que las adaptaciones cinematográficas decepcionan a los fans).
Algunos podréis decir que no es lo mismo porque al final lo que te imaginas puede que no se corresponda con lo que acabas viendo en pantalla. Sin embargo, con los spoilers puede suceder algo similar si te enteras del spoiler a través de alguien. Esa persona ha podido exagerar algo o explicarlo de una forma que hace que te imagines algo que al final no se corresponde con la realidad.
Volviendo al tema de por qué me gustan los spoilers, habría que señalar el hecho de intentar ser práctico. Con los años uno tiene muchas responsabilidades y quehaceres y resulta necesario dosificar el tiempo y, para ello he de evaluar en qué invertirlo, por lo que no quiero 'perderlo' viendo o leyendo algo que no me vaya a gustar. Y por eso también me spoileo en ocasiones, porque saber algunas cosas me permite elegir si quiero ver o leer ese algo o si he ahorrado dos horas de mi tiempo. De igual forma, tengo la opción de elegir si quiero ver ese algo inmediatamente porque lo que va a suceder es increíble y no puedo esperar o si, por el contrario, puedo dejarlo pasar unos días y esperar a cuando tenga más tiempo. De todas formas, los tráilers de las películas o avances de próximos capítulos de algunas series, ¿se considerarían spoilers? En ocasiones pueden revelar demasiado, ¿no?
Son muchos los que critican a las personas a las que le gustan los spoilers, acusándolas de querer sentirse por encima de los demás al tener más información que el resto y que después puedan usar esos spoilers como vendetta, estropeando la experiencia al otro. Pero en lo que a mí respecta eso no es así. Simplemente no me importa saber lo que va a ocurrir en una película o en una serie, y eso no significa que vaya a hacer spoilers al resto.
Uno de los ejemplos más recientes es el de 'Vengadores: Infinity War'. Ésta es una película que muchos estábamos esperando y había mucho secretismo en torno a la cinta dirigida por los hermanos Russo. Las semanas antes del estreno fueron una auténtica locura en la oficina, porque todos teníamos mucho hype y cada vez salían nuevas declaraciones de los directores o de los actores, y cómo no, teorías de fans. Sin embargo, el secretismo se mantuvo y mi impaciencia aumentó.
Pues bien, mis jefes fueron de los primeros en ver la película y cuando llegaron a la oficina con caras de pócker se negaron a hablar del tema para no soltar ningún spoiler. ¿Qué ocurre? Claramente sabíamos que no iban a revelarnos nada, por lo que antes de acudir al trabajo encontré un hilo en el que alguien había destripado toda la película, y después de confirmar que mis jefes no iban a decir nada, más allá de si les había gustado o no, decidí que había llegado el momento de leer el hilo.
Me salté ciertas cosas porque iba directa a lo que "necesitaba" saber, y he de decir que el momento 'desvanecidos' no lo leí. Sin embargo, quisiese o no, me enteré del final porque en el timeline de Twitter me habían salido varios spoilers en potencia (sin haberlos buscado) que acabaron siendo ciertos. De todas formas, esos spoilers bien podrían haber sido mentira teniendo en cuenta que en ningún momento supe si el hilo o los tweets eran ciertos hasta que vi la película. Y por si quedan dudas: disfruté muchísimo la película. Lloré, me asusté y me reí como si hubiese ido sin saber nada. ¿Por qué? Porque me pareció un peliculón que cumple su función como blockbuster que es: entretener al espectador de la mejor forma posible.
Sin embargo, no siempre quiero saber qué va a pasar. Hay veces que me gusta mantener la intriga y teorizar, como me ha ocurrido con las películas de miedo o las series del estilo de 'Sherlock' o 'Broadchurch'. Las ficciones policiales introducen al espectador en el juego, hacen que uno se fije en todos los detalles y se mantenga entretenido durante todo el capítulo intentando adivinar antes que el protagonista quién es el culpable. Aun así, lo cierto es que cuantas más cosas conozco sobre una película o una serie, más ganas tengo de verla con mis propios ojos. Me dan igual los spoilers, porque si una ficción es buena y todo está bien planteado, me va a encantar y me voy a sorprender igual.
De hecho, hay ocasiones en las que se me olvida el spoiler. ¿Cómo es eso? Pues bien, cuando alguien te dice algo que sucede en la película/serie, no te dice cuándo sucede, en qué parte va a ocurrir ese momento álgido que te va a dejar en shock. No. Y una vez te metes en la narrativa de la película/serie, te aíslas completamente del mundo y no te das cuenta del spoiler que te han hecho previamente hasta que ya lo estás viendo con tus propios ojos, por lo que te sorprendes igualmente.
Los spoilers te hacen disfrutar más la experiencia
Según un estudio realizado por Nicholas Christenfeld, profesor de psicología en la Universidad de San Diego, los spoilers en realidad no arruinan la película/serie/libro, sino que te hacen disfrutar incluso más; un estudio con el que coincido y cuya explicación quizás ayude a aclarar un poco más el tema de los spoilers.
Como bien recoge este estudio, estamos acostumbrados a ver ficciones todos o casi todos los días y aún así muchos huyen despavoridos de cualquier información que revele algo de series como 'Juego de Tronos'. "La gente invierte numerosas horas de su tiempo consagrando historias completamente inventadas. Me pareció curioso lo que tienen las narrativas ficticias que atraen tanto a la gente", dice así Christensen.
Para el estudio, Christensen preguntó a numerosas personas respecto a su opinión sobre los spoilers, y la mayoría aseguraban que estos les arruinaban la experiencia. Sin embargo, en la investigación se descubrió que el hecho de tener información extra sobre la historia resultaba más satisfactorio. En su experimento inicial, su equipo dio a varios sujetos textos de diverso género y ellos tenían que evaluarlo, mientras que a un segundo grupo de sujetos les dieron textos modificados que incluían spoilers. "En este clásico en el que una mujer asesina a su marido con una pierna de cordero congelada... lo que encontramos, sorprendentemente, fue que si haces spoilers a alguien sobre la historia, la disfrutan más".
"Cuando la gente va a ver 'Romeo y Julieta' no piensan «¡No me digas cómo termina!»". En el prólogo de la obra básicamente se destripa el final: "Una pareja de desventurados enamorados se quitan sus vidas". Al igual que todo el mundo conoce el desenlace de esta historia, hay otras tantas cuyo final sabemos desde el principio y que disfrutamos igualmente, como 'Moulin Rouge'.
Al principio del film se le da al espectador el mayor spoiler de todos (y si no la habéis visto, lo siento): la muerte de Satine. Christian nos cuenta la historia de cómo conoció a Satine en el cabaret más famoso de París, y pese a que sabemos de antemano el final de la película, nos adentramos en la historia y la disfrutamos igualmente. "Quizás conocer el final es útil porque te permite fijarte en otras partes, o entender cómo se desarrolla todo".
Lo cierto es que cuando vemos una película por segunda o tercera vez, en ocasiones la disfrutamos incluso más, porque esta vez conocemos todo lo que va a ocurrir, por lo que nos podemos relajar y observar con mayor detenimiento otros aspectos de la cinta, como la estética, los diálogos, los easter eggs que pueda contener... Da igual las veces que vea una película o una serie, porque la sigo disfrutando como la primera vez. Me sorprendo, me asusto, me emociono... y eso que sé cómo termina y todo lo que va a suceder. Y lo mismo me ocurre con los spoilers.
No importa saber algo de antemano, ya que en ocasiones resulta inevitable enterarte de ciertas cosas, sobre todo con las redes sociales e internet, pero lo importante es que al final acabas entreteniéndote y disfrutando igual, porque esa es la función de las películas y las series: entretener al espectador, alejarnos de la realidad y permitir que nos adentremos en el mundo que se plantea. Saber una de las cien cosas que pueden ocurrir en una cinta, un capítulo o en la temporada de una serie, no supone nada, porque si el producto audiovisual es bueno, te engancha y al final siempre te acabará sorprendiendo. Además, a veces, el saber algo que va a ocurrir hace que te den más ganas de verlo, y más si se trata de algo que te gusta. O al menos, eso es lo que me pasa a mí.