Dennis Quaid no es el primero, ni será el último, que confiesa haber abusado de las drogas, pero siempre que alguien lo comenta corren ríos de tinta. El actor se ha confesado en un artículo de Newsweek donde reconoce que su primer contacto con la cocaína fue cuando empezó en el cine, ya que era lo habitual en las fiestas de Hollywood.
"La cocaína estaba hasta en el presupuesto de las películas, apenas disimulado. Se suministraba en los sets de las películas, básicamente, porque todo el mundo lo hacía. En vez de tomarte un cocktail, te metías una raya", reconoce Quaid. El actor afirma que se vió dominado por la situación tras salir de una familia de clase media y alcanzar la fama.
Dormía una hora
Quaid se dio cuenta pronto que su vida estaba cayendo en picado, pero sólo intentó que la gente no lo descubriera: "Era un desastre. Dormía una hora cada noche. Tenía reputación de chico malo, que parecía algo bueno. Me levantaba, esnifaba una raya y juraba que no volvería a hacerlo ese día."
Por aquel entoces el actor también había hecho sus pinitos en la música con The Eclectics y fue en una de esas juergas desenfrenadas cuando decidió cambiar su vida. "Tuve una de esas experiencias de luces blancas esa noche, donde me di cuenta que estaría muerto en cinco años si no cambiaba. Al día siguiente estaba en rehabilitación."
El intérprete, dos veces nominado a los Globos de Oro, asegura que su experiencia con las drogas le enseñó humidad y a apreciar lo que tiene en la vida.
