'Merlí', la serie catalana de TV3 que logró traspasar las fronteras de nuestro país gracias a Netflix, finalizaba el año pasado y, ahora, vuelve a ser protagonista. Más concretamente, el instituto donde se rodó la serie, que lleva, desde que finalizó la ficción, siendo ocupado por personas de diferentes nacionalidades, la mayoría de ellas georgianas, y que ha sido desalojado por segunda vez este año.
Un mes después del anterior, los Moscos d'Esquadra, la Guardia Urbana y la Policía Nacional han desalojado nuevamente a los ocupantes del instituto Menéndez Pidal, que lleva cerrado desde 2012. En la operación se han identificado 79 personas de origen georgiano, 40 de otras nacionalidades, incluyendo españoles, y se ha saldado con 20 arrestados. Tras la finalización de la ficción, el instituto empezó a ser ocupado por estas personas, muchas de ellas familias; otras relacionadas con pertenecer a una banda criminal dedicada a robar en domicilios.
La tercera vida del colegio
Tanto el periodo en que el centro estaba abierto, como cuando se rodaba la serie, no había problemas con los vecinos de la zona. Ahora, según informa El Periódico, son constantes los gritos y llantos provenientes de los constantes conflictos que ocurren dentro del colegio. Además, vecinos de Europa del Este de los bloques aledaños, entendían muchas de las conversaciones que se daban en el instituto y cuentan como escuchaban a los delincuentes repartirse el botín de los robos dando voces.
Delitos aparte, la serie ya prepara su spin-off 'Merlí: Sapere Aude' con Carlos Cuevas, haciendo nuevamente de Pol, mostrando su vida universitaria en la Facultad de Filosofía de la Universidad de Barcelona. Se espera para finales de 2019 y podremos disfrutar de ella en Movistar + y TV3.
