Lucas Figueroa, de padres españoles y nacido en Buenos Aires, presenta 'Despido procedente', una comedia en la que aúna lo mejor y lo peor de cada una de sus dos casas. Una mezcla de "gallegos" y argentinos conviviendo en la sociedad ejecutiva de la capital argentina en la que nadie se salva: todos son unos pelotudos.
Para dar vida al protagonista Javier, directivo de una empresa de telecomunicaciones que se ve entre la espada y la pared (obtener su bonus vs. despedir a parte de su plantilla), la elección de Figueroa no pudo ser mejor: Imanol Arias brilla en un registro tragicómico que le viene como anillo al dedo. El veterano actor se sumerge en esta picaresca argentina mostrando lo mejor a lo que nos tiene acostumbrados, como siempre muy natural y sosteniendo la película de principio a fin.
No se quedan atrás las otras partes del trío protagonista: Hugo Silva, colocado como antagonista canalla, vividor y desenvuelto como pez en el agua, también hace uso de ese registro cómico que se le da tan bien, y que lleno de jerga argentina y de costumbres como el tango solo se embellece. Y Dario Grandinetti, poniendo la vena porteña, con un personaje complicado, lleno de matices y obligado a actuar de una manera que no le gustaría, que hace que te preguntes toda la película: ¿es el bueno o es el malo?
Antes de introducirse con otros asuntos, huelga decir que el resto del reparto, argentino y lleno de talento, también trabaja de manera exquisita: las mujeres Paula Cancio y Valeria Alonso, el alocado dúo formado por Luis Luque y Tomás Pozzi, y la agradable frescura de Juan Grandinetti, hijo de Darío Grandinetti en la vida real y también en la ficción, quien aporta algunos de los mejores momentos de la trama.
Dilemas humanos
'Despido procedente' intenta ir más allá de la comedia y también quiere hacer pensar al espectador, planteando cuestiones humanas como la de que un solo error puede desencadenar muchas consecuencias, el estar entre la espada y la pared, o el primarse a uno mismo frente a la empatía que se siente hacia el resto. Los personajes protagonistas viven situaciones complicadas y se enfrentan unos a otros, pero todos, en el fondo, son iguales, unos pelotudos que tratan de sobrevivir como pueden, que son resultado de lo que la vida ha hecho de ellos.
El humor es muy importante en esta película, muy negro en algunas ocasiones, y quizá en otras más indicado para españoles a los que el acento y la jerga argentina siempre nos parecerá complicada y divertida. Poco a poco, la película se va descabellando en su final y temas como la violencia, el consumo excesivo de drogas o el humor con tullidos se hacen presentes en pantalla. Hasta un improvisado homenaje a 'Men in Black' que sale de quién sabe dónde. Quizá un poco pasado de rosca, pero todo vale en esta película, que seguro que te hace reír en varios momentos.
'Despido procedente' no es una gran película, pero sí más de lo que parece a priori. Es un ejercicio tragicómico que te acerca a la sociedad ejecutiva de las grandes empresas, pero sobre todo a esas personas humanas que forman parte de ella. Un gran elenco de actores que trabaja muy bien entre ellos y una fusión de costumbres hispano-argentinas que seguro te hará reír. Su estreno, el viernes 30 de junio.
Nota: 6
Lo mejor: El reparto protagonista y secundario
Lo peor: El final se pasa de rosca