¿Qué sería del cine sin la imaginación? Algo, fuera dudas, muchísimo más pobre, aburrido y, en cierto modo, innecesario. Hablamos de una pieza fundamental para entender el sentido mismo del séptimo arte y de un elemento que potencia de manera más que significativa su fuerza, alcance y capacidad de impacto entre el público. Sin ella, sencillamente, no funcionaría.
En este especial, casi como si de una carta de amor hacia esta facultad se tratase, repasamos diez películas en las que la imaginación ha jugado un papel esencial en la historia que se nos está contando, siendo representada en forma de amistades que marcan la vida de nuestros protagonistas. Seres o personas que están sin estar, que acompañan, apoyan, sufren, provocan, ríen, lloran, asustan, vuelven y revuelven.
De la comedia más loca al terror, pasando por el drama, la intriga o la ciencia ficción, aquí tenemos una serie de propuestas en las que los amigos terminaron robando prácticamente la función con unas apariciones tan puntuales como inolvidables. Es lo que tiene el reconocido y celebrado poder de la imaginación.
10 amigos imaginarios en el cine
'El invisible Harvey'
Adaptación de la obra de Mary Chase ganadora del Pulitzer, 'El invisible Harvey' nos presenta un entretenimiento tan ligero y encantador como divertido y entrañable. Protagonizada por un James Stewart inmenso, menuda sorpresa, la cinta de Henry Koster maneja de forma admirable los distintos géneros por los que va transitando su historia, haciendo un magnífico uso del que, en el fondo, es su gran protagonista: un conejo gigante e imaginario que acompaña constantemente al bueno de Elwood.
'Jojo Rabbit'
Con referentes e influencias nada complicadas de identificar, con 'La vida es bella' y 'El gran dictador' a la cabeza, 'Jojo Rabbit' puede que fuera menos arriesgada de lo que su hilarante punto de partida podía parecer, ¡Hitler (un desatado Taika Waititi) como amigo imaginario del protagonista!, pero eso no resta mérito a una película que cuenta con la misma capacidad para sacar sonrisas que lágrimas, gracias especialmente al personaje e interpretación de una maravillosa Scarlett Johansson.
'Donnie Darko'
Hay acontecimientos reales en la historia del cine que parecen escritos por el mejor de los guionistas. El efecto sorpresa, el giro inesperado y el asombro colectivo manejando los hilos invisibles de un futuro tan incierto que es capaz de convertir lo que es un claro fracaso comercial en toda una obra de culto que no deja de sumar admiradores con el paso de los años. Un movimiento de contradicción y descubrimiento que encuentra en 'Donnie Darko' a uno de sus referentes más directos. Y a uno de sus ejemplos más memorables.
Y es que, desde el primer momento en el que se estrenó la cinta escrita y dirigida por el debutante Richard Kelly con unos números de recaudación cercanos a la catástrofe insalvable, no ha hecho más que crecer el fervor y la pasión hacia una de esas películas que parecen destinadas a perdurar en la memoria colectiva a pesar de las barreras iniciales. Hablamos de una propuesta extraña, apasionante, compleja, hipnótica, fascinante, profundamente especial. Y también imprescindible. ¿Su personaje imaginario? Icono absoluto.
'Del revés (Inside Out)'
Dentro de la inmensa cantidad de hallazgos que podemos disfrutar en 'Del revés (Inside Out)', todavía hoy la mejor película de Pixar, se encuentra Bing Bong, personaje secundario encargado de representar a ese amigo imaginario que tantas personas tuvieron como fiel escudero durante su infancia. Su presencia llena esta obra maestra de risas y felicidad...hasta que protagoniza una de las escenas más hermosas, tristes y emocionantes que ha dado el cine de animación en su historia. Un momento que algunos seguimos recordando con inevitables y cuantiosas lágrimas.
'El club de la lucha'
"Me has conocido en un momento extraño de mi vida". Edward Norton, en esos años en los que parecía (¿o era?) el mejor actor del mundo, respondía de esta manera al gesto de terror y extrañeza de una Helena Bonham Carter que, junto a un excelso, explosivo e imaginado Brad Pitt, nos habían acompañado a lo largo de 140 minutos de cine valiente, delirante, arriesgado y magistral.
David Fincher confirmaba su estatus de director esencial con 'El club de la lucha', hipnótico viaje al fondo de una mente enferma que encuentra su paralelismo perfecto con la sociedad que le rodea. Todo era imprevisible, delirante y brutal en esta obra maestra que no ha perdido ni un ápice de su poder e impacto.
'Sueños de un seductor'
Woody Allen recibiendo consejos del mismísimo (e imaginario) Humphrey Bogart para mejorar en sus capacidades de conquista romántica. Si este punto de partida no es suficiente para que le des una oportunidad o vuelvas a ver por enésima vez 'Sueños de un seductor', yo más no puedo hacer. Bueno, sí, subrayar que estamos ante una comedia hilarante de inicio a fin en el que el número de carcajadas es realmente abrumador.
'Una mente maravillosa'
Era cuestión de tiempo que un cineasta como Ron Howard terminara con los Oscar correspondientes a Mejor director y película en sus manos. Algunas más, otras menos, pero todas sus propuestas, o la inmensa mayoría de ellas, son de un academicismo evidente, pulcras, alejadas de riesgos que pudieran poner en serio peligro a la taquilla y al gusto del espectador que va al cine en ocasiones contadas. Así, gracias a 'Una mente maravillosa', el biopic John Forbes Nash, Howard planteaba un sólido drama con puntuales toques de thriller psicológico que desprendía un aroma a estatuilla que, en sus mejores momentos, muchos de ellos liderados por el amigo imaginario del protagonista al que interpretaba un estupendo Paul Bettany, lograba un impacto emocional muy potente.
'El resplandor'
Bienvenidos y bienvenidas a una de las películas de terror más hipnóticas de la historia. Bienvenidos y bienvenidas a 'El resplandor'. Bienvenidos y bienvenidas a una obra maestra capaz de suplir sus carencias, que las hay, con algunas imágenes con capacidad indiscutible para quedarse instaladas para siempre en nuestra memoria. Por último, bienvenidos y bienvenidas al universo donde espera al otro lado de la barra uno los amigos imaginarios más perturbadores, inquietantes y memorables que nos ha dado el cine.
'Imaginary'
La crítica no tuvo piedad con ella, pero, al menos en su esencia de película con amigo imaginario como pieza fundamental, 'Imaginary' funciona de manera más que correcta. Se le termina yendo todo un poco de las manos, sobre todo en un desenlace bastante decepcionante y absurdo, pero es cine de terror que entretiene e intriga a partes iguales. No es poco.
'Ricky Stanicky'
Seis años después de la, sigue doliendo escribirlo, oscariza 'Green Book', y tras la irregular 'Yo me encargo de la cerveza', Peter Farrelly volvió a lo que mejor sabe hacer con 'Ricky Stanicky', comedia salvaje y divertidísima en la que juega un papel esencial el amigo imaginario al que sus protagonistas cargan con todos sus errores y al que utilizan para vivir sus experiencias más salvajes. Llena de gags notables, hablamos de una cinta que se eleva de manera considerable cada vez que toma el control un John Cena sencillamente pletórico.
