Tal día como hoy de 1974 se estrenaba 'Chinatown' en España, para algunos la última película que se ajustaba a los cánones del cine negro. Para otros, entre los que reconozco me incluyo, la primera en abordarlos de manera posmoderna. Con un guion perfecto, de un clasicismo reconocible en su estructura y diálogos, pero en cambio dirigido de forma plenamente contemporánea, rodando a plena luz del día, cámara en mano, aprovechando la intensidad del color y el ancho de pantalla que ofrecía el formato Panavisión, Roman Polanski entregó una obra maestra irrepetible.
Para conmemorar 'Chinatown' había dos alternativas, volver la vista atrás a los grandes clásicos que la influyeron e hicieron del cine negro algo icónico, o ir un poco más allá y comprobar cómo ha evolucionado el género a través de los años. Porque en realidad hablamos de un género coyuntural, propio de una época muy determinada, que muchos dirían solo puede entenderse en blanco y negro, marcado por la influencia del expresionismo alemán y la emigración de los grandes cineastas europeos a Hollywood durante el nazismo.
Pero pese a ser considerado un género particular por su permeabilidad, donde el cine de gángsters, el policíaco y el thriller se dan la mano, sus códigos visuales son reconocibles y todos podríamos describir sus principales elementos narrativos: Un antihéroe solitario, una femme fatale y un, en apariencia, intrascendente caso por resolver que conduce a una trama de corrupción en las altas esferas...
Dando la vuelta a los códigos del género
Los años cuarenta y cincuenta fueron su apogeo, pero a continuación destacamos una serie de títulos, mitad homenaje/mitad ejercicio de género, que desde entonces hasta la actualidad han sabido partir de las premisas del cine negro clásico para actualizarlo o conducirlo a nuevos territorios, siempre interconectados entre sí y dispuestos a revelar la esencia de su propia época. De Godard a Melville, de Robert Altman a Paul Thomas Anderson, de las adaptaciones de Dashiell Hammett y Raymond a Chandler a James Ellroy, de Nueva York a Madrid.
Diez clásicos modernos del cine negro
'Al final de la escapada' (1960)
Título original: À bout de souffle
Dirección: Jean-Luc Godard
Reparto: Jean-Paul Belmondo, Jean Seberg, Daniel Boulanger, Jean-Pierre Melville
Adapta una novela de: Fue una idea de François Truffaut tras leer un artículo de un periódico.
¿Por qué es un clásico moderno del género?: Por su irreverencia trasladando los patrones del cine negro norteamericano de serie B a las calles de París, sin guion, rompiendo la cuarta pared, jugando con el raccord, creando un nuevo lenguaje. 'Al final de la escapada' por supuesto es mucho más que una película de género, la trama es una excusa, es ante todo una película como un gesto de rebeldía y de cinefilia (con guiños a Preminger y Melville, que se guarda un personaje) que cambió para siempre el cine, abanderando el nacimiento de la Nouvelle Vague.
Un diálogo inolvidable: "- ¿Cuál es su mayor ambición en la vida?
- Llegar a ser inmortal y después morir."
'El silencio de un hombre' (1967)
Título original: Le Samouraï
Dirección: Jean-Pierre Melville
Reparto: Alain Delon, Nathalie Delon, Caty Rosier, François Périer, Michel Boisrond
Adapta una novela de: Joan McLeod
¿Por qué es un clásico moderno del género?: Melville era el maestro del cine polar francés, admirado por la Nouvelle Vague, pero con esta película alcanzó la sublimación de sus códigos. Sin apenas diálogos, depurando la puesta en escena y la narrativa al máximo, se adentra de manera fascinante en el punto de vista de un silencioso asesino a sueldo, un samurai moderno que se rige por el honor y el deber hasta el fin de sus consecuencias.
Un diálogo inolvidable: "- ¿Quién eres?
- No importa
- ¿Qué quieres?
- Matarte"
'Un largo adiós' (1973)
Título original: The Long Goodbye
Dirección: Robert Altman
Reparto: Elliott Gould, Sterling Hayden, Nina Van Pallandt, Mark Rydell, Henry Gibson
Adapta una novela de: Raymond Chandler
¿Por qué es un clásico moderno del género?: Apoyado en la extraordinaria dirección de fotografía de Vilmos Zsigmond (Encuentros en la tercera fase) y en una exquisita banda sonora de John Williams (de corte jazzístico, porque el maestro puede con todo), Robert Altman dio rienda suelta a su talento entregando uno de los ejercicios de puesta en escena más libres que se recuerdan de los setenta, signo de su tiempo.
La cámara se mueve constantemente por decorados reales (incluida la casa del propio Robert Altman por aquel entonces) y fluye por los cálidos escenarios de Los Ángeles en los que se desarrolla la acción, invitándonos a ser voyeurs del argumento. Una trama que nos devuelve al mítico Marlowe perdido en el interior de una de las obras más complejas de su autor. Algo a lo que la sinuosa dirección de Altman ayuda a enriquecer, no sin dejar su huella cambiando el final, la clase de giros sorpresa a los que nos tiene habituados el género.
Un diálogo inolvidable: "- Así eres tú, Marlowe. Nunca aprenderás, siempre has sido un perdedor.
- Sí, he perdido hasta a mi gato."
'Chinatown'
Título original: Chinatown
Dirección: Roman Polanski
Reparto: Jack Nicholson, Faye Dunaway, John Huston, Burt Young
Adapta una novela de: Es un guion original de Robert Towne, aunque la sombra de Raymond Chandler sea alargada.
¿Por qué es un clásico moderno del género?: Un productor indomable (el célebre Robert Evans), un guion sencillamente perfecto (ganador del Oscar®), un protagonista icónico (interpretado por Jack Nicholson) y un talentoso director (Roman Polanski) que firma un homenaje al género al mismo tiempo que entrega una de las últimas muestras del cine negro clásico. Puro ejercicio de posmodernismo cinematográfico.
Como en los mejores relatos detectivescos, acompañamos en primera persona al sardónico Jake Gittes, presente en todas las escenas de la película. Le seguimos desde la espalda, nunca abandonamos su punto de vista, ni siquiera cuando le seccionan la nariz en una cruenta escena protagonizada por el propio Polanski. De las convenciones del género pasamos muy pronto a la complejidad del relato, ambientado en los años 30, en el que, como si de una tela de telaraña se tratara, nos aguarda una enrevesada trama política, una irresistible femme fatale y un crimen sin resolver.
Pero en cambio, aquí está el motivo por el que considerarlo un film noir moderno, está rodada en color, en Panavision, explotando al máximo el ancho de pantalla y a plena luz del día. Y pese a todo sobrevuela una especie de melancolía, presente en la banda sonora de Jerry Goldsmith, una imposibilidad de volver al cine clásico y de volver al pasado latente en cada una de las imágenes la película. La misma que sufre su protagonista por alcanzar en vano la verdad, que no ya por solucionar el caso, una vez que se implica emocionalmente y descubre que, de nuevo, lo mejor será no volver a mirar atrás.
Un diálogo inolvidable: "- Olvídalo, Jake. Es Chinatown."
'El crack' (1981)
Título original: El crack
Dirección: José Luis Garci
Reparto: Alfredo Landa, María Casanova, José Bódalo, Manuel Tejada, Miguel Rellán, Manuel Lorenzo, Raúl Fraire
Adapta una novela de: Es un guion original de Horacio Valcárcel y del propio Garci.
¿Por qué es un clásico moderno del género?: En primer lugar convendría discutir no solo si 'El crack' es una película de cine negro o un policíaco, si no preguntarnos realmente qué es el cine negro. O si es que existen los géneros, como pondría siempre en cuestión el genial crítico de cine Miguel Marías, colaborador fiel de Garci en Qué grande es el cine. Evidentemente, hablamos de una historia sobre un detective privado, pero al mismo tiempo no deja de ser una película de José Luis Garci en los ochenta, empeñada en reflejar los ambientes de la España de la transición y la incertidumbre del españolito medio, en esta ocasión un solitario hombre que busca reconstruir su vida con una enfermera y su hija.
Aunque también es una película repleta de cinefilia, no solo por el amor que Garci siente por el cine negro norteamericano, lo que le lleva a viajar a Nueva York en su desenlace, sino por rendir homenaje a los ya extintos cines madrileños y los bajos fondos del boxeo, dos de sus pasiones, más que mero telón de fondo en el que se sitúa la trama, llegando a ser incluso importantes en su resolución. De todos modos, si algo nos hace creer que 'El crack' es un clásico moderno del género, y una obra insólita dentro del cine español, es la encarnación de Alfredo Landa como el lacónico Germán Areta, que rompía con todos los estereotipos generados a su alrededor para crear a un investigador marcado por su triste pasado, con un corazón más grande que su revolver, pero tan implacable como para acabar con unos delincuentes en un bar sin inmutarse, mientras termina tranquilamente de cenar escuchando a José María García en la radio. Cuando haga eso Humphrey Bogart hablamos.
Un diálogo inolvidable: "Germán, voy a darte un consejo de amigo, de buen amigo. No te compliques la vida. Cuando uno se complica la vida, acaba no siendo feliz. Y cuando uno no es feliz, nunca vuelve a tener suerte."
'Fuego en el cuerpo' (1981)
Título original: Body Heat
Dirección: Lawrence Kasdan
Reparto: William Hurt, Kathleen Turner, Richard Crenna, Ted Danson, Mickey Rourke
Adapta una novela de: Es un guion original de Lawrence Kasdan, aunque la influencia de 'Perdición' es evidente.
¿Por qué es un clásico moderno del género?: Aunque algo olvidada en la actualidad, el de 'Fuego en el cuerpo' es un caso paradigmático por actualizar el género introduciendo con acierto el erotismo más explícito en los patrones del cine negro. Su desbordante sensualidad y la cantidad de desnudos de sus protagonistas causaron una gran polémica en su estreno, pero son solo el reclamo de una historia netamente clásica, hasta el punto de que sus paralelismos con 'Perdición' de Billy Wilder son obvios. La ambientación en una calurosa Florida, cuya fotografía dejaba traspasar cada rayo de luz, y el descubrimiento de Kathleen Turner, cuyo parecido físico y las resonancias de su personaje nos remiten a la musa del género Lauren Bacall, hacen el resto.
Un diálogo inolvidable: "- Soy una mujer casada.
- ¿Y eso qué significa?
- Significa que no busco compañía.
- Entonces deberías haber dicho que eras una mujer felizmente casada."
'Muerte entre las flores' (1990)
Título original: Miller's Crossing
Dirección: Joel Coen y Ethan Coen
Reparto: Gabriel Byrne, Marcia Gay Harden, Albert Finney, Jon Polito, John Turturro, Steve Buscemi
Adapta una novela de: En realidad está inspirada por dos novelas distintas de Dashiell Hammett.
¿Por qué es un clásico moderno del género?: Un sombrero deslizado por el viento posándose delicadamente en el suelo. Esa imagen tan evocadora sería suficiente para considerar 'Muerte entre las flores' una obra icónica del cine negro, pero si además hablamos de una película de los hermanos Coen, que con su tercera película afianzaban cada vez más su estilo, a medio camino del pastiche y el cartoon, para filmar un relato inspirado por las novelas de Dashiel Hammett, situado en plena Ley Seca, no queda ninguna duda.
Pese al corte clásico del argumento y de la ambientación, por supuesto hay cabida para el sentido del humor y las enloquecidas secuencias de acción marca de la casa. Tenemos que recordar especialmente el asalto al domicilio del jefe irlandés interpretado por Albert Finney, a ritmo de Danny Boy, una ópera cruenta y divertida a partes iguales. En cambio, el sentimiento trágico en esta ocasión es superior. Una trascendencia y profundidad filosófica que desde entonces acompañaría para siempre a su cine, encarnada en la metafórica relación del antihéroe protagonista con su sombrero, que como la dignidad, han mantenido siempre sobre sus hombros.
Un diálogo inolvidable: "- No hay nada más estúpido que un hombre persiguiendo su sombrero."
'L.A. Confidential' (1997)
Título original: L.A. Confidential
Dirección: Curtis Hanson
Reparto: Guy Pearce, Russell Crowe, Kevin Spacey, Kim Basinger, Danny DeVito, James Cromwell, David Strathairn
Adapta una novela de: James Ellroy
¿Por qué es un clásico moderno del género?: La película de Curtis Hanson es uno de esos raros accidentes que suceden cada vez menos en Hollywood. Los planetas se alinearon para que un extraordinario reparto, un director cargado de oficio y el mejor escritor de novela negra contemporánea se unieran... y saliera una extraordinaria película. En 'L.A. Confidential' todo está en su lugar, desde la irónica voz en off, que añade un tono irónico al relato clásico, ambientado en los años 50 e inspirado por historias reales, a las referencias al género y al propio Hollywood, no en vano Kim Basinger interpreta a una doble de Verónica Lake que ejerce de prostituta. El mérito es de una elegante adaptación extremadamente fiel a su autor, que actualiza el género sin coartadas, ejercicios de estilo ni golpes de efecto, puro cine negro rodado a final de siglo.
Un diálogo inolvidable: "- Vuélvete a Jersey. Esta es la ciudad de Los Ángeles y tú no tienes alas."
'Puro vicio' (2014)
Título original: Inherent Vice
Dirección: Paul Thomas Anderson
Reparto: Joaquin Phoenix, Josh Brolin, Katherine Waterston, Owen Wilson, Reese Witherspoon, Benicio del Toro, Martin Short, Jena Malone, Eric Roberts, Maya Rudolph
Adapta una novela de: Thomas Pynchon
¿Por qué es un clásico moderno del género?: Que sea la primera película en adaptar una novela del inescrutable Thomas Pynchon, y además que lo haga con éxito y el beneplácito de su autor, demuestra que la clase de empresa en la que se adentró Paul Thomas Anderson no se parece en nada al resto. Ambientada en los psicodélicos años setenta, la película es producto del estado de alucinación en el que se se encuentra su protagonista, Doc Sportello, un detective privado que no abrirá tanto una investigación como se adentra en un estado mental.
Muy influenciado por el cine de Robert Altman, del que fue ayudante de dirección, el director de 'Magnolia' filma los momentos claves que añaden información a la trama con largos planos fijos acompañados de un travelling de acercamiento, con los que demuestra la obsesión de su personaje por encontrar sentido a una realidad que, al igual que al espectador, le supera, porque en los setenta nada parecía tenerlo. Y esta compleja, laberíntica, paranoica y divertidísima película nos lo demuestra.
Un diálogo inolvidable: - "Ojalá pudieras ver estas olas. Es uno de esos lugares donde una voz te dice que es donde debes estar."
'En realidad, nunca estuviste aquí' (2017)
Título original: You Were Never Really Here
Dirección: Lynne Ramsay
Reparto: Joaquin Phoenix, Judith Roberts, Ekaterina Samsonov, Alessandro Nivola
Adapta una novela de: Jonathan Ames
¿Por qué es un clásico moderno del género?: De un homenaje a la novela negra escrito por el creador de la serie Bored to Death, que ya era a su vez una parodia del cine de detectives, la directora escocesa Lynne Ramsay ha creado un monstruo. 'En realidad, nunca estuviste aquí' supone todo un ejercicio de estilo en el que el género permanece siempre soterrado, guiando la lógica de una arquetípica historia criminal, una trama de corrupción de menores que salpica al poder, para alejarse con la brutalidad de sus imágenes de cualquier cliché.
¿Y cómo lo consigue? Negando constantemente información al espectador, mediante flashbacks y elipsis nos adentra en la psicología de su protagonista, un torturado ex-marine interpretado por Joaquin Phoenix. Aunque la película se termina acercando al terror y Ramsay dota a las imágenes de un componente opresivo que trasciende al cine negro, este permanece inconfundible en su estructura, reformulado por el lenguaje del cine del siglo XXI.
Un diálogo inolvidable: "- Joe, despierta. Es un día precioso."