Aunque 'Al Este del Edén' haya pasado a la historia del séptimo arte por la interpretación protagonista del aclamado James Dean, lo cierto es que estamos ante una película cuyo principal valor reside en la labor de su director, Elia Kazan. La cámara del controvertido cineasta es la que marca el ritmo, la tensión y el pulso de una historia que se abre en canal ante el espectador desde la calma, clavándose en la memoria a través de una oscuridad dramática inoxidable. 'Al Este del Edén' siempre duele, pasen las décadas que pasen y sin importar el número de visionado que corresponda.
Adaptando la novela firmada por el esencial John Steinbeck, la cual se sitúa ampliamente por encima de la película, Kazan se acerca a sus personajes con una mezcla de compasión y cariño tan extraña como fascinante, manteniendo siempre las distancias como si quisiera evitar el dolor propio a la hora de la explosión. Para ello, el director entrega un trabajo técnicamente perfecto que se sitúa al servicio de un reparto en el que, efectivamente, Dean desprende un magnetismo indiscutible. Sus movimientos, su voz y, sobre todo, su mirada, albergan un universo repleto de heridas y cicatrices insalvables. Todo está ahí, al borde del grito.
La guinda interpretativa de una obra cinematográfica que continúa desprendiendo el fulgor de los grandes clásicos, fascinando a varias generaciones de espectadores que, una vez llegan a ella, deciden quedarse para siempre a vivir en su historia. Comprensible. Aquí descubrimos diez curiosidades sobre 'Al Este del Edén', una excusa perfecta para volver a disfrutar de su visionado.
Curiosidades de 'Al este del Edén'
Dudas iniciales
Aunque ahora nos parezca incomprensible, James Dean no fue, ni muchísimo menos, la primera opción para protagonizar 'Al Este del Edén'. Sin embargo, cuando Elia Kazan y John Steinbeck vieron en persona al actor, tuvieron claro que, a pesar de sus reticencias iniciales, no había nadie que encarnara de una manera tan exacta y definitiva la personalidad y apariencia física de Cal Trask.
No hay tiempo para todo
'Al Este del Edén' está considerada, con justicia, como una de las adaptaciones cinematográficas más notables de la historia del cine. Sin embargo, la realidad es que la película solamente adapta la parte final de la inconmensurable obra de John Steinbeck.
Padre e hijo
El actor Raymond Massey, quien interpreta con maestría a Adam Strak, odiaba profundamente a James Dean. Digamos que su conexión en el rodaje no facilitó las cosas y la conexión entre ambos nunca llegó a producirse. Sin embargo, Elia Kazan entendió esta situación como un golpe de suerte, ya que esa tensión entre ambos resultaba muy positiva para la película, puesto que era una relación similar a la que tenían sus respectivos personajes. Evidentemente, no hizo absolutamente nada por mejorar el ambiente.
Estreno exclusivo
De las tres películas en las que el malogrado James Dean participó, 'Al Este del Edén' fue la única que pudo ver estrenarse en el cine, comprobando así un éxito que todavía perdura. Lástima que no tuviera la oportunidad de disfrutar de 'Rebelde sin causa' y 'Gigante', dos cintas incluso superiores a la que nos ocupa.
Movimientos necesarios
Los gestos y movimientos corporales de James Dean a lo largo de 'Al Este del Edén' siguen siendo tan sorprendentes y, en cierto modo, extraños como el primer día. Sin embargo, Elia Kazan no solamente era consciente de ellos, sino que animó al actor a que los llevara a cabo, ya que interpretaba que era una forma perfecta de expresar la tensión y timidez que marca al personaje.
Sin fiesta
James Dean no dudó ni un segundo a la hora de rechazar la invitación para asistir a la fiesta posterior al estreno de 'Al Este del Edén'. En vez de compartir la celebración con sus compañeros de rodaje, el actor se marchó a su pueblo natal, Marion, para descansar. Una etapa en la que el fotógrafo Dennis Stock le realizó una serie de fotos que han pasado a formar parte esencial de la leyenda Dean. Sin embargo, este comportamiento pudo trastocar la carrera del actor, ya que estuvo muy cerca de perder su papel en 'Rebelde sin causa' por no asistir a la citada fiesta.
Despedida emocionante
Tras finalizar el rodaje de 'Al Este del Edén', la actriz Julie Harris se acercó hasta el camerino de James Dean para despedirse de él y darle las gracias por todo. Sin embargo, cuando llegó se encontró al actor llorando desconsoladamente porque la producción había terminado de manera definitiva. La eterna sensibilidad de Dean.
Maquíllate, maquíllate
Una de las cosas que más odiaba James Dean era tener que someterse a sesiones de maquillaje. De hecho, según aseguró su compañero de reparto en 'Al Este del Edén', Richard Davalos, el actor salía corriendo al baño durante los descanso entre toma y toma para desmaquillarse todo lo posible. Tan incorregible como único.
Sin influencia
Aunque la tentación siempre estuvo ahí, John Steinbeck cumplió con su intención de no aparecer ningún día en el rodaje de 'Al Este del Edén'. Su principal razón para no hacerlo era evitar convertirse en un elemento intimidatorio para los responsables de la película, demostrando así una confianza plena en el trabajo de Elia Kazan y su equipo.
Clave Cage
Una de las películas que nunca podrían faltar en la colección de imprescindibles de Nicolas Cage es 'Al Este del Edén', una cinta que marcó tanto al actor que, de hecho, fue la que le animó a probar suerte en el mundo de la interpretación. "Es simple, quería ser James Dean". Palabra de Cage.