Puede que en el caos de un asteroide a punto de estrellarse contra el planeta, en la batalla de robots gigantes o en el histórico ataque japonés a Pearl Harbor, sea más complicado identificar las virtudes de Michael Bay, un cineasta que jamás se ha traicionado así mismo ni al público, que en una historia sobre tres culturistas absolutamente estúpidos que deciden cambiar su vida robando a un poderoso empresario. Pero 'Dolor y dinero' es puro Bay, como todos sus trabajos, solamente que a una escala, de contexto, menor. La adrenalina, los planos imposibles, el ritmo trepidante y las escenas de acción explosivas siguen así, eso sí, cediendo prácticamente todo el protagonismo al humor. Y con unos resultados brillante.
Por eso, 'Dolor y dinero' se consideró la película 'pequeña' de Bay, su trabajo más personal y humilde hasta la fecha. Una definición tan exacta que, sin embargo, se queda demasiado en la superficie, porque estamos ante una inspirada e inesperada reflexión crítica sobre la estupidez, el sueño americano y la condición puramente absurda del ser humano que viene a ser al género algo así como lo que 'La Roca' fue al cine de acción. Es decir, un punto de inflexión total en la carrera del director y una nueva demostración de su siempre incomprendido talento. La diferencia, en este caso, es que la mayoría de críticos se sumaron al tren de los halagos y decidieron que, ahora sí, Bay era un autor. Mejor tarde que nunca.
A continuación, repasamos diez curiosidades de una película a la que Bay siempre regresa para recordar el tipo de historias que le gustaría contar antes de que vuelva a sonar el teléfono y caiga de nuevo en la tentación de reencontrarse con Optimus Prime. Una y otra vez. Mientras tanto, 'Dolor y dinero' seguirá destacando en medio de su filmografía como la única obra que consiguió que los prejuicios e insultos se convirtieran en aplausos y entusiasmo. Fue efímero, pero para sus defensores siguen siendo una de las mejores vacaciones de nuestras vidas.
Curiosidades de 'Dolor y dinero'
Hechos reales imposibles
Nos sigue pareciendo increíble pero, efectivamente, 'Dolor y dinero' está basada en hechos reales. Para ser más exactos, en una serie de artículos publicados en 1999 por el Miami New Times y firmados por el periodista Pete Collins. De esta manera, los lectores tuvieron la oportunidad de alucinar a lo grande con la historia de un grupo de amigos que se habían conocido en un gimnasio, haciéndose llamar, en un alarde de originalidad, 'Sun Gym', y que se vieron involucrados en varios casos de secuestro y extorsión. La principal diferencia con la trama que vemos en la película de Michael Bay es que en el caso real eran dos los acusados, Daniel Lugo y Adrian Doorbal.
De secuestrado en secuestrado
La cantidad de grandes intérpretes que han colaborado con Michael Bay sigue creciendo tras sumar en 'Transformers: El último caballero' al mismísimo Anthony Hopkins. En lo que respecta a 'Dolor y dinero', el protagonista de 'El silencio de los corderos' nunca se llegó a barajar para que participara en el proyecto, pero estamos seguros de que se quedó fuera por pocos. Y es que, para encontrar al actor que se metiera en la piel de Victor Kershaw, los responsables de la película tuvieron que ir de sustitución en sustitución.
La primera opción, Albert Brooks, estaba muy cerca de convertirse en una realidad hasta que el intérprete y el estudio no consiguieron llegar a ningún acuerdo. Posteriormente, John Turturro, que ya había trabajado a las órdenes de Bay en las primeras tres entregas de 'Transformers', parecía que sería el elegido, pero finalmente se quedó en nada por un problema de agendas. En el último segundo apareció Tony Shalhoub para quedarse, entregando una estupenda interpretación.
Esfuerzos económicos
Las cantidades que ha manejado Michael Bay desde que se convirtiera en uno de los directores con más éxito de Hollywood no eran precisamente pequeñas. Todo lo contrario. Al final, se trataba de algo tan sencillo como intentar equilibrar la balanza.
Sin embargo, a la hora de ponerse manos a la obra con 'Dolor y dinero', el cineasta se mimetizó con la naturaleza 'humilde' de la propuesta accediendo a cobrar 'solamente' 20 millones de dólares, su salario más bajo desde su debut en la gran pantalla con 'Dos policías rebeldes'. Una decisión a la que se sumó Dwayne Johnson, quien también se recortó el sueldo para que la película no saliera tan cara.
Sentimientos encontrados
Mark Wahlberg es un tipo familiar, eso es evidente, y por eso le dio especial importancia a la opinión que tuvieron los pequeños de su casa cuando finalizó su transformación física para 'Dolor y dinero'. Su cuerpo, hinchado de puro músculo, consiguió entusiasmar a su hijo, quien veía en su padre a todo un superhéroe, pero su hija, vaya, le dijo que odiaba su nuevo aspecto físico. No se puede tener contento a todo el mundo, Mark, lo sentimos.
Ambiciones sencillas
Michael Bay no se cansó de repetir durante toda la promoción de 'Dolor y dinero' que se trataba de la culminación de un sueño. Y no le faltaba razón. El director, un tipo que no debe tener especial dificultad para poner en marcha cualquier proyecto que se le antoje, decidió que quería rodar esta comedia en el año 2000, es decir, trece años antes de su estreno.
Su deseo se basaba especialmente en la necesidad que tenía de realizar una película más pequeña y barata que le permitiera descansar de las grandes producciones que habían marcado su carrera. La pregunta, entonces, está clara. ¿Por qué no la rodó antes? Porque tenía que rodar tres entregas de 'Transformers'. El espectáculo, la acción y los fuegos artificiales tiran demasiado.
Cameo televisivo
Calma, que la fotografía que ilustra esta curiosidad no despierte todavía vuestro entusiasmo. No, 'Dexter', uno de los personajes esenciales de la ficción televisiva de las últimas décadas, no aparece en 'Dolor y dinero', pero un elemento esencial de su universo sí que lo hace.
Y es que, durante varias escenas de la película, la trama se desarrolla en la misma urbanización en la que nuestro querido psicópata justiciero guardaba sus particulares trofeos. Pensándolo bien, su ayuda no le habría venido nada mal a los protagonistas de la cinta de Michael Bay.
Empacho de hamburguesas
Ya hemos hablado de las consecuencias (familiares) de la transformación física de Mark Wahlberg para 'Dolor y dinero', pero ahora toca centrarnos en los esfuerzos que tuvo que hacer para conseguir esta increíble puesta a punto. Resumiendo: HAMBURGUESAS.
De acuerdo, también tuvo que someterse a un intenso entrenamiento diario, pero la clave de este proceso estuvo en las doce hamburguesas, doce, que el actor se tomó todos y cada uno de los días que duró el rodaje. Un esfuerzo que, al menos en pantalla, mereció la pena.
Transformers humanos
Oye, no todo va a ser Mark Wahlberg. De hecho, si estamos poniendo medallas al esfuerzo, conviene citar a sus compañeros de reparto, Dwayne Johnson y Anthony Mackie, quienes también tuvieron que transformar su cuerpo para participar en 'Dolor y dinero'. El primero de ellos consiguió ganar la masa muscular necesaria para pesar cerca de los 136 kilos que pedía el guión, mientras que Mackie se tuvo que conformar con sumar 7 kilos, pesando finalmente 96. Tres bestias en acción.
El moreno Wahlberg
Por si los músculos no fueran suficientes, Michael Bay no tuvo piedad con Mark Wahlberg y le pidió que consiguiera estar lo más moreno posible antes de que comenzara el rodaje de 'Dolor y dinero', considerándolo un factor esencial para el personaje. El actor, un tipo comprometido con los proyectos que protagoniza, no dudó a la hora de agradar a su director, por lo que tuvo que ser bronceado todas las semanas que duró la filmación para que el color de su piel quedara perfecto en el resultado final.