Aunque parezca tan increíble como imposible, hay (mucha) vida más allá de Dana Scully. Y es que, por más que su trayectoria profesional esté relacionada para siempre por el inolvidable personaje que interpretó en la legendaria 'Expediente X', Gillian Anderson es mucho más que aquella investigadora del FBI que marcó un antes y un después en la historia de la pequeña pantalla. Y para descubrirlo no hace falta más que sumergirse en su carrera.
Pongamos diez ejemplos contundentes: 'Jugando con el corazón', 'La casa de la alegría', 'Sex Education', 'La Caza', 'Grandes esperanzas de Charles Dickens', 'Boogie Woogie', 'El último rey de Escocia', 'Un mundo a su medida', 'La casa torcida' y 'Hannibal'. En todas y cada una de estas propuestas hemos tenido la oportunidad de disfrutar de diversas versiones del talento de una Gillian Anderson capaz de enfrentarse a cualquier tipo de reto interpretativo, sin importar géneros, focos protagonistas o participaciones secundarias.
Con un brillante sentido del humor, un carisma a prueba de bombas y una presencia siempre magnética, la actriz estadounidense deja poco lugar al misterio a la hora de arrasar en cada una de sus apariciones en pantalla. Eterna Scully, sí, pero también eterna Gillian Anderson. Sin más etiquetas.
Curiosidades de Gillian Anderson
Scully
¿Imagináis la carrera de Gillian Anderson sin el papel de Scully? Pues estuvo muy cerca de ocurrir. Y es que, tras observar su prueba de casting, los ejecutivos de Fox no creían que la actriz fuera lo suficientemente famosa y atractiva para ser la protagonista de la serie. Sin embargo, el propio Chris Carter, creador de 'Expediente X', insistió para que la contrataran. Afortunadamente.
Complicaciones de acento
Debido a los once años que estuvo viviendo en Reino Unido, Gillian Anderson contaba con un profundo acento británico al llegar a los Estados Unidos. Una característica que le provocó numerosos problemas de cara a encontrar trabajo, lo que la llevó a adoptar rápidamente un acento americano para solventar este problema. Lo consiguió.
Afición cara
Además de su profesión, la gran pasión de Gillian Anderson es el mundo del arte. De hecho, la propia actriz confesó que en 2002 se gastó su último sueldo de 'Expediente X' en una litografía de David Blackburn. Asimismo, entre sus tesoros más preciados podemos encontrar obras de Diane Arbus, Helen Levitt, Cindy Sherman, Francesco Clemente, Alexis Rockman o Kiki Smith, entre muchos otros.
Favorita sorprendente
Aunque parezca increíble, la obra audiovisual favorita de Gillian Anderson, según afirmó la propia intérprete, es, nada más y nada menos, que 'Wallace y Gromit: Los pantalones equivocados', el brillante ganador del Oscar a Mejor cortometraje animado en 1993.
Tras la barra
Gillian Anderson aterrizó en Nueva York cuando solamente tenía 22 años, edad a la que empezó a trabajar en la emblemática ciudad como camarera. En lo que respecta a su faceta interpretativa, la actriz comenzó su andadura participando en la obra 'Absent Friends' de Alan Ayckbourn, obteniendo grandes crítica por su trabajo y el galardón ewsomer de los premios Theatre World.
Honor británico
A pesar de haber nacido en Chicago (Illinois), Gillian Anderson recibió la ilustre condecoración de Oficial de la Orden del Imperio Británico (OBE) como recompensa a su valiosa contribución al mundo de la interpretación. Más que merecido.
Estudiante conflictiva
Durante su etapa de estudiante, Gillian Anderson recibió los siguientes motes por parte de sus compañeros: 'La payasa de la clase', 'La chica más bizarra' y 'La alumna que más probablemente va a ser arrestada en el futuro'. Una muestra más que evidente del comportamiento travieso y alocado de la actriz quien, por cierto, cumplió con las expectativas y fue arrestada en la noche de su graduación.
Boda con retraso
Gillian Anderson planeó su boda con el periodista Julian Ozanne para septiembre del año 2003 con la idea de celebrarla en mitad de un safari en Kenia. Una idea muy original que, sin embargo, tuvo que ser retrasada en el calendario debido al temor por sufrir un ataque terrorista.
Rechazando a Playboy
En la etapa más exitosa de su carrera, Gillian Anderson recibió la propuesta de protagonizar una portada de la célebre revista Playboy. Una suculenta oferta en la que, por cierto, y según confesó la propia actriz, le ofrecieron muchísimo dinero para tratar de convencerla. Sin embargo, Anderson decidió rechazarla ya que no le interesaba demasiado aparecer desnuda.
Edad falsa
A la hora de tratar de convencer a los productores ejecutivos de 'Expediente X' para que le dieran el papel protagonista de la serie, Gillian Anderson les mintió acerca de su edad, asegurando que tenía 27 años. Y es que, según opinaba la propia actriz, así resultaría más creíble que podía interpretar a una agente del FBI en toda regla.