Lo que hizo el director Abdellatif Kechiche fue genialidad. Ni más ni (muchísimo) menos. Lo que consiguieron Léa Seydoux y, especialmente, Adéle Exarchopoulos, un milagro. Estamos ante algo serio, muy serio, una obra titánica, inconmensurable, repleta de matices y épica en el detalle, en esos primeros planos que esconden todo el amor, las dudas, el deseo, que alguien puede sentir.
El Amor, en mayúsculas, en todas sus versiones, en todo su esplendor, en toda su rabia, en toda su locura, en todo su impulso, en toda su exageración, en todo su dramatismo, en toda su delicadeza. Todo, absolutamente todo, está contado con el arma más fuerte posible: la realidad. Porque sigue costando mucho creer que estas dos actrices estuvieran simplemente interpretando, que todo lo que se nos cuente sea ficción. Porque no lo es. Porque todos lo hemos vivido. Y sufrido.
Eso sí, nunca nos lo habían mostrado de esta manera. Nunca había dando tanto pudor observar un trozo de vida tan directo. Una película inabarcable, tan grande como la vida misma. Tan dolorosa y hermosa como el amor. 'La vida de Adèle', una absoluta obra maestra. La conocemos un poco mejor, a continuación, con estas diez curiosidades.
Curiosidades de 'La vida de Adèle'
Tiempo extra
Pese a que la idea inicial era que el rodaje de 'La vida de Adèle' tuviera una duración de menos de dos meses, finalmente fueron necesarios cinco meses y medio para finalizar la película. Un tiempo aprovechado al máximo, desde luego.
Encuentro incesante
A pesar de su corta duración, el primer encuentro entre las dos protagonistas de 'La vida de Adèle' era una escena absolutamente clave para Abdellatif Kechiche. Tanto que, para conseguir el resultado que buscaba, el cineasta hizo que las actrices repitieran ese instante hasta emplear todo un día de rodaje, finalizando la hornada con decenas de tomas.
Hater autorizada
"La película es pornografía para hombres". Así fue la definición de 'La vida de Adèle' que realizó, nada más y nada menos, que Julie Maroh, autora del libro en el que se basa la película. Contundencia absoluta. Y sin piedad.
Lectura exclusiva
Abdellatif Kechiche les pidió a las protagonistas que leyeran el guion las veces justas, insistiendo en que improvisaran todo lo posible. Un método de trabajo que, en el resultado final, aportaba una fluidez y naturalidad todavía más fascinante.
Rodaje conflictivo
Tanto Léa Seydoux como Adèle Exarchopoulos fueron muy críticas con el director de la película meses después de que se estrenara. Y es que, según confesaron ambas, Abdellatif Kechiche tuvo un comportamiento excesivamente autoritario durante el rodaje de la cinta, mostrándose incluso violento en algunas ocasiones.
La ¿inevitable? censura
'La vida de Adèle' fue vetada en varias ciudades de los Estados Unidos por su contenido adulto, especialmente en lo relacionado a las escenas de sexo. Algo similar a lo ocurrido en numerosos países latinoamericanos en los que la película se llegó a estrenar, pero con una versión alterada en la que desaparecieron algunas escenas.
De diez en diez
Si la escena del encuentro entre las dos protagonistas requirió toda una jornada para que el director de 'La vida de Adèle', Abdellatif Kechiche, terminara satisfecho, no fue mucho más sencillo, más bien todo lo contrario, el rodaje de la comentadísima escena de sexo de diez minutos que marca el punto de inflexión de la película. Principalmente por dos cosas:
- Era la primera escena que compartían Léa Seydoux y Adèle Exarchopoulos.
- Se necesitaron diez días de rodaje.
Sin maquillaje
A lo largo del rodaje de la película, ninguna de las actrices protagonistas contó con servicios de maquillaje ni peluquería, ya que estaba prohibido por el director de la cinta. En ambos casos, fueron las propias intérpretes quienes se preparaban en casa antes de acudir al set.
Azul por todas partes
Léa Seydoux no tuvo problema alguno en teñirse el pelo de azul para el rodaje de 'La vida de Adèle', pero, sin embargo, no lo pasó demasiado bien teniendo que llevar constantemente ropa del mismo color. De hecho, la propia actriz confesó que el contraste entre el omnipresente azul y su color de piel hacía que pareciera estar enferma.
Argumento alimentario
¿Cuáles fueron los motivos que llevaron a los responsables de 'La vida de Adèle' a seleccionar a Adèle Exarchopoulos como protagonista? Pues, según confeso la propia actriz, la razón principal fue la manera en la que comía. Afortunadamente, su talento interpretativo también estaba más que a la altura de las circunstancias.