Tratar de definir a Macaulay Culkin se antoja una misión tan imposible como atrevida. Ex niño prodigio convertido en estrella amada por crítica, industria y público gracias a las dos estupendas primeras entregas de 'Solo en casa', Culkin fue transformando su carrera en una constante fuente de imprevistos, giros inesperados, errores profesionales, abrazos con lo ridículo y enamoramiento hacia el absurdo. Nunca daba los pasos que uno esperaba de él y, al mismo tiempo, se le veía plenamente convencido de que el asalto al harakiri profesional tenia todo el sentido del mundo.
Por eso, y perdida toda la esperanza de ver un regreso por la puerta grande de esos que Hollywood celebra con borrachera juvenil y ovaciones cerradas, lo que nos queda es el aplauso de encontrarnos, actualmente, ante un Culkin que, al menos en apariencia, parece haber recobrado algo de cordura y, sobre todo, sentido del humor. La lengua viperina y la actitud impredecible siguen ahí, incluso podríamos decir que más fuertes que nunca, pero el rostro se ha calmado, la confianza se ha elevado y la naturalidad para hablar de la ambición y el fracaso parecen haber llegado para quedarse.
A lo largo de este especial, nos acercamos ante la figura de Macaulay Culkin dispuestos a encontrarnos ante cualquier cosa, conscientes de que la sorpresa se esconde detrás de cada esquina de un universo creativo y mediático siempre al filo de casi todo.
Curiosidades de Macaulay Culkin
Sin piedad
Entre 1990 y 1994, Macaulay Culkin rodó nueve películas sin apenas descanso entre una y otra. Una absoluta barbaridad que le dejó exhausto y que le llevó a pedirle a su padre, quien era su manager por aquel entonces, que le dejara descansar un poco. Un ruego que no fue escuchado, ya que la familia de Culkin tenía claro que debían aprovechar al máximo el inesperado tirón de su pequeña estrella.
Clave Hughes
Si hay que señalar a alguien como auténtico descubridor de Macaulay Culkin ese debería ser John Hughes. Y es que, más allá de sumarle al reparto de 'Solos con nuestros tío', el cineasta le sirvió en bandeja de plata a Chris Columbus un guion, titulado 'Solo en casa', aconsejándole que contara con el pequeño Culkin como protagonista. Una recomendación que, de primeras, no tuvo demasiado efecto ya que el director decidió ver a otros 200 candidatos para el papel antes de aceptar que, efectivamente, ninguno rozaba los talones de Culkin.
El año del desastre
Y justo cuando su carrera había explotado en forma de fama, cariño del público y mucho, mucho dinero, Macaulay Culkin se desplomó en 1994, un año en el que estrenó tres de sus peores películas: 'El guardián de las palabras', 'Mano a mano con papá' y 'Niño rico'. Un tridente que le llevó, entre otros varapalos, a ser nominado a tres premios Razzie como peor actor. El principio del fin.
El pizzero
Tardamos en descubrir la faceta musical de Macaulay Culkin, pero, a la vista de lo que nos esperaba con ella, casi mejor que se hubiera quedado en el baúl de los secretos. Y es que, sus labores como percusionista y cantante en The Pizza Underground, banda con la que se dedicaba a versionar clásicos de la Velvet Underground cambiando las letras por la palabra 'pizza' o frases relacionadas con este alimento, le llevaron a recibir numerosos insultos y algún que otro vaso lleno de cerveza en el escenario. Ni los momentos del concierto en el que se bajaba a repartir pizza entre el público le servían para apaciguar la rabia de los asistentes.
Salvación Green
El milagro de volver a ver a Macaulay Culkin delante de una cámara fue obra de Seth Green, uno de sus mejores amigos en el mundo de la interpretación, quien le convenció para que participara en la inclasificable 'Party Monster'. Además, ambos han seguido trabajando juntos doblándose a sí mismos en 'Robot Chicken'.
Corazón roto
Tras divorciarse de la actriz Rachel Miner dos años después de casarse con ella, Macaulay Culkin comenzó una relación con Mila Kunis que duró ocho años. Un romance que finalizó de manera amistosa.
Sin embargo, después de que aparecieran las primeras fotos que confirmaban la nueva relación sentimental entre Kunis y Ashton Kutcher, Culkin entró en un estado de depresión profunda. Los paparazzi, siempre insaciables, se encargaron de mostrar al mundo la versión más triste del actor.
Detenido
Era cuestión de tiempo. En 2004, Macaulay Culkin fue arrestado en Oklahoma por posesión de sustancias ilegales sin receta. Para ser exactos, el actor fue pillado con diecisiete gramos de marihuana, ocho píldoras de Xanax y dieciséis de Clonazepam, más que suficiente para que este intérprete pasase un buen rato en el calabozo y tuviera que gastarse cerca de 4.000 dólares de fianza para poder salir. Durante el juicio correspondiente, Culkin se declaró culpable, por lo que fue condenado a tres años, uno por cada sustancia, evitando así entrar en prisión.
La ciudad del amor
Si queréis encontrar alguna vez a Macaulay Culkin, no dudéis en viajar hasta París. Y es que, como ha confesado en numerosas ocasiones, el actor adora visitar la ciudad francesa puesto que, asegura, a nadie de allí le importa mucho su fama, permitiendo que lleve la vida más tranquila posible.
La clave Wi-Fi
Y fue en París, precisamente, donde Maculay Culkin vivió uno de los momentos más divertidos y entrañables de su vida fuera del cine. Durante un paseo por la ciudad francesa, el actor entró en una cafetería, pidió la clave Wi-Fi y la respuesta fue: 'MacaulayCulkin'. Una maravillosa coincidencia que le llevó a hablar con la camarera, quien le confesó que la razón de esa contraseña era porque sabía que algún día el actor aparecería por allí. Acertó.
Rey de la madrugada
Macaulay Culkin tiene una costumbre muy sana, la de pasear por Nueva York...aunque sea en plena madrugada. Y es que, como confesó el propio actor, sus rutas por la ciudad suelen ser entre las dos y las cuatro de la mañana, cuando no hay nadie en la cale y tiene más fácil el pasar desapercibido. Mejor el anonimato que, por lo visto, dormir.