'Vértigo (De entre los muertos)', 'Con la muerte en los talones', 'Psicosis' y 'Los pájaros'. Estas cuatro obras maestras inconmensurables, esenciales en numerosas listas de las mejores películas de la historia del cine, fueron los cuatro trabajos estrenados por Alfred Hitchock antes de 'Marnie, la ladrona'. Casi nada. Digamos que el listón estaba a la misma altura del infinito más inalcanzable, un reto apabullante para un cineasta que, sin embargo, volvió a demostrar su estatura de gigante.
Quizá por eso,y de forma tan injusta como constante, una propuesta tan sobresaliente como la que nos ocupa se suele olvidar a la hora de señalar los grandes hitos de la trayectoria profesional de Hitchcock. Un error considerable ya que, sin lugar a dudas, nos encontramos ante un trabajo intachable, repleto de hallazgos visuales, piruetas narrativas y una demostración imparable de tensión, intriga, elegancia, humor y sorpresas con el inolvidable sello de su principal responsable.
Protagonizada por una maravillosa Tippi Hedren, acompañada por un Sean Connery que es puro carisma y una Diane Baker especialmente inspirada, 'Marnie, la ladrona' deslumbra con la grandeza que habita solamente en aquellas películas que convierten lo sencillo en excepcional, la fluidez en hipnosis y los giros en descubrimientos de mandíbula desencajada. En definitiva, otra obra maestra que sumar a la lista de Hitchcock.
Curiosidades de 'Marnie la ladrona'
Derechos anónimos
En un primer momento, la estrategia de Alfred Hitchock para conseguir los derechos de la novela firmada por Winston Graham, 'Marnie, la ladrona', de cara a llevarla al cine era hacerlo de una forma anónima para lograr así un coste más bajo. Sin embargo, a pesar de que la cantidad era bastante alta, el escritor sospechó al no saber la identidad de la persona interesada, por lo que le pidió a su propio agente que pidiera el doble.
Tras conocer esta propuesta, Hitchcock aceptó de inmediato, aunque con la condición de que el acuerdo quedara automáticamente cerrado. Unos días más tarde, cuando Graham descubrió que era Hitchcock quien había conseguido los derechos de su obra, confesó que se los habría regalado solamente por poder decir que el cineasta había rodado una de sus historias.
Maquillaje perfecto
En el momento en el que la actriz Louise Latham apareció en el plató de 'Marnie, la ladrona' con su espectacular maquillaje correspondiente para el rodaje de uno de los momentos más importantes de la trama, uno de los cámaras de la película empezó a preguntarle a sus compañeros quién era la nueva actriz que se había sumado al proyecto.
Marnie, la frígida
Tras unos primeros ensayos de 'Marnie, la ladrona', Tippi Hedren se acercó a Hitchcock para comentarle lo complicado que iba a ser hacerle creer al público que su personaje era tan fría con el de Sean Connery teniendo en cuenta lo atractivo que era el actor. La respuesta del cineasta fue tan clara como genial: "Lo sé, querida, se llama interpretación".
¿Rodaje a distancia?
El enfrentamiento entre Hitchcok y Tippi Hedren fue prácticamente constante. De hecho, existe un rumor de que la tensión fue tan alta que, tras un conflicto especialmente duro entre ambos, el cineasta dirigió todas las escenas en las que aparecía la actriz a través de intermediarios. Sin embargo, años después fue la propia Hedren quien aseguró que eso no era cierto, aunque también confirmó que la amistad entre ambos terminó tras aquella traumática experiencia.
La favorita de Hedren
Más allá de los citados enfrentamientos entre Tippi Hedren y Alfred Hitchcock a lo largo y ancho del rodaje, la actriz siempre ha afirmado que 'Marnie, la ladrona' es la película favorita de toda su amplia trayectoria profesional. Comprensible.
Sin princesa
Uno de los sueños profesionales frustrados de Alfred Hitchcock fue el de contar con Grace Kelly para protagonizar 'Marnie, la ladrona'. ¿Por qué fue imposible este reencuentro? Por los ciudadanos de Mónaco, quienes se pusieron completamente en contra de que la actriz participara en la película ya que no querían ver a su princesa interpretando a una ladrona y manteniendo un romance con otro actor en pantalla.
Caballo robot
Desde el primer momento, Alfred Hitchcok se mostró en contra de usar un caballo mecánico para rodar algunas de las escenas de 'Marnie, la ladrona'. Sin embargo, por si acaso, envió a uno de sus ayudantes a que analizara uno de estos robots, el cual era propiedad de Disney, compañía que contaba con los mejores ejemplares de este material. La reacción del mismísimo Walt Disney al enterarse de que Hitchcock andaba interesado en uno de estos caballos fue ponerse en contacto con él para ofrecérselo personalmente, lo que terminó de convencer al cineasta para utilizarlo en la película.
Madre e hija
En 'Marnie, la ladrona', Louise Latham y Tippi Hedren, quienes interpretaban a madre e hija respectivamente, se llevaban solamente siete años en la vida real. Una diferencia mínima que no se descubrió hasta el año 2006, fecha en la que Hedren decidió revelar su verdadera edad, confirmando que no había nacido en 1930, sino en 1935.
El cameo de Alfred
'Marnie, la ladrona' cuenta, por supuesto, con un cameo protagonizado por Alfred Hitchcock, una de las tradiciones más célebres y celebradas del cineasta. En este caso, el director aparece saliendo de una habitación de hotel mientras la protagonista camina por el pasillo. Es fugaz, sí, pero fácilmente detectable.
Sin guion previo
La actriz Diane Baker no pudo leer el guion de 'Marnie, la ladrona' antes de aceptar o rechazar participar en la película. Simplemente le dijeron que era un proyecto dirigido por Alfred Hitchcock y que estaría protagonizada por Tippi Hedren. Suficiente para dar un sí.
