Para su reencuentro dos años después de la notabilísima 'Tigerland', Joel Schumacher y Colin Farrell firmaron con 'Última llamada' un maravilloso ejercicio de suspense cinematográfico que, partiendo de los elementos justos, conseguía atraparte y mantenerte al filo del asiento a lo largo de sus ajustados 80 minutos. La duración perfecta para una propuesta que sigue manteniendo intacta su capacidad para entretenerte de inicio a fin.
Nada faltaba y nada sobraba en un fabuloso divertimento al que un magnífico Farrell se entregó al 100%, demostrando a lo grande que podía cargar con todo el peso de una historia sobre las férreas espaldas de su talento. Por su parte, Schumacher imponía ese tono, ritmo y forma visual tan característico, convirtiendo la película en una auténtica montaña rusa de estímulos, planos imposibles y grandes escenas que funcionaban desde el mismo núcleo del vértigo.
El tiempo parece haberla escondido ligeramente en un segundo plano, pero 'Última llamada' continúa brillando en su condición de artefacto ideal a la hora de pasar un estupendo mal rato. Intriga y tensión hasta el final. Una joya que se ha ganado con creces una encendida reivindicación.
Curiosidades sobre 'Última llamada'
Más vale tarde que nunca
En la década de los sesenta, el guionista Larry Cohen le propuso al mismísimo Alfred Hitchcok la posibilidad de contar una historia que transcurriera exclusivamente dentro de una cabina telefónica, algo que entusiasmó en un principio al genial cineasta. Sin embargo, ninguno de los dos fueron capaces de encontrar un motivo argumental para llevar a cabo una película de estas características. Treinta años después, a finales de los noventa, Cohen dio con la tecla al incluir la figura de un francotirador, lo cual le llevó a escribir el guion en menos de un mes.
Al otro lado de la línea
El teléfono de 'Última llamada' funcionaba de verdad. De hecho, siempre había alguien al otro lado hablando con Colin Farrell, aunque no fue un Kiefer Sutherland cuya voz se añadió posteriormente en la etapa de la posproducción.
Duración y orden
Para facilitar el estado de tensión y concentración general, 'Última llamada' se rodó de manera cronológica. Además, lo hizo en un tiempo casi récord: diez días.
Opción Bay
Aunque Joel Schumacher hizo un trabajo fantástico en 'Última llamada', el cineasta que más cerca estuvo de dirigir la película fue, nada más y nada menos, que Michael Bay. Sin embargo, el director de 'Transformers' quería que la historia pasara más tiempo fuera de la cabina que dentro, lo cual resultó una diferencia insalvable.
Ocultando al enemigo
Para mantener la identidad del villano, el rostro y nombre de Kiefer Sutherland no aparecía en ninguno de los carteles originales de 'Última llamada'. Una ausencia que no cambió hasta la comercialización de la película en formato de vídeo doméstico, momento en el que ya se incluyeron ambos elementos.
Protagonistas
En un primer momento, el personaje protagonista de 'Última llamada' estuvo cerca de ser interpretado por, atención, Mel Gibson, Will Smith, Brad Pitt y, sobre todo, un Jim Carrey que estuvo realmente cerca de lograrlo.
Adaptación teatral
Pocos años después de su estreno, en 2009 para ser exactos, 'Última llamada' se convirtió en una obra de teatro estrenada en Japón. Según confesó el citado guionista Larry Cohen, quien admitió que no había ido a verla, esta representación se mantuvo en cartel con bastante éxito durante casi seis meses.
Apuesta por Colin
Aunque, como ya hemos comentado, fueron varios los actores que se barajaron para protagonizarla, Joel Schumacher siempre tuvo claro que quería a Colin Farrell como estrella principal de 'Última llamada'. Por su parte, los ejecutivos del estudio querían 100% a Jim Carrey, pero el director les aconsejó que vieran 'Tigerland' para que descubrieran las razones por las que el actor irlandés era la mejor opción. Y funcionó.
Sin directrices
Ninguno de los extras presentes en el rodaje de 'Última llamada' recibió instrucción alguna sobre lo que estaba ocurriendo a lo largo de los diez días de rodaje, simplemente se les decía que debían reaccionar en consecuencia a lo que fuera pasando. Una decisión que provocó que su respuesta ante los disparos fuera totalmente auténtica.
El papel de Leto
Jared Leto participó en 'Última llamada' interpretando a un actor de teatro con el que Colin Farrell compartía una escena muy breve en un callejón. Sin embargo, esta escena fue eliminada del montaje final de la película, siendo recuperada posteriormente para su emisión en televisión.