Aunque Hollywood nunca haya transmitido la sensación de agobio a la hora de encontrar al Sucesor, en mayúsculas, de los héroes de acción más representativos de la década de los 80, con Stallone, Willis y Schwarzenegger a la cabeza, la industria nunca ha dejado de lado esta misión. Hasta que llegó Jason Statham, claro. Ok, en los últimos años han aparecido numerosos aspirantes al trono, con incorporaciones a la batalla tan inesperadas y estimulantes como Liam Neeson o incluso Charlize Theron y Scarlett Johansson desde el lado femenino, pero la figura más representativa dentro del género ha sido la de Statham. Principalmente, porque su apariencia, actitud y modelo de personajes habrían servido de perfecta utilidad hace dos décadas.
Repasando su filmografía, una experiencia satisfactoria y frustrante en niveles bastante equiparables, que no equilibrados, uno se da cuenta de que Statham es cien por cien consciente de sus virtudes y defectos desde sus primeros trabajos. Y eso siempre supone una ventaja admirable. No es un gran actor pero sabe hacer su trabajo mejor que nadie. Sí, a su lado están Dwayne Johnson y Vin Diesel, especialmente el primero de ellos, pero Statham es más rudo, más violento, más impulsivo. En definitivo, es una figura de acción a la antigua usanza, con películas que funcionan tan bien en gran pantalla como lo harían en aquellos viejos videoclubs que tantos echamos de menos.
Por eso, a lo largo de este especial repasamos sus diez trabajos más representativos y notables, los personajes que le han convertido en una estrella y las películas que mejor han sabido aprovechar su carisma. Ninguna de estas cintas pasará a la historia del cine en términos puramente cinematográficos, tampoco lo pretenden, pero los aficionados al género, sumados a aquellos que admiren la capacidad y el atrevimiento que demuestran este tipo de intérpretes probando suerte en el terreno de la comedia, encontrarán en ellas argumentos de sobra para seguir elevando a Statham a los altares. Esperemos que no baje con el mismo método con el que ha conseguido subir, es decir, a base de golpes.
Las mejores películas de Jason Statham
'Snatch. Cerdos y diamantes'
La unión artística, más allá del compadreo socarrón Made in England, entre el director Guy Ritchie y Jason Statham supone una de las mejores fuentes de buenas noticias que podemos encontrar en la carrera del actor. Sirva como ejemplo más evidente la excelente 'Snatch. Cerdos y diamantes', con toda probabilidad la cinta más memorable en la que ha participado Statham hasta la fecha.
Una película en la que Ritchie recogía las virtudes más destacadas de su debut y las elevaba hasta el infinito con una de las propuestas más divertidas, contundentes y deslumbrantes que un siglo recién iniciado, hablamos de los 2000, vería en su primera década. Statham, por su parte, transmitía la misma sensación que el resto de sus compañeros de reparto, es decir, la de estar pasándoselo pipa en todo momento.
'Espías'
Jason Statham no necesita trucos para despertar la carcajada. Sí, ha probado suerte en el género de la comedia y la moneda ha caído del mejor lado posible. Eso sí, sin payasadas. Y es que el actor se sirve de su aspecto de tipo duro para, desde esa posición tan poco amable en la búsqueda de la simpatía del público, realizar una parodia del clásico héroe de acción. Es decir, dinamitar su estatus.
Una decisión tan valiente como acertado que encontró su cima con 'Espías', (muy) notable comedia en la que Statham se lo pasaba en grande y conseguía contagiar a los espectadores a través de monólogos brillantes, hilarantes de verdad, con los que robaba la función completa.
'The Mechanic'
Después de merendarse con patatas al resto de sus ilustres compañeros de reparto en 'Los mercenarios', Jason Statham se sintió preparado para protagonizar el remake de una película protagonizada por Charles Bronson en 1972 y llamada 'The Mechanic'. Sin miedo. Parecía el tipo de proyecto perfecto para el actor británico y así fue.
Hablamos de una cinta que no dejaba de ser un vehículo constante para el lucimiento de su protagonista, quien no debía esforzarse demasiado con un personaje que se basaba, de manera casi exclusiva, en poner la cara más seria posible mientras ejecutaba su trabajo. Es decir, mientras ejecutaba a personas. Afortunadamente, Statham encontró a un compañero de reparto ideal, Ben Foster, quien elevaba la película a otro nivel mucho más interesante.
'Lock & Stock'
Se nos ocurren pocas opciones mejores para entrar en la industria cinematográfica que 'Lock & Stock', cinta con la que Jason Statham tardaba, literalmente, una escena en acaparar la atención de la cámara. De esta forma, el actor entraba de lleno en la vida y obra de un director, Guy Ritchie, que también debutaba en el largometraje con esta brutal declaración de intenciones, un derroche de personalidad adaptado al polémico arte de la referencia constante.
Aquella primera historia de tramposos y capos que se enfrentan mediante cartas, persecuciones e insultos mezclados con alcohol, cigarrillos y sangres, se convirtió de manera casi automática en joya de culto. Un estatus que, lejos de desaparecer, se ha engrandecido con el tiempo. Y con toda justicia.
'Transporter'
La primera gran demostración del talento de Jason Statham para el género de acción a la vieja usanza la encontramos en 'Transporter', cinta que condensa en sus agradecidos noventa minutos todo el arsenal de virtudes y defectos que unen a la inmensa mayoría de propuestas protagonizadas por el actor.
Sin embargo, hablamos de una cinta clave en la carrera de Statham, concisa y contundente, solvente y efectiva, repleta de escenas de acción realmente notables. Un conjunto que, evidentemente, habría quedado en nada si el protagonista no hubiera funcionado al cien por cien. Y Statham lo hizo. Un pistoletazo de salida en toda regla.
'The Italian Job'
La revisión de la estupenda 'Un trabajo en Italia' que realizó un afortunadamente inspirado F. Gary Gray, permitió que Jason Statham compartiera pantalla con nombres tan relevantes dentro de la industria de Hollywood como Mark Wahlberg, Charlize Theron o Edward Norton. Y esa era la primera buena noticia para un actor que sumaba con esta 'The Italian Job', una de las cintas más accesibles y entretenidas de toda su trayectoria.
Su participación era claramente secundaria, pero Statham consiguió aportar dosis de su indiscutible carisma a una película que conseguía mantener y combinar la elegancia de su referente original con un ejemplar sentido del espectáculo. Otro notable para el actor.
'Fast & Furious 8'
En el momento en el que aparecían los títulos de crédito finales, 'Fast & Furious 6' ya había conseguido superar a sus cinco predecesora, pero por si acaso, la película se guardaba un golpe de efecto final de éxito seguro. Jason Statham se sumaba a la fiesta montada por Vin Diesel en el tiempo de descuento, y antes de confirmar que su fichaje por la saga iba en serio, nos dejaba con el entusiasmo justo gracias a un cameo que nos dejaba con las expectativas por los aires. Una sensación que se ha visto recompensada, con creces, en las dos entregas posteriores, especialmente en una octava parte de la que Statham se apoderaba a lo grande.
'Crank: Veneno en la sangre'
Con 'Crank: Veneno en la sangre', es imposible encontrar un término medio. Principalmente, porque la película nunca se plantea hacer otra cosa que no sea ir al límite absoluto de sus posibilidades en todos los sentidos. La mayor velocidad posible, la narración más trepidante, la locura colectiva, las escenas convertidas en nervio en estado puro.
¿Y Jason Statham? Dejándose llevar, colocándose en el mismo borde del abismo del exceso pero consiguiendo u control total de una situación que parecía ingobernable. La secuela fue una demostración de todos los errores en los que podría haber caído esta primera entrega, pero aquí estamos ante el lado bueno de la balanza.
'The bank job: El robo del siglo'
Aunque la historia más apasionante relacionada con 'The bank job: El robo del siglo' la encontramos en el mismo origen del proyecto, una historia que los productores aseguraron que estaba basada en hechos reales confirmados que no fueron publicitados a causa de una solicitud del gobierno para proteger a un importante miembro de la Familia Real Británica, estamos ante una de las películas más completas de la carrera de Jason Statham.
Un thriller de acción bien escrito, bien dirigido y bien interpretado que supone además una de las cintas más sólidas, elegantes y sobrias en las que ha participado el actor. Un Statham que se contagia del tono de la película y entrega una de las interpretaciones más notables de su trayectoria. Todos son buenas noticias con 'The bank job: El robo del siglo'.
'Los mercenarios'
Aunque su secuela fuera bastante mejor, sería absurdo poner muchas zancadillas a una propuesta tan honesta como 'Los mercenarios', una película que ofrece todo lo que esperas de ella. No engaña, es el tipo de producto que mediante reparto, tráiler, poster y promoción, no oculta su propósito y los medios empleados para alcanzarlo.
Colección de action mans con mayor o menor personalidad, en la que conseguía destacar, una vez más, un Jason Statham que se colocaba de manera definitiva la corona de mejor sucesor de las viejas glorias presentes. Su talento para protagonizar escenas de acción desenfrenada sin artificios y soltar frases lapidarias consiguió aquí una medalla de oro, convirtiendo en creyentes de la religión Statham incluso a los más reticentes. El aprendiz triunfando sobre los maestros.