Este año hemos disfrutado de la temporada de premios más corta de los últimos años. En las tres semanas pasadas pudimos disfrutar de los Goya, los BAFTA y los Oscar, y si hay algo que se repitió en cada una de las galas, fue la victoria de Laura Dern, Joaquin Phoenix, Renée Zellweger y Brad Pitt en las categorías interpretativas.
Al mismo tiempo, todo el mundo está de acuerdo en que ha sido Pitt quien ha robado el show a sus compañeros. El actor de 'Ad Astra: Hacia las estrellas' ha destacado gracias a unos discursos llenos de ingeniosos chistes y autorreferencias cómicas. Mucho se ha hablado de sus apariciones en los escenarios, pero ahora hemos podido saber que había una mente maestra tras estas apariciones estelares.
Pitt declaró para Variety que han sido sus divertidos amigos (como los cómicos Jim Gaffigan y Bob Oschack) quienes le han ayudado en esta tarea. Pero lo que nadie esperaba era que el actor hubiese recibido la inesperada ayuda del director David Fincher. "Mi amigo Fincher, hemos intercambiado pullitas cada semana", declaraba el intérprete. Algo que explicaría su discurso tras recibir el premio Maltin Modern Award en el festival internacional de cine de Santa Barbara:
"Ya no puedo hacer más sesiones nocturnas, y con mucho gusto le dejaré hacer la toma al especialista. Ya no recuerdo la primera regla del Club de la Lucha".
Ansiedad social
Al contrario de lo que podríamos pensar, Pitt quiso revelar que había trabajado tanto en sus discursos porque sufre mucho al hablar en público. "Sé que eso suena como algo totalmente opuesto, dada la profesión que he elegido, pero eso no es necesariamente lo mío. Entonces, en esta ronda, pensé que, si íbamos a hacer esto, pondría un verdadero trabajo en ello y trataría de sentirme cómodo y esto (los discursos) es el resultado de eso. Definitivamente estoy escribiendo".
