¿Qué sería del cine romántico sin los aeropuertos? Desde luego, un terreno mucho menos emocionante. Y es que, desde el mismo instante en el que el género descubrió que los minutos previos a la salida de un avión con destino al olvido y la pérdida tenían un potencial dramático absolutamente impactante para el espectador, no han dejado de aprovechar la mínima oportunidad para sacarles lágrimas. Algo especial sucede en la butaca cada vez que vemos a un personaje correr sin espacio para el respiro camino a la última llamada de ese avión que puede cambiar su vida.
Lo hemos visto decenas de veces, son escenas que es complicado que, a estas alturas, nos pillen por sorpresa, pero las recibimos siempre con una sonrisa en el rostro, con las manos entrelazadas de puro nervio e ilusión y con el deseo de que, pase lo que pase, todo termine bien. Es el hechizo inabarcable y felizmente indescriptible del cine romántico, capturar los momentos que nos sabemos (casi) de memoria con el fulgor, la incertidumbre y la sensibilidad de una constante primera vez.
Los aeropuertos son lugar de bienvenidas y despedidas, reencuentros ansiados, pañuelos empapados de lágrimas, carcajadas nerviosas, delirios colectivos, maletas perdidas, esperas compartidas, carreras a doble o nada, llamadas de penúltima hora, carteles con rostro propio, desenlaces inesperados, comienzos invisibles y abrazos que empiezan para nunca acabar. Los aeropuertos son cine en cada una de sus esquinas, en cada uno de sus aterrizajes forzosos y en cada una de esas últimas miradas previas al despegue. Por muchos años más llegando justo a tiempo.
12 escenas románticas en aeropuertos
'Wonder Woman'
A pesar de que el último tramo de 'Wonder Woman' fue de los pocos elementos que recibió críticas negativas tras el estreno de la, por otra parte, fabulosa película de Patty Jenkins, lo cierto es que, dentro de su espectacularidad y exceso apabullante, habitaba un corazón lleno de romanticismo y sorprendente dramatismo. La estupenda química demostrada durante todo la cinta entre Gal Gadot y Chris Pine terminaba de explotar en un clímax donde conviene prestar más atención a las miradas que a los golpes. Porque duelen y emocionan más.
Wonder Woman en eCartelera'El guardaespaldas'
Si juegas con la carta de la inmensa 'I Will Always Love You' en el último segundo, ni una duda, te llevas la partida. Y de calle. Si por algo ha conseguido 'El guardaespaldas' mantenerse como una especie de obra de culto para millones de espectadores ha sido gracias a escenas de una emoción tan indudable como este desenlace a ras de pista de aterrizaje.
El guardaespaldas en eCartelera'Casablanca'
Con toda probabilidad, 'Casablanca' cuenta con la escena de aeropuerto más inolvidable de la historia del séptimo arte. Casi nada. Además, por si no hubiera sido suficiente con la emblemática despedida entre Humphrey Bogart e Ingrid Bergman, 'Casablanca' se guardaba una (otra) frase inolvidable de esas que te dejan con la sonrisa tonta todo el día: "Louie, presiento que éste es el comienzo de una hermosa amistad". La soledad de un tipo duro, el último guiño de un personaje inolvidable que desaparecía en medio de la niebla para aparecer en el privilegiado reino de los iconos cinematográficos. Un clásico absoluto.
Casablanca en eCartelera'Love Actually'
Dentro del imponente catálogo de personajes maravillosos que habitan en la excelsa 'Love Actually', la gran comedia romántica del siglo XXI, los aeropuertos funcionan casi como un miembro más del reparto. Y es que, en numerosas escenas, este lugar de idas y venidas con horarios límite, se convierte en escenario perfecto para acabar riendo, llorando, bailando y aplaudiendo. Todo en esta joya es un lugar en el que quedarse a vivir para siempre. Con y sin aviones.
Love Actually en eCartelera'La proposición'
En el catálogo de comedias románticas protagonizadas por Sandra Bullock, no son pocas, 'La proposición' juega un papel especial y relevante por una cuestión pura de efectividad. Es decir, más allá de la evidente, casi inevitable, sucesión de tópicos y lugares comunes del género, la cinta dirigida por Anne Fletcher consigue cumplir con todos y cada uno de los objetivos que se propone sin caer en ningún momento en el terreno de lo aburrido o lo rutinario. Y eso incluye, claro, una clásica escena de aeropuerto que funciona a la perfección sin tratar de aportar nada nuevo, es decir, manteniéndose fiel a la tradición. Azúcar perfectamente medido.
La proposición en eCartelera'Algo para recordar'
La mirada de Tom Hanks al ver por primera vez a Meg Ryan bajar del avión. Ahí reside todo el inmenso encanto de 'Algo para recordar', una de esas comedias románticas que no han perdido ni un ápice de su radiante brillo desde su estreno hace ya más de dos décadas. Infalible.
Algo para recordar en eCartelera'Cuando Harry encontró a Sally'
Volvemos a encontrarnos con la mejor versión posible de Meg Ryan, una de esas actrices que, especialmente durante su etapa dorada dentro del género, consiguió enamorar tanto a un buen número de personajes masculinos como a millones de espectadores. En esta ocasión, y aunque la escena se produzca ya en pleno vuelo, no podemos hacer otra cosa que incluir este delicioso momento de 'Cuando Harry encontró a Sally', enésima demostración del impecable guion firmado por la maravillosa y añorada Nora Ephron, una experta en la materia.
Cuando Harry encontró a Sally en eCartelera'Mentiroso compulsivo'
Bienvenidos al show de Jim Carrey. Una fuerza cómica de la naturaleza estallando con tanta contundencia como talento en uno de sus trabajos más incontestables, la hilarante 'Mentiroso compulsivo'. Reinvención de la clásica escena de aeropuerto desde la carcajada absoluta. La risa y el amor, unión de oro.
Mentiroso compulsivo en eCartelera'Súper empollonas'
Ni siquiera la (terrible) traducción de su título original ('Booksmart') consigue herir a una de esas películas que necesitan poco más que un prólogo para arrebatarte el corazón. Y es que, desde su hilarante escena inicial, el debut como directora de Olivia Wilde supone una apabullante demostración de talento constante a la hora de combinar el sentido del humor con la ternura, la compleja inseguridad que acompaña todo salto al mundo adulto con la certeza de que hay amistades que no entienden de calendarios ni huidas hacia adelante. Sirva como perfecto ejemplo esta escena capaz de unir el nudo en la garganta y la sonrisa cómplice con aplastante facilidad. Y, claro, lo de Kaitlyn Dever y Beanie Feldstein. Menudo espectáculo.
Súper empollonas en eCartelera'Navidades, ¿bien o en familia?'
Incluso en propuestas tan irregulares como 'Navidades, ¿bien o en familia?' podemos encontrar escenas tan geniales como la que nos ocupa. Y es que, con la inestimable ayuda de la siempre agradecida presencia de Olivia Wilde y la preciosa versión interpretada por la gran Nina Simone de 'To Love Somebody', uno de los clásicos esenciales de los Bee Gees, estamos ante, sin lugar a dudas, el mejor momento de la cinta dirigida por Jessie Nelson. Imposible verla sin ceder espacio a la sonrisa tonta.
Navidades, ¿bien o en familia? en eCartelera'Algo en común'
Zach Braff debutó como director con 'Algo en común', un largometraje que nos hizo soñar a todos con el descubrimiento de un cineasta con una sensibilidad especial para la construcción de diálogos brillantes, personajes repletos de encanto y ausencia total de vacías pretensiones. Lástima que el tiempo nos haya quitado la razón por completo y sigamos esperando un regreso a la altura de su primer trabajo, marcado por todas las virtudes que se pueden encontrar en el cine independiente americano más representativo.
Imposible resistirse a un guion repleto de frases memorables y a una pareja protagonista, formada por el propio Braff y Natalie Portman, de los que querríamos ser amigos. En el caso de la actriz, aquí tenemos su interpretación más natural y refrescante, uno de esos trabajos de los que cuesta creer que no se trate de una improvisación constante. Nos iríamos a todos y cada uno de los aeropuertos del mundo con ella.
Algo en común en eCartelera'La terminal'
La influencia del cine de Frank Capra terminó convertida en homenaje en toda regla en 'La terminal', otra de esas cintas despachadas de la manera más frívola y vaga posible como obra menor dentro del deslumbrante catálogo Spielberg.
Una sentencia alejada del análisis que se derrumba por todos los frentes cuando se observa con detalle una propuesta repleta de buenas intenciones, estupendas interpretaciones, con un genial Tom Hanks a la cabeza, y, por encima de todo, una sabiduría absoluta en la puesta en escena. Elementos que se fundían con cariño y emotividad en una historia, basada en hechos reales, estructurada como carta de amor a un tipo de cine que, sencillamente, ya no se hace. Lo mismo que le sucede a una escena tan fantástica como la que podemos disfrutar a continuación:
La terminal en eCartelera