El mundo ha visto crecer a Joseph Gordon-Levitt gracias al cine y la televisión. El actor lleva 25 años de carrera, y desde entonces ha tenido muchos éxitos y algún fracaso, y a sus 32 años se ha lanzado a la dirección con 'Don Jon', una película en la que también ejerce como guionista y protagonista.
'Don Jon' se trata de una comedia original, en la que Joseph Gordon-Levitt muestra una vez más que es un buen actor, que puede llegar a ser un buen director, pero que tiene mucho que aprender como guionista al haber construido un texto bastante simple y que quiere entrar en el género cómico con chistes soeces que a veces hacen gracia y otras dan un poco de pena.
Su personaje es el protagonista de esta película que parece un 'Jersey Shore' llevado al cine. Don Jon es un italoamericano que vive en Nueva Jersey y para el que lo más importante es: "Mi cuerpo, mi casa, mi coche, mi familia, mi iglesia, mis chicos, mis chicas y... mi porno". Su vida pasa entre juergas con sus amigos, misa de domingo, confesiones con el cura, comidas con sus padres y su hermana, el gimnasio y el sexo vacío cada noche con una mujer.
Pronto queda claro que el sexo es uno de los argumentos principales de la película, aunque lamentablemente para el 'Don Juan' de Nueva Jersey, tener relaciones sexuales no le llena y necesita desesperadamente aliviar sus necesidades fisiológicas con porno, un vicio que termina siendo un problema.
Y entonces aparece Barbara Sugarman, una joven a la que no consigue engatusar en una noche y con la que quiere algo más. ¿Será ella la que le libere de su adicción? El personaje de Scarlett Johansson resulta un tanto chocante. Se presenta como una choni y acaba derivando en pija, aunque quizás sea una pija-choni, una inquietante mezcla que de cualquier forma está bien interpretada por la actriz, que desprende sensualidad y erotismo en todos y cada uno de los planos que protagoniza. Además, resulta curioso cuando Don Jon cotillea su perfil en Facebook, donde aparecen fotos que bien podrían ser una forma de reírse de sí misma por la filtración de sus imágenes desnuda, eso sí, aquí sale vestida.
Y qué decir de la hermana de Jon, papel interpretado por Brie Larson, que encarna a la típica joven que solo piensa en escribir por el móvil, pero que parece que no se entera de nada, y sí, se entera de todo. Los padres de Don Jon, Tony Danza y Glenne Headly aportan gran credibilidad a la película, y consiguen arrancar sonrisas por su exageración y la autenticidad de sus personajes.
Una película con resultado agridulce
Julianne Moore es el contrapunto, el personaje femenino antagonista al de Scarlett Johansson. Aparece un poco por casualidad, aunque viene para quedarse, ganando minutos conforme avanza el metraje. La calidad interpretativa de esta actriz está fuera de toda duda, pese a que la Academia de Hollywood no la haya premiado nunca con un Oscar, una injusticia que no va ser resuelta al menos con esta película. A pesar de ello puede estar más que orgullosa de su trabajo como Esther, un soplo de aire fresco en la vida de un Don Jon más que perdido.
Los personajes son divertidos, los actores cumplen con su trabajo, la película no está mal hecha, el guion tiene sus puntos pese a ser algo flojo, y dura 90 minutos, por lo que no se hace larga, sin embargo el resultado final no es todo lo bueno que cabría esperar, dejando una sensación un tanto agridulce, aunque siendo justos, el dulce consigue superar a lo agrio. Eso sí, para redondearla (para bien o para mal), faltaría el cameo de alguien como por ejemplo Snooki, que no desentonaría en absoluto en 'Don Jon'.