No es ni la primera ni la segunda si no la tercera vez que Cillian Murphy trabaja en una película de Christopher Nolan, y es que según parece, el director de 'El truco final (El prestigio)' o 'Memento' entre otras, pensó en un primer momento en el actor irlandés para el papel protagonista en 'Batman Begins', eligiendo finalmente a Christian Bale y relevando a éste al puesto del Dr. Crane alias El espantapájaros.
Por tanto podemos decir que Murphy es uno de los favoritos del aclamado director. Por ello, no es de extrañar que éste le reservara un papel en 'Dunkerque', la primera película de género bélico del director, que será estrenada este verano el 21 de julio. La película escrita y dirigida por Nolan cuenta un hecho real. Un hecho que tuvo lugar en una pequeña ciudad de la costa francesa (cuyo nombre ha adoptado la cinta como propio) durante la Segunda Guerra Mundial. Y sí, esto supone toda una novedad ya que al contrario que el resto de películas guionizadas y dirigidas por Christopher Nolan, esa historia tiene un final que podemos encontrar en los libros de historia.
Así lo afirma abiertamente Cillian Murphy para 'The Guardian': "Todo el mundo sabe lo que pasó en Dunkerque, así que no se puede alejar demasiado de los hechos. No es como con 'Origen' o 'Interstellar', no hay una gran revelación final". Así de simple.
La cinta producida y distribuida por Warner Bros. Pictures contará con caras recurrentes en las películas de Nolan como la del propio Cillian Murphy y Tom Hardy, quien hizo de Bane en 'El Caballero Oscuro: La leyenda renace', y de Eames en la película protagonizada por Leonardo DiCaprio; además de Mark Rylance, Kenneth Branagh, Harry Styles, Jack Lowden, Aneurin Barnard y Fionn Whitehead.
Una historia con final fijo
El periodo entre el 26 de mayo y el 4 de junio de 1940 fue llamado "El milagro de Dunkerque" por Winston Churchill por lo que pasó en la ciudad costera francesa de Dunkerque. ¿Por qué? 338.226 soldados aliados británicos, belgas, canadienses y franceses fueron afortunadamente evacuados a través de la playa gracias a 800 barcos, mezcla de la Armada Real, la flota francesa y pequeñas embarcaciones de la zona. La conocida también como Operación Dinamo salvó así a más de 300 mil hombres tras la invasión de Francia por el ejército nazi.
A pesar de ello, 68.000 hombres perdieron la vida en la huída y Winston Churchill declaró unos días después en un discurso en la House Of Commons: "Debemos tener mucho cuidado de no asignar a esta liberación los atributos de una victoria. Las guerras no se ganan con evacuaciones".