Dylan O'Brien no sólo es conocido por su papel protagonista en 'El corredor del laberinto'. El actor también puso cara a Stiles en 'Teen Wolf' y lo veremos pronto en la gran pantalla como Mitch en 'American Assassin', que se estrena el próximo 2 de noviembre. Pero continuar con estas historias no ha sido fácil para él desde que sufriera un terrible atropello durante el rodaje de 'El corredor del laberinto: La cura mortal' en verano de 2016.
Entre otras heridas, O'Brien se fracturó la cara y sufrió un traumatismo cerebral, por lo que estuvo durante meses recuperándose. Pero la peor parte fue psicológica. "Perdí la capacidad de funcionar, incluso en mi rutina diaria. Ni siquiera sentía que pudiese manejar situaciones sociales, mucho menos aparecer y ser responsable de un trabajo cada día. Largas horas en el set, actuar y llevar una película... te hace sudar", contó en una entrevista para Vulture.
Sin embargo, el actor tiene una queja aún mayor. "Había una parte de mí que se sentía presionada y estresada por [...] toda esa gente mandándome correos", cuenta O'Brien. "Me cabreaba muchísimo. Si en algún momento me llegaba algo de un productor que miraba cuándo podría volver al rodaje, me volvía loco. Me molestaba de verdad". Y es que, al principio, el estudio intentó reorganizar el horario para mantener la fecha de estreno de 'El corredor del laberinto: La cura mortal'. Esto resultó imposible.
El actor se planteó pedirles que continuasen sin él. De hecho, tras el accidente, se preguntó incluso si realmente podía continuar con su carrera: "Estuve en un sitio muy oscuro durante algún tiempo, y el camino de vuelta no fue fácil. Hubo momentos en los que no sabía si lo haría de nuevo... y ese pensamiento también me asustaba".
El regreso a la gran pantalla
Finalmente, O'Brian retomó la interpretación con el rodaje de 'American Assassin' e incluso volvió a aparecer en la temporada final de 'Teen Wolf'. Pero la prueba más difícil fue volver al set de 'The Maze Runner'. "Sabía que iba a ser duro, más duro que 'American Assassin' probablemente, pero pensé que si podía pasar por eso entonces, podría pasar por esto, y que saldría muy feliz de haberlo hecho. Y así fue".
El actor comienza esta etapa de su vida con optimismo tras unos años terriblemente difíciles. "Salir al otro lado del túnel es un nuevo capítulo, y creo que lo afrontaré de manera diferente". Tras terminar con 'Teen Wolf' y 'El corredor del laberinto', las oportunidades se abren de par en par para O'Brien, que disfruta de total libertad para su renovada carrera.