En 2001 la conocimos de forma oficial, pero llevábamos muchos años imaginando el rostro y la voz de Emma Watson. Para ser exactos, cuatro años, el tiempo que separa la publicación de 'Harry Potter y la piedra filosofal', maravillosa novela que daba comienzo a una saga literaria inolvidable, y su adaptación cinematográfica, más que notable introducción a la gran pantalla del universo mágico creado por J.K. Rowling. A esas alturas, comienzo de la década de los 2000, ya habíamos creado nuestra propia versión mental de Hermione Granger, la alumna ejemplar, la compañera esencial de Potter, la sabionda y encantadora. Y fue entonces cuando llegó Watson para cumplir con todas las expectativas.
No necesitó más que una película para convencer a los más escépticos de que ella era Hermione, transmitiendo todas las sensaciones e impresiones que su personaje presentaba en el papel. La cuestión, a partir de ese instante, era saber si Watson conseguiría algo más en su carrera, si su trayectoria no quedaría condenada para siempre, entre comillas, a la saga Potter. Y, al igual que su compañero de reparto, Daniel Radcliffe, disipó todas las dudas a base de proyectos diferentes, arriesgados, e imprevisibles.
A continuación, repasamos precisamente todas esas cintas con las que Watson se alejó de Hogwarts y la magia, consiguiendo sumar tantos éxitos, algunos de ellos históricos, como fracasos incontestables de crítica y público. Una trayectoria que, en cualquier caso, estamos seguros que todavía tiene muchas sorpresas para darnos. Estaremos siempre atentos.
Emma Watson más allá de Harry Potter
'Mi semana con Marilyn'
Despachada en su momento, de manera injusta, como poco más que un biopic al uso medido al milímetro para conseguir premios, 'Mi semana con Marilyn' sigue destacando como una de esas cintas situadas tan lejos de lo excelso como del fracaso. La cinta dirigida por Simon Curtis centraba su mirada en la experiencia británica de Marilyn Monroe durante el rodaje de la película 'El príncipe y la corista' consiguiendo, con los elementos mínimos, un resultado plenamente asentado en el notable.
Sobresalía, claro, la interpretación central de una maravillosa Michelle Williams, pero su esfuerzo protagonista no hubiera sido lo mismo sin un grupo de personajes secundarios que complementaban y engrandecían el conjunto. Y ahí es donde aparece una Emma Watson recién salida de Hogwarts que, con un papel bien pequeño, consigue brillar en cada una de sus escenas con esa luz tan especial que la caracteriza. Un primer gran paso.
'Las ventajas de ser un marginado'
'Las ventajas de ser un marginado', adaptación de Stephen Chbosky de su novela homónima, esquiva todas las trampas que se le ponen por delante, el tópico y lo previsible, por la absoluta devoción que siente hacia sus personajes, contando su historia con el corazón, de manera apasionada y delicada al mismo tiempo. Regala momentos preciosos para una película que nunca deja de tener presente el dolor como elemento imprescindible en el proceso de crecer y madurar. La inevitable balanza de cosas buenas y malas. Las despedidas y los reencuentros. Los primeros besos y los últimos regalos. Escribir como método para contarle a alguien que no está lo que ya no puedes decirle.
Puede que 'Las ventajas de ser un marginado' tenga mayor o menor impacto dependiendo del estado emocional frente al que te enfrentes a ella pero lo que es innegable es que todos, ya sea hoy, ayer o mañana, nos hemos sentido solos en alguna ocasión, nos hemos enamorado, hemos sentido la plenitud de una amistad, nos hemos entusiasmado, hemos perdido, hemos ganado, hemos hecho de una canción algo personal e intransferible. Todos hemos sido héroes alguna vez. Y, de lo contrario, siempre hay tiempo para sentirse, durante un instante, infinito. Aunque sea en una sala de cine. ¿Emma Watson? Aquí tenemos la mejor interpretación de su carrera. De lejos.
'The Bling Ring'
Con 'The Bling Ring', Sofia Coppola trajo un intento de poema narrativo que, por muy bien escrito que esté, no se entiende. ¿Está criticando a esas muchachas y muchachos que se pasan las noches robando en las casas de las celebridades más petardas del star system norteamericano? ¿Las estás aplaudiendo? ¿Se muestra comprensiva o autoritaria?
La directora y guionista reflexiona, otra vez, sobre la soledad de la fama, la tristeza infinita camuflada de alcohol, Facebook y fiestas y el vacío existencial de una juventud que, paradojas de la vida, lo tiene absolutamente todo. Una historia de la que se esperaba algo más. Necesitaba algo más. ¿Lo mejor? Una Emma Watson provocadora, divertida, liberada, pija, chuleta y niñata.
'Juerga hasta el fin'
'Juerga hasta el fin' utiliza la parodia, el sentido del ridículo, para que todos consigamos entrar de lleno en su propuesta. Como si de una especie de 'Los Vengadores' de la comedia se tratara, Seth Rogen, Jay Baruchel, Jonah Hill, Craig Robinson y un tremendo Danny McBride, se citan en la casa de un estupendo James Franco, para dar rienda suelta a un humor liberado, delirante, exagerado, repleto de frases ingeniosas combinadas con momentos de un hilarante humor físico donde Hill destaca por encima de todos.
Estamos hablando de tipos que necesitan poco más que un gesto, una palabra, una mirada para conseguir hacer reír en una bomba de relojería que explota todas sus esencias con el público que conozca sus carreras, las cuales son, también, objeto de burla casi permanente. En lo que respecta al papel de Emma Watson, se trata de una participación cien por cien secundaria, pero la actriz da en todo momento la sensación de estar pasándoselo pipa, sumando con gusto y gozo a su trayectoria una de esas comedias que conviene reivindicar con insistencia.
'Noé'
Cuando nos enteramos de que la nueva película de Darren Aronofsky iba a ser una adaptación a la gran pantalla de la historia bíblica del arca de Noé, muchos empezamos a dar forma en nuestra cabeza a lo que podría salir de esa combinación. Las posibilidades eran tantas, tan descabelladas y temerarias, tan expectantes y cautelosas, tan ansiadas y dubitativas, que se nos pasó valorar la opción que finalmente ha sido, la de La Nada. Porque, la mezcla de uno de los directores más arriesgados, originales e imaginativos aparecidos en los últimos años, responsable de dos obras tan apasionantes, excelsas, como 'Réquiem por un sueño', 'Cisne negro' o la reciente 'Madre!' con esta historia de múltiples lecturas ponía los dientes largos, se las prometía felices y dejaba infinito margen para una sorpresa que, al final, no llegó.
'Noé' es una película que se deja ver, que cumple las dosis mínimas de entretenimiento, que navega entre dos aguas, las del espectáculo de aventuras y acción para toda la familia y el drama humano, reflexivo y profundo más pretencioso que conseguido. Y pare usted de contar. Nada más que rascar en una película que por ambiciones y responsables, debería haber dado mucho más. Muchísimo. Nos queda, en esa balanza de cosas positivas, destacar la interpretación de una Emma Watson entregada a la causa. Su sello de identidad.
'Regresión'
En 'Regresión', Alejandro Amenábar tiene siempre claro el lugar al que quiere llegar y se muestra impaciente por alcanzarlo, pero todos los caminos escogidos se encuentran situados en tierra de nadie. No funciona el drama, no funciona el misterio y no funciona Amenábar. Estamos ante un director que sabe generar tensión, con capacidad más que demostrada para agarrar al espectador por la solapa y mantenerlo en vilo, atento a cada giro, devorando las sorpresas que se esconden detrás de cada puerta, por eso decepciona tanto encontrarle perdido. Su buen hacer sigue ahí y varias escenas subrayan su grandísimo talento pero, en esta ocasión, no es más que la tabla de madera débil a la que agarrarse en medio de un naufragio del que no consiguen salvarse ni sus protagonistas.
Ethan Hawke enciende el piloto automático y reincide en tics y gestos ya conocidos mientras que, Emma Watson, hace lo que puede con un personaje sin pies ni cabeza, mal presentado y terriblemente desarrollado. Su Ángela es el ejemplo más evidente del error de 'Regresión'. Una pieza en el tablero cuyas decisiones se alejan de la coherencia y se convierten en excusa de su creador para que todo termine encajando y el mensaje llegue a buen puerto.
'Colonia'
Emma Watson se marchó hasta Alemania para protagonizar este desastre junto a Daniel Brühl y Michael Nyqvist que narraba, de manera profundamente aburrida, la historia de una pareja que se ve envuelta en el golpe de Estado de Chile en 1973 contra Salvador Allende. Una trama que podría haber dado algo de sí, pero que, a la hora de la verdad, termina siendo una sucesión sin descanso de bostezos, momentos de acción rutinarios e interpretaciones bastante decepcionantes.
Y, lástima, eso incluye a una Watson que parece no encontrarse cómoda en ni una sola de las escenas en las que está presente. Y son prácticamente todas. Estrenada el mismo año que la (muy) decepcionante 'Regresión', 'Colonia' ponía las cosas especialmente feas para la carrera de la británica. Hasta que llegó Disney.
'La Bella y la Bestia'
Protagonizada por una estupenda Emma Watson, que aporta el carisma y entrega necesarios para que su protagonista esté a la altura de las circunstancias, 'La Bella y la Bestia' se convirtió en uno de los mayores éxitos de la historia de Hollywood. Apuesta segura. Una revisión que contiene tantos destellos de inspiración (la relación entre el Gastón de Luke Evans y el LeFou de Josh Gad, sus números musicales, las nuevas canciones, el clímax final) como pequeños errores de cálculo narrativo, resumidos en un tramo central carente de ese encanto que no podía quedarse por el camino bajo ningún concepto.
Aquellos que no conocieran los antecedentes, ¿existe alguien en esa situación?, encontrarán en este remake un entretenimiento de primer nivel para toda la familia, repleto de melodías memorables y estupendos personajes. Los que vengan con la lección bien aprendida, la mayoría, volverán a notar en más de una ocasión ese cosquilleo en el estómago que solamente los clásicos Disney consiguen despertar. Pedirle más sería demasiado.
'El Círculo'
La última película protagonizada por Emma Watson hasta la fecha tenía el número suficiente de atractivos como para esperarla con cierta ilusión. Dirigida por James Ponsoldt, responsable de dos joyas como 'Aquí y ahora' y 'The End of the Tour' y con un reparto en el que también estaban presentes Tom Hanks, John Boyega y Bill Paxton, 'El Círculo' prometía ser un apasionante thriller ambientado en el mundo de las nuevas tecnologías...hasta que se estrenó.
Las primeras críticas apuntaban en la peor dirección y, efectivamente, se cumplieron los pronósticos más decepcionantes: 'El Círculo' no tenía sentido del ritmo ni capacidad para atrapar en ningún momento al espectador, un desolador panorama al que había que sumar una sorprendente falta de compromiso de todos sus intérpretes. Porque, de acuerdo, Ponsoldt nunca termina de encontrar el tono que necesita la historia, pero, maldita sea, es demasiado evidente e incómodo comprobar lo mucho que se están aburriendo Watson, Hanks y compañía. Y eso es imperdonable.