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ENTREVISTA ECARTELERA

Arantxa Echevarría: "Dame 4 millones y te demuestro que las mujeres no sólo hacemos películas sensibles"

Entrevistamos a la directora Arantxa Echevarría con motivo del estreno de su aplaudida y polémica ópera prima, 'Carmen y Lola', sobre el amor de dos chicas adolescentes de etnia gitana.

Por Ana Bravo Díaz 7 de Septiembre 2018 | 13:59

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Entrevistamos a Arantxa Echevarría, la directora bilbaína que ha levantado tanta polémica como expectación gracias a su ópera prima 'Carmen y Lola', el film sobre el amor adolescente entre dos mujeres de etnia gitana.

Echevarría, nacida en el año 68 (el mismo en el que se comenzó a celebrar La Quincena de Realizadores en la que ha sido la primera española jamás nominada) nos habla de su película, del duro proceso creativo, de anécdotas del rodaje, del tema universal que trata su film, de la polémica y de la larga vida que le espera a 'Carmen y Lola' dentro y fuera de nuestras fronteras.

Arantxa Echevarría

eCartelera: En principio tu intención para 'Carmen y Lola' era rodar un film de aire más documental, y al trabajar con actores no profesionales fuiste adaptando la obra mientras se rodaba. ¿Cómo fue todo ese proceso?

Arantxa Echevarría: Yo escribí un guion, pero cuando llegas al mundo gitano te dicen "Esto no es así, aquí no se hace esto, esto es de payos". Entonces, en el mismo proceso de ensayos se transformaba, cada día había una copia nueva (ya estaban desesperados los del equipo), porque claro, de pronto me decía algo el actor y añadíamos, quitábamos... Era un guion muy vivo.

Hubo un momento que nos pusimos a rodar y yo soy muy academicista (tengo un storyboard plano por plano de la película aunque fuera un concepto documental, me imaginaba cómo sería todo el montaje). A la semana siguiente me llama el montador y me dice "vente para acá que no sé qué has hecho". Intentaba ser una película de ficción con actores no profesionales, con lo que ello conlleva y aquello no funcionaba. Menos mal que Renato San Juan, mi montador, me llamó y me contó eso, porque cuando llegué el lunes siguiente a rodaje le dije al equipo que esto tenía que fluir: no podíamos marcarles cosas a los actores, debíamos ser más rápidos, seguirles, marcar lo que queríamos en los planos sin ser tan técnicos (claro, la directora de fotografía se echaba las manos a la cabeza). Pero claro, desde ese momento fluimos. Ellos aprendieron cierta técnica, nosotros aprendimos la suya y surgió la magia.

eC: ¿Y cómo te planteas tu siguiente proyecto tras esta experiencia en tu ópera prima?

Arantxa Echevarría: Pues si te digo la verdad me encantaría hacer algo completamente diferente, porque ha sido agotador, es un proceso complicado. Levantar una película de este tipo, con actores no profesionales implica de ti mucho más de lo que crees. También emocionalmente, por la rabia de no saber explicar qué sientes para que te lo puedan reproducir.

Pero también esto crea "monazo", porque es una experiencia tan única... No hay ninguna película de gitanas lesbianas: creas algo, y juegas a un juego tan bonito... El hecho de hacer una inmersión tan bonita en una cultura que desconocía y que ahora conozco perfectamente, hace que me diga a mí misma "pues podría intentar hacer algo interesante también la segunda".

Sólo que también me gustaría romper el rollo de "género femenino"; me encantaría hacer una película de ciencia ficción pero de género, del estilo 'Hijos de los hombres'. En plan, "dame 4 millones de euros y te hago un peliculón para demostrarte que las mujeres no sólo hacemos películas sensibles"; estoy un poco harta de esos matices.

eC: ¿Qué pautas les dabas para actuar al ser actores no profesionales? ¿Tienes alguna anécdota?

Arantxa Echevarría: Al no ser actores profesionales no podía darles un texto y decirles "toma, vamos a hacerlo". Tenía que ponerles en una situación primero; además hablamos de una cultura diferente a la mía, y si buscamos una situación muy emocional,Zaira (Morales) puede no entender igual las cosas que a mí me emocionan, por ejemplo.

El día más desesperante fue el primero. Tenían una escena entre ellas de charla normal y le dije a Zaira: "Mírala con amor". Y Zaira, que tenía 16 años por entonces me mira y me dice "pues es que yo no me he enamorado nunca". Y yo claro, para mis adentros me decía "¡y cómo le explico algo así a alguien!". Así que tiré de técnica.

Por ejemplo, para hablar del amor, jugué con una de ellas a que imaginara la ternura y amor con la que trata a una hermana. Yo buscaba cosas personales; nos llegamos a conocer tanto que ya sabía la tecla que funcionaba. Trabajábamos siempre así, desde su verdad. Pueden hacer de sí mismas y eso era lo importante.

Arantxa Echevarría

eC: ¿Qué te han dicho los actores al ver el film?

Arantxa Echevarría: Pues les ha encantado. Yo tenía mucho miedo, porque esto es cine de autor y a ellas les gustan los blockbusters. Moreno (Borja) salió llorando, Carolina (Yuste) también salió con llorera, me abrazó y no podía parar. Las niñas no la vieron hasta el estreno en Cannes, porque yo no quería enseñárselo en un portátil, porque sé que iban a empezar "Ay qué fea..." y no se iban a meter en la película.

La primera proyección que surgió fue en Cannes, y decidí que se vieran allí. E imagínate la sensación: 4 minutos y medio de aplausos en el mejor festival del mundo. Ellas no podían parar de llorar.

Luego les pregunté por qué lloraban, me daba curiosidad. Y Rosy (Rodríguez) me dijo que lloraba porque alguien valoraba lo que hacía, porque pensaban que era válida para algo. Lloraba de emoción por eso y también tristeza porque se había acabado la película. Esto para ellas fue divertido no, lo siguiente: durante un verano fueron las estrellas. Imagínate, 60 personas detrás de ellas entre maquillaje, vestuario...

eC: ¿Sabes qué les han dicho desde su comunidad? Moreno Borja, el padre de Lola en el film, ha participado después en 'Arde Madrid'; pero ¿y tus dos protagonistas femeninas?

Arantxa Echevarría: Obviamente en el propio rodaje las insultaban. Por ejemplo, rodamos en pleno día de mercado en Entrevías, y las insultaban y nos decían cosas, porque es un tema muy tabú en la etnia gitana.

Ahora ellas han visto el lado payo de este mundo.Por ejemplo, Zaira va a ser la nieta de Carmina Barrios en 'El silencio del pantano'; y al verlo desde el otro lado les dan más igual los comentarios. Sólo espero que a partir de ahora les vaya muy bien y que no tengan que bajar las orejas.

eC: Felicidades por la nominación a los Premios del Cine Europeo y los Fénix, y sobre todo enhorabuena por haber sido seleccionada en la Quincena de realizadores de Cannes, la primera española en los 50 años de historia. ¿Por qué este festival?

Arantxa Echevarría: Porque para mí el festival de Cannes es el mejor festival del mundo. Encima la Quincena, que nació como un movimiento reivindicativo dentro de un festival que era demasiado academicista y se medio olvidaba de la sabia nueva. Fue entre toda la revolución de Mayo del 68, ¡el año que nací yo! Allí han estado Martin Scorsese, Sofia Coppola, Theo Angelopoulos... Aquellos que yo más he admirado toda la vida, su primera obra la expusieron ahí. Además, es una apuesta muy personal del festival por gente que le llama la atención.

La niña de 8 años que era yo cuando quería ser directora de cine de repente ve que está en el Festival de Cannes y pensé: "Yo ya me puedo morir tranquila; si no os gusta la película y no puedo hacer nada más me da igual". Yo he estado en Cannes y he recibido un aplauso de 4 minutos y medio. Eso ya no me lo quita nadie, fue una pasada.

eC: 'Carmen y Lola' contó con 750.000€ de presupuesto y 5 semanas de rodaje. Además, ha sido un proceso de varios años y con una temática tan controvertida no ha debido de ser fácil. ¿Te plantearías sacrificar un poco de tu libertad creativa a cambio de más dinero o mejores condiciones?

Arantxa Echevarría: Nunca. Yo cuando iba con la película a productoras me decían: "Esto no le interesa a nadie, pero... ¿Y si ponemos a Lolita Flores de madre o a Alba Flores de protagonista?". Y yo les entiendo porque es difícil ir con una temática como ésta y la gente tiene en su cabeza a los típicos actores. Pero les decía "Yo no puedo hacer esa película; ésa es otra, una muy bonita que seguro que se puede hacer fenomenal, pero yo mi película quiero que sea un cachito de verdad".

eC:En cuanto a esa verdad, ¿crees que el mundo payo se reconocerá en 'Carmen y Lola'?

Arantxa Echevarría: Una cosa que me gusta de la película y que buscaba conseguir ha sido la universalización. La pusimos en Munich y una chica con una pinta muy alternativa se echó a llorar y me dijo: "es que esa madre es mi madre". Una madre que quiere que su hija sea normal, que le dé nietos, etc. Hay como un pensamiento a veces de que los homosexuales son estériles, y es que esa madre de la película es la madre de muchas personas. Yo por ejemplo cuando dije en casa que quería ser directora de cine me dijeron: "¿Perdona? Te vas a morir de hambre" y cosas por el estilo. Es lo que tiene el amor madre e hija, y a veces también la incomprensión. Hacen las cosas porque te quieren.

Por ejemplo la reacción de la madre del film ante la condición sexual de su hija es porque no quiere que le den de lado; porque a sus ojos se ha jodido la vida (tanto en el mundo gitano como si tiene que salir así de sola y joven al mundo payo). Es una secuencia que hicimos en una sola toma, porque no son actores profesionales y no quería repetirla. Dije: "en montaje a ver qué hacemos". La actriz que hace de madre de Lola se desmayó al final de una escena muy emocional que grabamos, entre la intensidad, la rabia, la energía, el calor, las horas de rodaje... Porque claro, te lo dan todo, no son actores, te dan a ellos mismos.

eC: ¿Cuáles han sido tus referentes a nivel audiovisual a la hora de afrontar esta temática?

Arantxa Echevarría: Por ejemplo vi 'La vida de Adèle' de nuevo. Es una película maravillosa, muy buena, sobre todo por cómo trata el primer amor, pero me parecía una mirada muy masculina. Verlas follar está bien, pero 20 minutos... No me aportó nada muy nuevo aparte del minuto uno. Podría ser un referente pero no lo es, porque trata un amor muy físico, y el amor de mis protagonistas es el amor platónico.

Vi mucho 'Mustang', el concepto de luz y cómo abarcar la historia me gustó mucho. También 'Dheepan', del director de 'Un profeta' fue una película que vi mucho durante el proceso de 'Carmen y Lola'.

Arantxa Echevarría

eC:Después de tu carta pública tras la polémica de Pamplona, ¿ha mejorado tu relación con las asociaciones gitanas feministas?

Arantxa Echevarría: No tengo ninguna relación. Ellas ahora no han hecho ningún comunicado después del de mayo. Creo que cuando vean la película van a ver que es un malentendido. Mientras estaba haciendo el casting yo contacté con la Asociación de Gitanas Feministas por la Diversidad, pero fue una reunión muy triste.

eC: Felicidades también porque Latido Films va a realizar la distribución internacional del film, y Carlos Saura ha dicho de tu película que "devuelve el espíritu del cine español que viajaba por el mundo". ¿Qué opinas de esto y cómo te hace sentir, sobre todo de cara al estreno en España, a nivel global y en la carrera hacia los Goya?

Arantxa Echevarría: Me hace mucha ilusión porque Latido la lleva el hijo de Carlos Saura. Mi película se llama 'Carmen y Lola' no sólo por la 'Carmen' de Saura, sino porque hizo 'Los golfos', una película que todo el mundo debería ver porque es una crítica social brutal hecha en la época de Franco, como 'La caza'. Consiguieron pasar todo tipo de censura porque Carlos Saura es muy inteligente, uno de los grandes embajadores del cine español (de los primeros en ir a Cannes). Para mí Saura siempre ha sido un Dios. Mi trilogía son Saura, Buñuel y Berlanga. Y entonces me hacía especial ilusión.

Ya mismo se va a estrenar en Francia (ahora en noviembre), se va a estrenar en Bruselas, en los países escandinavos, se va a ver en Centroeuropa a través de HBO... Nos vamos al festival de Londres, al de Vancouver, al de Quebec; creo que le queda mucha vida a la película, que aunque la acabé hace un año es ahora cuando empieza lo grande.

¡Pero para los Goya aún queda mucho!