Claire Foy es un absoluto regalo para 'Millennium: Lo que no te mata te hace más fuerte' porque su particular talento para transmitir un impresionante abanico de emociones solo a través de su mirada le viene a Lisbeth Salander como anillo al dedo. Esta fría hacker crece en las manos de una dotada intérprete que asegura que todo estaba ahí, en la esencia de un personaje al que simplemente no se le había dado la cancha que se merecía. "No he intentado hacerla más humana, eso es algo que tiene el personaje, pero si es cierto que se profundiza más en ella", asegura una Foy convencida de que ese lado más humano "se percibe porque ella es el centro de la acción, no solo una mujer que fascina a Mikael Blomkvist".
El filtro feminista favorece así a una Salander fiel a todos esos atributos que han conquistado a los fans de la saga literaria, unas características que no suelen encontrarse en las protagonistas femeninas de las películas de espías al uso. De hecho Foy, ante la mención de propuestas como 'Atómica' o 'Gorrión rojo', reacciona dejando claro que por mucho que el estilo de esta nueva Millennium se acerque más a estas propuestas, su principal virtud la aleja de estas cintas. "A veces hay una tendencia a hacer películas de espías con una protagonista femenina que sea seductora, y a hacerlas emocionantes para atraer a los espectadores masculinos. Creo que en el caso de Lisbeth eso minaría las razones por las que la gente la quiere".
Foy nos habla también en esta entrevista de cómo se diseñó el impactante look de Lisbeth, de su disposición ante una posible secuela y de su relación con un personaje, interpretado anteriormente por Rooney Mara y Noomi Rapace, que ahora nos deja entrar un poco más en su círculo más íntimo, desnudando su pasado y abordando cómo su infancia ha condicionado toda su vida.
Así es la nueva 'Millennium'
Claire Foy lidera absolutamente esta propuesta dirigida por Fede Álvarez que se basa en la cuarta entrega de la famosa saga sueca, 'Lo que no mata te hace más fuerte', escrita por el sucesor de Stieg Larsson, David Lagercrantz. Junto a esta actriz, famosa por su interpretación de la Reina de Inglaterra en la exitosa serie de Netflix, 'The Crown', encontramos a un Mikael Blomkvist con mucho menos protagonismo interpretado por Sverrir Gudnason; y a Sylvia Hoeks en la piel de la fría villana de la película. La trama, que arranca con el robo de un peligroso programa informático, termina llevando al espectador hasta el traumático pasado de Lisbeth, luchadora incansable que no tendrá más remedio que enfrentarse a sus demonios.
