'Torrente 5: Operación Eurovegas' está a punto de aterrizar en nuestros cines, y como cada nueva entrega Santiago Segura ha preparado una comedia puramente cañí aderezada con pequeñas dosis de acción y crítica social. José Luis Torrente no tiene miedo a meterse en misiones cada vez más complicadas, y en esta aventura decidirá robar un casino tras salir de la cárcel y ver que todo su mundo ha cambiado.
Pero necesitará ayuda para ejecutar su plan. Ahí entra en escena Jesusín, alter égo cinematográfico del conocido torero y habitual en la prensa del corazón Jesulín de Ubrique, quien debuta en el cine con esta comedia. Desde el Casino Gran Madrid Colón, en pleno Paseo de Recoletos de Madrid, el diestro ha atendido a los medios durante la intensa campaña de promoción y hablado sobre su experiencia. Reconoce que el resultado le ha gustado, pero que cuando se lo propusieron tenía mucho miedo de no estar a la altura. "La experiencia ha estado bien, lo que pasa, que al principio estaba bastante indeciso, sobre todo, porque nunca había hecho cine", afirma.
Santiago Segura tras enseñarle el guion acabó despejándole de todos sus miedos. "Cuando estuve hablando con Santiago, me estuvo enseñando el proyecto de la película y especialmente el guion que yo tenía que hacer, me di cuenta que aquello era muy cachondo". Sin embargo, reconoce que los primeros días fueron muy duros, y que llegó a hablar con Santiago Segura para que tuviera un sustituto preparado por si no estaba a la altura.
Sobre el proceso de preparación del inadaptado Jesusín, dice que todo fue cuestión de repetir y ensayar mucho junto con preguntarse constantemente cómo afrontaría cada situación su personaje. "Ya cuando me cortaron el pelo, las patillas, dije: 'la madre que me parió, ¡Donde me he metido!'". Conforme los días fueron pasando, el padre de Andreíta comenzó a coger confianza: "Quitando el principio del rodaje todo lo demás fue genial. Me sentía cómodo, no solo con los actores, sino con la gente que está por detrás de las cámaras. Todo fueron facilidades".
De toros y familia
Jesulín lo tiene claro, es más fácil torear que actuar. "No tiene nada que ver. Una corrida son 20 minutos, sí o sí. Había días que Jesusín estaba allí preparado, y Jesusín no rodaba. La jornadas de rodaje podían durar hasta 12 horas...". También ha confesado que su personaje en un principio no tenía nada que ver con el mundo taurino, pero que habló con Santiago Segura para ver si podía meter un pequeño guiño. "Me dijo que le daría una vuelta y de ahí salió la escena de 'yo por los toros mato'".
