Han pasado de una barca a diez navíos. De Noruega se han ido a Australia para enfrentarse a una franquicia mil millonaria como 'Piratas del Caribe'. Joachim Rønning y Espen Sandberg recogen el testigo de Gore Verbinski y Rob Marshall y traen de vuelta a los cines al Capitán Jack Sparrow.
Hemos podido charlar largo y tendido con los nominados al Oscar por 'Kon-Tiki' (sí, tienen una cierta obsesión por el agua) en la presentación de la película en París. Los dos nos cuentan, con mucha ilusión, cómo consiguieron a Paul McCartney, si el tiempo de Australia les trató bien y cómo es trabajar con Johnny Depp en una saga en la que sigue siendo el centro. Pero, ¿podría sobrevivir la franquicia sin él? Les ponemos en el aprieto de tener que contestar.
eCartelera: ¿Era vuestro objetivo intentar contener la mitología de la saga, que se fue un poco de madre en la cuarta entrega?
Joachim Rønning: Sí y no. Estoy de acuerdo, creo que la historia se volvió un poco difícil de seguir en algunas de las 'Piratas' anteriores, aunque son películas geniales creo que se volvieron un poco largas. Hemos intentado destilarlas y hacerlas más emocionales sobre los personajes y hacerlas incluso reales en este universo.
eC: ¿Cómo se pasa de una barca en 'Kon-Tiki' a diez galeones?
J.R: Trabajamos muy duro para conseguir este trabajo, y la razón es porque la saga 'Piratas del Caribe' nos recuerdan un poco a las películas con las que crecimos, esas películas de aventuras, familiares. Spielberg, Zemeckis... Nos inspiraron mucho cuando éramos niños. Empezamos a hacer películas juntos cuando éramos muy pequeños. Siendo sinceros, esas películas nos inspiraron para convertirnos en cineastas. Y es lo que hemos querido hacer con esta. Tuvimos reuniones, muchas, y en mitad del proceso 'Kon-Tiki' fue nominada al Oscar, y eso ayudó mucho. De repente entras en un club que te ayuda a conseguir cosas como esta. Y recuerdo, seguro que alguna vez lo has sentido, conseguimos el trabajo, somos felices unos tres segundos y de repente te das cuenta. 'Mierda, ahora tengo que sacar esto adelante'. Es una responsabilidad enorme, queremos que sea genial. Nos encanta toda la franquicia, pero sobre todo la primera. Volvimos a ella y analizamos por qué nos gustaba tanto, y por qué se convirtió en un fenómeno. Tiene aventura, espectáculo y acción, y un humor genial. ¡Y terror! Pero creo que lo más importante es que tenía corazón. Y se volvió muy importante en el proceso de escribir el guion con Jeff Nathanson y los productores que teníamos que devolver el corazón a esta quinta entrega, pero de una forma no vista en la franquicia hasta ahora.
eC: ¿Cuál ha sido el mayor reto de efectos especiales que ha tenido esta entrega?
J.R.: Para nosotros crear a Salazar fue un reto porque sabíamos que iba a depender mucho de los efectos especiales y había que encontrar la combinación de dónde empieza Javier Bardem y dónde los efectos.
Espen Sandberg: También quieres hacerle justicia, es un personaje increíble y no quieres ser el que joda su interpretación así que es una responsabilidad cuando tienes efectos tan cerca de una interpretación.
eC: Los villanos de esta saga siempre se llevan lo mejor en CGI...
E..S.: Y pueden porque son grandes efectos especiales, grandes actores e historias interesantes. Que tengan ese dolor en su interior hace que nos podamos sentir identificados con ellos y añaden capas a sus personajes y las historias.
J.R.: El pelo fue parte del proceso de diseño. Queríamos crear una apariencia fantasmal sin transparencias. Con el agua como referencia, hicimos como si fuera ropa flotando en el agua, el pelo y las partículas. Tardamos un largo año en conseguir lo que queríamos.
eC: ¿De quién fue la idea de la "españolización" de Salazar?
J.R.: Trajimos todos los pequeños "sabores españoles" al personaje y es genial porque es un rollo genial, al igual que trabajar con Javier Bardem, que es uno de los mejores actores del mundo y ha interpretado a algunos de los mejores villanos de la historia del cine. Conseguirlo para esta franquicia, que también ha tenido villanos increíbles, nos ha ayudado a subir el listón. Y por supuesto nos ponía un poco nerviosos por si no éramos capaces de estar a la altura, pero el personaje ya estaba escrito de forma brillante por Jeff Nathanson. Junto con Javier trabajamos muy duro para destilarlo y encontrar su alma, y en ese sentido encontrar la razón de su odio y hacerlo real. También hay una parte en el que es un fantasma con el pelo, trabajamos mucho en eso con Javier y el equipo de CGI y efectos especiales. Queríamos una apariencia fantasmal pero al mismo tiempo queríamos que Javier fuera Javier, no distorsionarlo mucho para conseguir la expresión, y él lo hizo de una forma muy interesante. Cuando es fantasma es como un toro herido, pero cuando es una persona real es el torero. Nos encantó.
E.S.: Él fue quien decidió beber de su propia cultura y lo hizo más rico para todos los que lo vean.
eC: ¿Cómo recordáis vuestra experiencia trabajando con Penélope Cruz en 'Bandidas'?
J.R.: ¡Oh, Penélope estuvo en este rodaje muchas veces y nos dijo que Javier era demasiado terrorífico y que sus hijos no iban a tener permiso para verlo. Qué pareja, ella es una de las mejores actrices del mundo y lo ha probado muchas veces. Cuando trabajamos con ella éramos bebés, no teníamos ni idea de lo que estábamos haciendo. Veníamos de hacer anuncios y de la escuela de cine y de repente te dan a Penélope, Salma Hayek y Luc Besson. En ese momento fue un poco abrumador. Pero es una persona maravillas y fue fantástico volver a verla, con Javier y con los niños. Está guapísima.
eC: La saga parece tener una maldición con las inclemencias del tiempo. ¿Qué os pasó a vosotros?
E.S.: Toda película tiene sus cosas, y somos de Noruega así que un poco de temporal está bien. Siempre habrá retos...
J.R.: Además, es una película que tiene lugar en el exterior. Si ruedas cien días vas a tener que toparte con algo por el camino así que creo que es por eso que todas las películas de la saga hayan tenido estos incidentes. Se ruedan en en el agua, en el exterior, en la jungla, en sitios tropicales, es una aventura en sí misma hacerlas.
E.S.: Tienes esa sensación cuando las ves. Vas a lugares, a mundos diferentes y eso es una buena sensación.
eC: ¿Cómo se os ocurrió la escena de la guillotina?
E.S.: Lo hablamos con Johnny, es importante para él que hiciéramos cosas que le inspiraran, como Buster Keaton o Charlie Chaplin y ese tipo de películas. Ese tipo de humor físico. Al ver la franquicia te das cuenta de que hay que llevar ese humor al siguiente nivel. Se nos ocurren estas cosas y lo fuerte es que tienes los recursos para ello, tienes la idea en la ducha y medio año y millones de dólares después, la han construido. Y es probablemente la mayor diferencia entre hacer una película independiente y hacer algo como esto. Aquí, si lo sueñas, lo construyen, y es fantástico, y también abrumador. En esta escena era importante para nosotros que la hiciera Johnny, que se metiera en la guillotina y poder girarlo, por su cara y por ver el pelo ondear por todos lados. Por suerte dijo que la haría sin problema.
J.R.: La rodamos al final del todo por si le cortábamos la cabeza. Pero es la parte divertida de hacer estas películas. Sí, te compran todos los juguetes que quieras. Y puedes hacer cosas espectaculares, no hay escenas pequeñas, aunque sea dos personas hablando en la playa sigues teniendo veinticinco caminos y todo el equipo.
eC: ¿Cómo fue trabajar con Johnny Depp, con todo lo que se ha dicho últimamente?
E.S.: Es increíble. Normalmente empezábamos el día en su caravana. Repasábamos el día y hablábamos de dónde íbamos a ir y revisábamos las líneas de diálogo. Siempre era lo mejor del día porque es tan divertido e inteligente y conoce a su personaje tan bien, se dibuja a sí mismo, tiene una imaginación única así que es genial. Luego él llegaba al set y se volvía incluso más divertido, fue un privilegio real y es tan bueno colaborar con él. Es muy dulce con todos y muy majo.
eC: ¿Es importante que Jack parezca un secundario en su propia película?
J.R.: Creemos que es clave. No debería ser el protagonista, porque es el personaje más conocido, pero no tiene arco. No ha aprendido nada al final de cada película. Sigue siendo el mismo, tan ignorante y temerario como siempre. Es la pimienta de la película, es importante que sea el ancla de los demás personajes que sí tienen arco y con los que puedes sentirte identificado en cierta medida. Tenemos a un par de personas normales rodeadas de gente loca y luego llega Jack Sparrow y las cosas se vuelven muy, muy raras. Y eso es lo divertido. Creo que es así como funciona la historia.
eC: ¿Podría sobrevivir la saga sin Jack Sparrow?
E.S.: No lo creo. Él es la película. Todos los personajes son importantes pero a él le necesitas en este universo.
eC: ¿Hay planes para continuar? En los tráilers se dice que es "la aventura final"...
E.S.: Eso es solo marketing de Disney.
J.R.: Es el principio de la aventura final.
eC: ¿Vosotros la haríais?
E.S.: Espero que la hagan, pero nunca sabes con estas cosas. A mí me encantaría hacer otra 'Piratas', creo que es una aventura increíble.
J.R.: Un privilegio.
E.S.: Un honor. Veremos cómo va. Nunca se sabe.
eC: ¿Cómo conseguisteis a Paul McCartney?
E.S.: Fue gracioso. Normalmente es Keith Richards el que hace estos cameos. Pero no podía esta vez por agenda, así que nos sentamos con Johnny y miramos una lista de posibles sustitutos. Paul McCartney estaba, por supuesto, en lo más alto de la lista. Johnny dice: 'Creo que tengo su número, vamos a llamarle'. Forman parte del mismo club. Empezaron a mandarse mensajes durante unos cuantos días, y empezaron a hablar cada vez más como piratas, y un día llegó y dijo: '¡Le tenemos!'. Y fue fantástico.
eC: ¿Cómo habéis hecho para mantener a los espectadores clásicos de la saga e intentar captar a las nuevas generaciones de piratas? La primera se estrenó en 2003...
E.S.: Trabajamos muy duro con ambos públicos. Queríamos que fuera una historia que se pudiera entender de principio a fin sola. Creemos que se puede, pero tiene muchas cualidades y capas que podrás apreciar si eres fan y has visto las otras películas. Hay cosas para todos. Cuanto más puesto estés en 'Piratas', más encontrarás, pero creo que es una gran aventura incluso si es la primera película de 'Piratas' que ves. Estoy seguro de que conseguirá que la gente quiera ver las otras.
eC: ¿Qué nos puedes decir del proyecto de 'Origin', la superproducción que preparas con Jerry Bruckheimer?
J.R.: Sí, estamos mi hermano y yo escribiendo el guion. Nunca osaría llamarme guionista pero hemos tenido un poco de tiempo durante la post-producción de esta película y ha sido genial poder hacerlo, mi hermano sí es guionista. Quiero contar historias y creo que es lo que nos inspira a los cineastas, contar historias es lo que queremos hacer. Y tener a Jerry al lado ayuda, ciertamente. ¡No hace daño!
eC: ¿Os planteáis volver al cine más pequeño?
E.S.: Creo que lo que importa es la historia. Y es difícil de decir de quién o qué te vas a enamorar. Voy a estar los próximos dos, tres, cuatro años con esto, así que tiene que significar algo para mí. Al final es lo más importante. Al final la base siempre es la misma. Simplemente en esta luego todo es más grande.
J.R.: Y no creo que seamos los típicos cineastas. Porque aunque los presupuestos de Noruega sean bajos, creo que se puede ver un... al menos una ambición y una sensación cinemática. En Noruega nos consideran directores de Hollywood, incluso con nuestras películas noruegas. Y en Estados Unidos somos artesanos.
'Piratas del Caribe: La venganza de Salazar' ya está en cines.
