Para seguir representando en una nueva película sus grandes temas (belleza, libertad, nostalgia), Paolo Sorrentino se propuso un gran reto: "la mayor dificultad era encontrar una actriz que pudiera interpretar a la vez a una joven de 18 años, con todo lo que implica tener 18 años, y a una mujer adulta de 35 años". De ese complicado casting y del Centro Experimental de Cinematografía italiano surgió Celeste Dalla Porta, una debutante que "había soñado con interpretar algo así desde que tenía uso de razón". Con el director italiano y con su 'Parthenope' pudimos hablar en el pasado 72 Festival Internacional de Cine de San Sebastián sobre cómo han dado una nueva vida a esos temas del ganador del Oscar por 'La gran belleza'.
Siguiendo con la tendencia de varios directores con sus cartas de amor a sus ciudades natales, Sorrentino ha vuelto a Nápoles para rodar allí un guion escrito por él mismo a partir de "las cosas que uno imagina, las cosas que uno ha vivido, las cosas que a uno le hubiera gustado vivir". Aunque él nació en 1970 y la película arranca en los 50, la protagonista que da título al film recorre todos los tipos de experiencias, relaciones y estratos sociales que el director ha podido vivir.
Celeste agradece a Sorrentino haberse arriesgado con ella para "poder representar una ciudad que yo no conocía y que empecé a conocer y a querer en el rodaje". En su primera película y con menos de 30 años, la joven actriz milanesa ha tenido que retratar así el encanto tanto de una bellísima e inteligentísima napolitana como el espíritu de toda la ciudad. Y así, a través de ella, confluyen dos de los temas omnipresentes en la filmografía del realizador: belleza y libertad.
"El tema principal de la película es la libertad y cómo llegamos a ella, ese camino hacia la libertad. Y, a veces, la belleza y la libertad no se llevan demasiado bien, también puede aprisionarnos así como hacernos más abiertos a diferentes posibilidades. Como dice la frase de Gary Oldman en la película, la belleza abre todas las puertas, pero es como la guerra, así que es compleja y es verdad que estos temas están en el fondo de la película."
Al igual que en la sociedad en general y en el panorama cinematográfico actual en particular, la nostalgia aparece de muchas formas en este guion de Sorrentino, a pesar de que él todavía tiene poco más de 50 años. Para la encargada de representar este sentimiento del director en pantalla, "esta película te da la oportunidad de sumergirte en esa melancolía y la nostalgia, que no tiene por qué ser necesariamente algo triste, es realmente una cosa que tienes y es maravillosa".
En su anterior película ('Fue la mano de Dios'), Sorrentino ya nos enseñó un poco de su juventud a través de un adolescente napolitano muy fan de Diego Maradona. Ahora, esa nostalgia se muestra también "a base de imágenes sensoriales" según Celeste. "Es muy bonito tener un lugar que representa un sentimiento humano, y así fue Nápoles para mí". Cuando le preguntamos en qué momento vital y cinematográfico se encuentra con respecto a la nostalgia, esto fue lo que Sorrentino nos respondió:
"Durante muchos años ha sido algo que he cultivado mucho. Últimamente he estado pensando mucho en una frase maravillosa que no conocía de un gran dibujante italiano llamado Andrea Pazienza que decía que nunca mires atrás ni siquiera para tomar carrerilla. Estoy intentando hacer mía esta frase para dejar de ser nostálgico o melancólico hacia el pasado. Paradójicamente, a medida que envejezco, empiezo a mirar más al futuro que al pasado. Así que ahora, en este momento actual, la nostalgia no me pertenece tanto."
Una debutante rodeada de leyendas
Durante ese viaje nostálgico y sensorial por Nápoles, Parthenope se encuentra con un personaje "muy humilde, delicado y muy sensible" interpretado por el oscarizado Gary Oldman. El veterano actor de 'El instante más oscuro' ya contó en el festival de Cannes cómo su propia experiencia vital de luchar con adicciones le había servido para dar vida a este poeta melancólico y alcohólico.
Con ese bagaje personal y su talento más que demostrado, Sorrentino admite que "él lo hizo todo. La realidad es que, puede sonar generoso por mi parte decir esto, pero hice muy poco trabajo con Gary Oldman. Es lo que hay cuando se trabaja con actores que son sencillamente tan buenos. Sólo le debí haber dicho tres cosas en total". Celeste confirma que aquí también se entremezclan realidad y ficción durante la epopeya vital de 'Parthenope' que se puede ver en cines españoles desde el miércoles 25 de diciembre.
"La relación con Gary Oldman era muy parecida a la que tenía Parthenope con el personaje, así que fue precioso. así no era tan difícil poder mirar a un artista como Gary con los ojos con los que yo tenía que mirar al personaje que interpretaba él, un actor muy humilde, delicado y muy sensible. También fue una relación muy especial porque ver trabajar a los grandes como decía Paolo es siempre una enseñanza. Quizá por eso, él fue muy servicial y generoso conmigo. Aportó muchísimo."
